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De La Rúa pudo salvar al país del default, pero prefirió pedir a Bush por el limón

Relaciones bilaterales

El Presidente que asumió el mando de Argentina por la Alianza tuvo un encuentro con el ex mandatario norteamericano, justo el año en el que se estableció la traba a la exportación del citrus argentino al país del norte. Se conoció un detalle inesperado acerca de aquella conversación

Fernando de la Rúa desperdició una oportunidad ante George Bush hijo.





Allá, lejos en el tiempo, en aquel 2001 clave para la economía de Argentina, el por entonces presidente Fernando De La Rúa tuvo media hora para pedirle a George Bush hijo, por entonces presidente de Estados Unidos, que intercediera para evitar el default en su país. Sin embargo, decidió pedir por el ingreso del limón.

Justo en aquel año, Estados Unidos puso la traba al ingreso del limón argentino que hoy, la administración de Donald Trump asegura estar a punto de levantar. Aquel año en que estalló la crisis social, el por entonces presidente argentino usó los pocos minutos que tenía para pedir auxilio al mandatario norteamericano para intentar levantar aquella medida, en vez de pedir por alguna mediad macroeconómica que ayudara a Argentina a salir del paso.

 Con la Argentina al borde del default, el gabinete había convencido a De la Rúa de que pidiera a Bush ayuda urgente y extraordinaria. Una de las funcionarias que participó reprodujo la reunión en modo novelado.
“Teníamos apenas media hora para sensibilizar a Bush y lograr el salvataje y De la Rúa se iba por las ramas hasta que fue el propio Bush quien le preguntó si no tenía algún otro asunto relevante para plantearle. De la Rúa le respondió que lo había. Todos suspiramos aliviados. Pero casi nos desmayamos cuando en lugar de hablar de la deuda y del Fondo, le pidió que se levantaran las barreras a nuestra exportación de limones”.
Y casi 16 años después, otra vez los benditos limones. Trump, asesorado, dijo: “Yo le voy a hablar a Macri de Corea del Norte y Mauricio me va a hablar de limones”. Abrir el mercado norteamericano puede ser y es muy importante para los productores. Pero la Argentina exporta productos del agro por 30.000 millones de dólares. Los limones sólo contribuyen con el 1% de esta cifra. Los limones vuelven como si fuésemos grandes fruteros. El encuentro fue bien otra cosa, con cambio y cambio visible. Más allá del sainete de Lousteau y de su abandono de la embajada a días de la visita. Feria notable de vanidades. Más cambio y mejor cambio hubiera sido oir de Macri dónde va la Argentina y dónde queremos que vaya la región. Se perdió la oportunidad.

Según la columna que publicó Ricardo Roa en Clarín el 29 de abril ─titulada Cambian las épocas, pero los limones no─, una funcionaria que participó de aquel encuentro entre presidentes reveló parte del contenido de la charla que mantuvieron.

“Teníamos apenas media hora para sensibilizar a Bush y lograr el salvataje y De la Rúa se iba por las ramas hasta que fue el propio Bush quien le preguntó si no tenía algún otro asunto relevante para plantearle. De la Rúa le respondió que lo había. Todos suspiramos aliviados. Pero casi nos desmayamos cuando en lugar de hablar de la deuda y del Fondo, le pidió que se levantaran las barreras a nuestra exportación de limones”, expresó la funcionaria, cuya identidad no fue revelada.