El tapir ya se encuentra en las yungas tucumanas
Las autoridades calificaron como histórico el hecho, ya que se trata de una especie extinta en la provincia hace 70 años.
Instagram: @reservahorcomolle
Con la presencia de autoridades de la UNT y del gobierno provincial, se concretó la presuelta de un tapir hembra en la Reserva Experimental de Horco Molle.
Veinte años de trabajo precedieron a este día, en el que el Proyecto Tapir pudo concretar su tan anhelada meta: la presuelta del primer ejemplar hembra en Tucumán, con el objetivo de reintroducir esta especie que se encuentra extinta en la provincia desde hace más de 70 años. Se trata de la primera experiencia de este tipo en todo el NOA.
"Esperamos que esto tenga un efecto positivo sobre el ambiente, porque el tapir es considerado un arquitecto del paisaje ya que, de alguna manera, modela los ambientes donde vive generando mayor diversidad, tanto de plantas como de animales y mayor complejidad dentro de esos ambientes", subrayó el Director de la Reserva de Horco Molle, Juan Pablo Juliá. También adelantó que "hasta fin de año esperamos liberar dos hembras y un macho y, en el curso del año siguiente, entre una y dos parejas más". Asimismo, destacó que "este es un proyecto de toda la universidad, donde está trabajando el Parque Sierra de San Javier, el Rectorado y la FACET que ha diseñado los collares que nos van a permitir conocer con exactitud donde está cada tapir cada 20 minutos, hay muchas instituciones universitarias implicadas en este proyecto que es muy ambicioso y único en el NOA".
La Decana de la Facultad de Ciencias Naturales Virginia Abdala, por su parte, destacó el significado de la actividad y consideró "muy importante que sean varias las instituciones que trabajamos en proyectos en común, desde los distintos campos en los que nos desenvolvemos".
El ministro de Desarrollo Productivo de la provincia, Álvaro Simón Padrós, también fue parte de la jornada y remarcó que "hoy fue un día histórico para Tucumán en donde el trabajo de muchos años del Ministerio en conjunto con la Facultad de Ciencias Naturales y el Instituto Miguel Lillo dio sus frutos para el traslado y reinsercion del ejemplar de tapir Sami, que significa 'fortunada, venturosa, feliz' en quechua".
