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El conflicto del transporte público cumple más de un año sin solución

Crisis en el sector

Si bien la Provincia otorgó una ayuda financiera a las líneas de colectivo en diciembre de 2018, un mes después tanto los empresarios como los choferes manifiestan malestar por los números que no cierran. El viernes habrá un nuevo paro.





El conflicto del transporte de colectivos sumó en las últimas horas un nuevo capítulo, luego de que la Unión Tranviarios Automotor Tucumán (UTA) anunciara un nuevo paro de 24 horas para este viernes 8 de febrero.


La razón de esta nueva medida de fuerza se debe a que los dueños de las empresas informaron a los choferes que el sueldo de enero sería abonado en dos partes, una decisión rechazada por el gremio. "Los empresarios quieren pagar la mitad hasta el viernes y el otros 50% durante la próxima semana, sin fecha estipulada", se quejó en un comunicado César González, quien informó que el paro incluirá al transporte urbano e interurbano de la provincia.


Con la medida del próximo viernes, esta será la sexta protesta de UTA desde febrero de 2018. Tres por atrasos salariales, una por los casos de inseguridad y la restantes en adhesión a los paro nacionales dispuestos por CGT. Además, en octubre, los ómnibus no cumplieron con el servicio nocturno durante una semana en solidaridad con una resolución tomada por el gremio a nivel nacional.


Presión por un nuevo incremento


Desde mediados de enero, miembros de Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (AETAT) reiteraron la complicada situación del sector. Según el vicepresidente de la entidad, Jorge Berreta, el panorama se agrava por la quita de los subsidios nacionales y el atraso en el valor del boleto. Por ese motivo solicitó que el Concejo Deliberante de la Capital llame a sesiones extraordinarias para tratar una nueva suba, ya que el año pasado el valor del pasaje subió un 70%.


“Técnicamente el boleto mínimo en Tucumán tendría que pasar a costar de $15,50 a $29, pero nos conformaríamos con un pasaje de $25”, señaló Berreta durante una entrevista en el programa Los Primeros. El representante de los empresarios advirtió que, si no se resuelve la situación del transporte público en la provincia en 30 días, el servicio se precarizará y serán varias las empresas que tendrán que cerrar sus puertas.

En noviembre, luego de aplicarse la quita del subsidio nacional, el gobernador Juan Manzur anunció el aporte de $1.500 millones para evitar que el boleto alcance los $40 pesos. Un mes después, a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), el Ejecutivo otorgó un adelanto de $80 millones en subsidios del próximo año, para que los empresarios puedan hacer frente a las deudas salariales que mantenían con los choferes. todo indica ahora que este salvataje financiero, que se sumó a los $20 millones mensuales otorgados por fondos provinciales, no fue suficiente para aliviar la crisis del sector.


Los concejales rechazaron el paro


Al conocer la noticia de un nuevo paro que perjudica a los usuarios, el concejal Dante Loza tildó el monto pedido como "una locura”. "La gente no está en condiciones de pagar un boleto a $29. A ese precio, hay gente que viaja hasta cuatro veces por día y tendría que pagar $120 pesos. El Estado tiene que ponerse al frente de esta lucha, ya que el Gobierno Nacional se la hace bastante difícil con el aumento de las tarifas, el aumento de la nafta. Hay veces que no se puede, esto no da para más", se quejó el presidente de la Comisión de Transporte del Concejo en LV12.


Por su parte, el presidente del cuerpo capitalino, Armando Cortalezzi, consideró que UTA tomó una medida precipitada. “Sería adelantarse, no se puede hacer un paro sin tener el dialogo suficiente para evocar una solución. Un paro solamente perjudicaría a la gente”, manifestó Cortalezzi.