Así quedaron conformados los frentes electorales para las PASO

Las agrupaciones políticas de la provincia están calentando motores para el próximo desafío electoral: conseguir una (o varias) de las cuatro bancas que se renuevan en el Congreso de la Nación.

Con ese objetivo, se tejen alianzan y se arman estrategias para seducir a un electorado hastiado de las campañas políticas -la del 2015 todavía es reciente en la memoria- y también indiferente al nuevo sistema de votación, que supone pasar dos veces por las urnas. La primera, el 13 de agosto, por las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y la segunda, el 22 de octubre, por las Generales.

En este contexto, el peronismo apostó a la unidad. El mensaje en todos los actos públicos fue la necesidad de limar asperezas y superar las diferencias que pudieran existir hacia el interior del movimiento del General Perón. De hecho, el Frente Justicialista por Tucumán (FJT) que se presentó en la Justicia Electoral el pasado 14 de junio, es el que reunió a más agrupaciones: un total de 10.

En esa decena están incluidos, por ejemplo, el Frente Renovador Auténtico, -que a nivel nacional responde a Sergio Massa-; la agrupación Kolina, identificada con Alicia Kirchner; el Frente de Unidad Ciudadana, presentado recientemente por Cristina Kirchner en un acto público en la cancha de Arsenal; y hasta Pueblo Unido, del radical Gumersindo Parajón.

En una entrevista con eltucumano.com el histórico dirigente de Villa Alem sostuvo que "en estos momentos, honrar la memoria de (Hipólito) Yrigoyen, (Leandro) Alem y hasta de Raúl Alfonsín, implica participar en un movimiento popular, como lo es el peronismo". De esta manera, plantó bandera frente a las políticas de Mauricio Macri y reveló cuál es el objetivo de los peronistas por estos días: frenar el avance de Cambiemos en la Provincia y en el país de cara a 2019.

Así parecen entenderlo también el gobernador Juan Manzur, el vicegobernador Osvaldo Jaldo y el senador José Alperovich, quienes en reiteradas oportunidades se mostraron juntos. Descataron de esa manera versiones sobre posibles fracturas por ambiciones propias de poder. Las expectativas acerca de que el actual gobernador pueda delinear una gestión sin la sombra de su antecesor en el cargo parece más lejana que nunca ahora, en vísperas de las elecciones que definirán los próximos dos años.

Sin embargo, en relación a las listas, Manzur evitó brindar definiciones. Todo indica que el Justicialismo presentará una lista y que los espacios de menor rango que integran el FJT, presentarán otra boleta. Allí se reunirían quienes se ubican dentro del movimiento justicialista y cuestionan al gobierno nacional, pero no comparten la alianza con José Alperovich. 

En la vereda de enfrente

Por su parte, Cambiemos para el Bicentenario (CpB) logró reunir a la Unión Cívica Radical (UCR), el PRO, el Movimiento Libres del Sur, la Democracia Cristiana y al Partido por la Justicia Social. A la cabeza de la boleta irá el radical José Cano, quien en caso de resultar electo abandonará su cargo como titular del Plan Belgrano para asumir en el Congreso de la Nación.

El gobierno nacional apostó fuerte llevando al radical a la cabeza, porque insiste en la dicotomía entre pasado y futuro. El "enemigo a vencer" es el alperovichismo en sus distintas versiones, incluida la manzurista. Para dejarlo en claro, puso en frente a Cano, su principal opositor desde hace más de una década. En caso de hacer una buena elección, el odontólogo quedará posicionado para volver a pelear por la gobernación en 2019, luego del sabor amargo que dejaron los últimos comicios.

Sin embargo, habrá algunas cuestiones para resolver en medio del camino. Confirmada Beatriz Ávila en el segundo lugar de la boleta, ahora Cano debe lidiar con los tironeos que sufre por parte del resto de las fuerzas que integran el CpB.

Federico Masso, por dar un ejemplo, exigió en los últimos días ser incluido en la lista y apeló a la "vocación de poder y equilibrio" del principal dirigente de la UCR en Tucumán. El PRO, por su parte, pide pista desde hace tiempo, para que Laura Costa -coordinadora provincial del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación- sea tenida en cuenta, teniendo en cuenta que viene del riñon macrista.La concejal Sandra Manzone, una de las principales puntales de la gestión de Germán Alfaro en la Capital, también pide una oportunidad para llegar al Parlamento.

Mientras tanto, suena el nombre de Roberto Sánchez, el jefe comunal de Concepción, como predilecto del titular del Plan Belgrano para una candidatura testimonial. En el camino quedó el secretario de Vivienda de la Nación, Domingo Amaya, que se rehusó a postularse en tercer lugar. Como si fuera poco, su pedido por el legislador Silvio Bellomio llegó a oídos sordos.  

Pelea por el 1,5%        

En cuanto a los frentes de Izquierda, se presentaron dos armados: Frente Amplio Tucumano y Frente Izquierda de los Trabajadores. El primero reúne a Unión Progreso Social, Partido del Trabajo y del Pueblo, Corriente Clasista y Combativa y al Partido Socialista. El segundo, al Partido Obrero y el Partido de los Trabajadores Socialistas. Sin embargo, la fuerte polarización de la elección, tal como sucedió en 2015, desdibuja sus posiciones ante la opinión pública. El mismo Parajón reconoció que la integración de Pueblo Unido a la izquierda durante algunos años, lo dejó al borde de perder la personería jurídica de su partido.

Finalmente, competirán también en las PASO, los partidos que participarán de manera independiente, sin alianzas. Estos son: Fuerza Republicana, Movimiento Socialista de los Trabajadores, Partido Laborista, Participación Ciudadana, Partido FE y Tucumán Innovador.

Estas agrupaciones enfrentan el desafío de obtener por cuenta propia el 1,5% del total de votos del padrón electoral, -unos 18 mil votos-, para seguir en carrera hasta las generales de octubre.