Hugo Pastor Juárez fue una de las 232 víctimas de delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico militar en los centros clandestinos de detención que funcionaron en la sede de la jefatura policial tucumana y en las instalaciones del ex Ingenio Nueva Baviera. VIDEOS.
(Captura de video eltucumano).-
“El sabor va a ser toda la vida amarga, pero un poco contento porque la condena de parte de la familia mía ha logrado perpetua, pero el dolor que tenemos nunca se nos va a ir”, afirma el hermano de Hugo Pastor Juárez, una de las 232 víctimas de delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico militar en los centros clandestinos de detención que funcionaron en la sede de la jefatura policial tucumana y en las instalaciones del ex Ingenio Nueva Baviera.
Hoy el juicio por la megacausa “Jefatura III”, donde se condenaron a veinticuatro exmilitares y expolicías de Tucumán, llegó a su fin y se obtuvo diez cadenas perpetuas, siete penas altas y siete absoluciones.
La familia de Hugo Pastor Juárez hoy, después de tantos años, tiene un poco de paz: “He sido perseguida, a mi me han perseguido mucho por haber conocido a una persona que entró a mi casa. A mi hijo lo desaparecen un 8 de diciembre de 1976”, sostuvo Julia, la madre de Hugo, en diálogo con eltucumano. “Ahora quiero ver la condena cumplida en una cárcel común, toda la vida he pensado en mi hijo”, sostiene con dolor.
Por su parte, Carolina Frangulis, militante de HIJOS sostuvo luego del juicio: “Fue un proceso muy extenso, creo que la justicia está en las madres que han podido presenciar las sentencias de quienes han asesinado, desaparecido y torturado a sus hijos y en los nietos que ha podido declarar. Creo que esa justicia es la que hoy es la que nos hace cerrar un nuevo juicio por delitos de lesa humanidad de la provincia con la seguridad de que pronto empieza el primer juicio por apropiación”.
Con respecto a las absoluciones sostuvo: “Uno nunca espera absoluciones, sobre todo cuando el Ministerio Público Fiscal ha trabajado de manera tan enorme, con tanto esfuerzo y compromiso. Creo que una vez que se lean los fundamentos el ministerio va a lograr dar vuelta esta sentencia en casación”.
“Creo que en estos tiempos tan oscuros y hostiles haber tenido una sentencia aquí en la provincia hace que uno siga militando y parado en la vereda correcta”, manifestó.