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La realidad, una ocupación sólo para quienes la sufren

Análisis

Álvaro Aurane, periodista de La Gaceta, analiza la situación política a la luz de las inundaciones ocurridas en la Provincia y el conflicto social desatado en Santa Cruz.

Imagen tomada de Clarín HD





En el tablero de la política argentina las fichas no dejan de moverse. En este contexto, las inundaciones ocurridas en Tucumán durante los primeros días de abril y el conflicto social en Santa Cruz fueron muestras gratis para el Gobierno nacional que le permitieron empezar a jugar cartas más fuertes de cara a las elecciones legislativas.

En este sentido se entiende la negativa de brindar socorro a los distritos a cargo de gobernadores con pasado kirchnerista. Le pasó a Juan Manzur cuando solicitó $600 millones de pesos en concepto de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) para obras de infraestructura y también a Alicia Kirchner, acorralada por las cuentas públicas en rojo. En el medio, se libra la batalla política para obtener rédito con la mira puesta en las elecciones de medio término.

“La Nación ya ha dicho que no dará a la Provincia los $ 600 millones en Aportes del Tesoro Nacional (ATN) que reclama para reconstruir las comunas anfibias. La administración de Mauricio Macri no confía en que esos dineros vayan a ir a parar a infraestructura. Mucho menos a seis meses de los comicios”, apunta Aurane en su columna de opinión.

“El oficialismo tucumano en pleno ha salido a contrastar que municipalidades tucumanas afines a Cambiemos sí han recibido ATN (San Miguel de Tucumán, $ 40 millones; Yerba Buena, $ 10 millones; Bella Vista, $ 1,5 millón), a pesar de que no deben atender la urgencia de los inundaciones”, continúa. “La advertencia manzurista de que también el macrismo usa políticamente los dineros públicos en beneficio de los distritos que administra ha sido sustentada. Pero, otra vez, los hechos no pueden ser reemplazados por argumentos”, describe el periodista del centenario diario.


Las gestiones de Macri

En otro fragmento, Aurane destaca las gestiones de Mauricio Macri en Washington para destrabar el ingreso del limón tucumano al país del Norte. “Sé todo sobre los limones”, dijo Donald Trump y fue interpretado como un buen augurio. Se suma el compromiso presidencial de no importar azúcar de Brasil y el aumento del corte de naftas con bioetanol.

“A cambio, todo lo que le pidió el macrismo es lo que el gobernador Juan Manzur prometió por sí mismo al asumir: la reforma política. El fin de los acoples y un régimen electoral que conjure el fraude. La Provincia se ha negado a ello rotundamente, en los hechos”, se puede leer en la columna. Las acciones a futuro, avisa Aurane, se pueden avizorar en Santa Cruz y en los titulares de Clarín.  

“Alicia Kirchner acepta derogar la ley de lemas por exigencia del Gobierno nacional”, tituló el matutino porteño. Esa es “una de las condiciones que le plantearon a la gobernadora para avanzar en un salvataje a la provincia”, completa el periodista. En este sentido, sostiene que el libro “Tucumán Dialoga” no es suficiente comparado con la reforma de fondo que impulsa la Casa Rosada, rememorando el acarreo, la quema de urnas y la represión policial en los días posteriores a los comicios de agosto de 2015.    

Aceptando el planteo del gobierno de Cambiemos, la columna de opinión plantea “¿por qué, específicamente, no tiene el Gobierno provincial $ 600 millones para la reconstrucción de los pueblos subfluviales del sur? Es decir, ese monto equivale sólo al 1,09% del Presupuesto provincial 2017, de $ 55.000 millones”. La pregunta no tiene respuesta aun.

Mientras uno y otro espacio político dirimen sus rencillas en el barro de las inundaciones, los damnificados solicitan ayuda en los despachos oficiales sea cual fuere el signo político, porque eso pasa a ser lo de menos cuando el dinero no alcanza para llegar a fin de mes. Del otro lado, con la necesidad más acuciante juegan hasta el límite. Porque, de un tiempo a esta parte, los discursos reemplazaron a la realidad. Y de la realidad, en definitiva, se ocupan sólo quienes la sufren.