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"Los comentarios llenan el alma": publicó su difícil realidad y los tucumanos así le respondieron

SOLIDARIDAD

Tiene nombre propio, pero puede ser el caso de cualquier persona que atraviese lo mismo que está viviendo. El pedido en las redes sociales y la respuesta de una sociedad que muestra su mejor cara una vez más.

Vender bolsas de consorcio para comer.





Tiene nombre, pero puede ser el caso de cualquier joven tucumano que vive en las mismas condiciones que él. Vende bolsas de consorcio por la zona de la plaza Belgrano, pero también puede ser el caso de un chico que lo haga por plaza Urquiza, Villa Luján, o la mismísima Plaza Independencia. 

Como lo vemos a diario, esas bolsas de basura que venden son, lamentablemente, muchas veces las que luego se abrirán para buscar algo para comer. Un vacío que hace ruidos y que en este caso ha obligado a un joven a hacer pública su situación en el grupo Alguien Sabe Yo Sé Tucumán.

“Hola, estoy en situación de calle. Yo vendo bolsas de consorcio, etc. Pero no vendí nada hoy. ¿Alguien tendría para darme algo de comer? No como hace días. Le  puedo hacer un trabajo o una changuita o le vendo bolsitas así cargue a la tarde. Muchas gracias”.

El mismo nudo en la garganta que quizás usted está sintiendo en este momento al leer las palabras de este joven son las que movilizaron a cientos de tucumanos en el acto. Son comentarios que no quedan en palabras. Se transforman en acciones de anónimos y anónimas que ponen manos a la obra y forman, por una tarde, una pequeña gran comunidad solidaria para ayudar a alguien que tiene hambre. Nada más y nada menos.

Los comentarios emocionan: “Llegate por la Avenida Siria 1903. Hay un lavadero. Se llama lavadero Salta. Siempre necesitan empleados para laburar”, “Amigo, cuando te conectes mándame mensaje. Tengo un lavadero de autos y necesito personal o llegate a Avenida Colón e Independencia en el lavadero al lado del drugstore y la carnicería”. “Necesito bolsas. Estaré de guardia esta noche en el Centro de Salud, en la guardia mayor. Si podes, llegate”, “¡Hola! Yo tengo alimentos no perecederos que te pueden servir. Déjame un número de contacto por favor”, “¿Dónde estás amigo así te llevo algo para comer?”.

Los comentarios conmueven: “¿En qué parte estás? Soy de Villa Luján, te puedo dar comida y te compro bolsas”, “¿En dónde estás? Pasá tu ubicación para poder acercarte algo”, “¿Tenés cómo comunicarte? O avisá si estás en la plaza en la noche así puedo llevarte un par de cosas”, “Estoy yendo a la plaza Belgrano a llevarte para que comas. ¡Espero encontrarte!”, “A la noche pasá por casa. Vivo en el centro. Puedo darte algo para comer”, “Hola, ¿cómo estás ? Pasá por lo de Elena: Crisóstomo 728 a buscar tu vianda todos los días”.

Los comentarios enorgullecen: “Gracias por los buenos comentarios. Llena el alma ver estas palabras de gente queriendo ayudar. Dios los bendiga”, “Qué bueno es leer tantos buenos comentarios y tanta ayuda para este chico. Todavía hay gente buena y dispuesta a dar ayuda sin estar juzgando que si no tiene que venda el cel con el que publica. Todavía quedan buenas personas. Me alegra leer estos hermosos comentarios”.

Entre la emoción que se desprende del enorme corazón que une a tucumanos y tucumanas, la primera parte de esta historia alivia un poco el alma: el joven que movilizó a muchísima gente logró vender algunos paquetes de bolsas de consorcio y una señora le dio 300 pesos para que se comprara algo para comer delante de ella. Además, logró cargarle 100 pesos al celular y tiene crédito para quienes deseen darle otra mano. Su número es: 381-3883819.