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"El viernes se va a enterar todo Tucumán quién es": grave denuncia y anuncio de escrache

EN LAS REDES

Una joven tucumana radicada en Buenos Aires asegura haber sido víctima de violación y adelanta que, luego de hacer la denuncia en la Fiscalía correspondiente, y previo a la culminación del proceso judicial, dará a conocer la identidad de su presunto violador y también de su esposa.





Dai Albertus Paz es licenciada en Comunicación Social. Estudió y trabajó en Tucumán, pero ahora reside en Buenos Aires. Se fue de la provincia y se alejó de sus seres queridos por una grave denuncia. La joven asegura que en octubre de 2016 su jefe en ese momento la secuestró y la violó después de asistir a un evento que debía cubrir como parte de su trabajo.
 
Esta semana las redes sociales ardieron por la exposición de la denuncia y, más aún, por el anuncio de la inminente revelación de la identidad del presunto violador. “El viernes se va a enterar todo Tucumán quién es”, adelanta Albertus Paz en su cuenta de Facebook, con un cartel rojo, con la imagen borrosa de un hombre, en el que indica el día y la hora a la que asistirá a la Fiscalía de Género para labrar la demanda y, acto seguido, expondrá la foto del denunciado en afiches. Será este viernes a las 08:30. Entonces, la denunciante escrachará a su acusado.


 
“Saben que no lo puedo decir a su nombre y apellido porque mi abogada no me lo permite”, dijo la denunciante en el video que se viralizó en las redes, a horas de oficializar su denuncia, al tiempo que pidió el apoyo de sus familiares, amigos y conocidos con pancartas destinadas a exponer la identidad del presunto violador.
 
Según el relato de la joven, la violación ocurrió el 6 de octubre de 2016, luego de la inauguración de un importante gimnasio de la Capital tucumana. “En el año 2016, el 6 de octubre, yo trabajaba para una importante consultora del norte en Tucumán, se describe como la más importante del noroeste argentino, de una periodista conocida en Tucumán y de su esposo. En el medio los conocen muchos, de hecho, si prenden la tele la van a ver, porque está todos los días. En el 2016 comencé a trabajar para estas personas, principalmente para él, que se hacía cargo de la consultora. En septiembre de 2016 me operaron de la mano, tuve una fractura de cúbito y radio, así que estaba recientemente operada, pero empecé a trabajar para esta persona ni bien me recuperé. Empezamos a asistir a eventos, manejaba las redes, hacía notas, pasaba partes. De hecho, yo empecé a trabajar en el pequeño Cottolengo por esta persona. Tengo pruebas, afortunadamente, siempre guarden todo. Y el 6 de octubre de 2016, después de un evento que organizaron para un importante gym del centro, esta persona, esposo de la periodista conocida en Tucumán, me secuestró y me violó. Y pararme hoy al frente a ustedes, al frente de mi teléfono para contarles esto, me ha costado cuatro años y medio”, describió entre lágrimas.
 
Gustavo Morales será el abogado del acusado por Albertus Paz. Asegura que el perfil de la denunciante no se ajusta al de una víctima de abuso y lo compara con el pedido que hizo para que el senador José Alperovich fuera destituido del Senado luego de conocerse la denuncia de su sobrina segunda. “Yo cuando pedí la causal de inhabilidad moral a Alperovich y a Beatriz Mirkin por encubrimiento, en la causa no queda dudas de la violación, muy feroz, y además a la vista de la servidumbre. Hay informes toco-ginecológicos y psicológicos. Es distinta esta situación, es una denuncia solitaria. A menos que venga con un estudio psicológico”, explica.
 
El letrado, además, asegura que la denunciante no se ajusta al perfil de una víctima de abuso. “No me parece que haga un montaje; da cuenta de que no es una víctima o no responde al patrón de esta índole, sino que tiene un interés económico”, explica Morales, al tiempo que advierte que, de continuar con su intención de revelar la identidad del acusado previo a la culminación del proceso judicial y eventual condena, la joven estaría incurriendo en delitos por calumnias e injurias. “No hay censura previa y el derecho a manifestarse es un derecho fundamental, eso sí, acarrea responsabilidades”, advirtió.
 
“Mi denuncia va a estar a disposición de cualquier medio y de cualquier persona que quiera entrarse, por morbosa o por querer informar las aberraciones que me ha hecho esta persona”, adelanta la joven Dai Albertus Paz. “Le aseguro que puede vivir en paz, publicando mensajes de superación y todo lo que hace en su Instagram, pero va a vivir en paz hasta el viernes que yo haga mi denuncia”, agrega y realiza una cruda advertencia: “Si me pasa algo es que yo quise matarme, van a saber a quién culpar”.