En Roma aseguran que a Zecca lo echaron por la muerte del padre Viroche
Un importante medio italiano sostiene que la salida del sacerdote está vinculada al caso que conmocionó a Tucumán en octubre de 2016.
Este lunes se conoció la renuncia de monseñor Alfredo Zecca al Arzobispado de Tucumán. El motivo argumentado fue problemas de salud. Sin embargo, el portal italiano Vatican Insider afirmó que existía un disgusto en el Vaticano por las posturas de Zecca en el caso Juan Viroche y la recepción de fondos del estado para el Congreso Eucarístico Nacional.
En octubre de 2016 Ámbito Financiero anunciaba que el Papa evaluaba jubilar de manera anticipada al arzobispo tucumano. Zecca no cultivo el estilo de profesar la fe católica planteado por Francisco. A esto se le sumaron las afirmaciones de suicidio en la muerte del padre Viroche después de no haber hecho lugar a su pedido de ayuda por amenazas.
A inicios de 2015, en una carta dirigida al presidente de la Conferencia Episcopal, el Papa invitó a los obispos de su país a no pedir dinero al gobierno con motivo del Congreso Eucarístico Nacional, que tuvo lugar en junio de 2016 en Tucumán. Para entonces, Zecca ya había firmado un convenio con la administración nacional por el monto de 15 millones de pesos para “embellecer” la catedral de su diócesis.
La idea que su estado de salud no es frágil cobra fuerza cuando Alfredo Zecca se postula para continuar trabajando “en otras tareas que no impliquen las tensiones inevitables en el ejercicio del gobierno pastoral de una arquidiócesis compleja como Tucumán” en su carta de renuncia.
El legado de Alfredo Zecca en el Arzobispado tucumano fue eliminar la vicaría de Acción Social y Solidaridad, hasta ese momento a cargo de Melitón Chávez. El ahora Obispo de Añatuya, realizaba tareas para combatir las adicciones y el hambre en barrios de alta conflictividad.
