En Casa Histórica se firmó un acta para “romper los vínculos dominadores del capitalismo foráneo enclavado en el país”.
En la Casa Histórica de Tucumán, en donde se había declarado la Independencia el 9 de julio de 1816, el Presidente de la Nación, General Juan Domingo Perón, declara la Independencia Económica, el 9 de julio de 1947. FOTO DE JDPERON.GOV.AR
"Aspiramos a una liberación absoluta de todo colonialismo económico, que rescate al país de la dependencia de las finanzas foráneas. Sin bases económicas no puede haber bienestar social: es necesario crear esas bases económicas", decía Juan Domingo Perón el 9 de julio de 1947 en Casa Histórica ─hace 70 años─, durante los festejos por el centésimo trigésimo primer aniversario de la Declaración de la Independencia.
Las palabras del general tienen que ver con el acta firmada para declarar la independencia económica de los organismos internacionales de crédito, denominadoS por Perón como "el capitalismo foráneo enclavado en el país".
A partir de la rúbrica se nacionalizaron el Banco Central ─del que se tomaron créditos para el desarrollo la Industria Argentina─ y los Ferrocarriles ─por entonces de propiedad británica─, que dio pie a la creación de la empresa Ferrocarriles del Estado Argentino. También se lanzó el Plan Siderúrgico Argentino, impulsado por el Gral. Manuel Savio, que incluyó la fundación de la empresa siderúrgica estatal SOMISA (Sociedad Mixta Siderúrgica Argentina). Todo esto se enmarcó dentro del denominado “Primer Plan Quinquenal”.
Con el acta, Juan Domingo Perón aspiraba a multiplicar la producción nacional a partir de la industrialización, a distribuir equitativamente la riqueza para aumentar el estándar de vida de la población. "Lo que otros vendieron, nosotros lo hemos recuperado. Al afán mercenario de otrora, sucede el espíritu hondamente patriótico que ha sabido sacar del esfuerzo y hasta del sacrificio el vigor necesario para acometer la magna empresa de nuestra total recuperación", dijo en otra parte de su discurso.
El general culminó su alocución con un reconocimiento para Tucumán, destacando su rol histórico en la Declaración de la Independencia política, y aquel 1947 también la económica: "Ahora, cuando todo lo que es fundamento de nuestro porvenir está en nuestras manos cuando pisamos tierra nuestra, absolutamente nuestra, cuando disponemos a nuestro albedrío de todo lo que constituye el patrimonio argentino, podemos decir que la libertad política se ha complementado con la independencia económica, proclamada solemnemente en la histórica Tucumán, que conoció la aurora de nuestra nacionalidad y ha sido propicia sede a la consolidación de la Argentina socialmente justa, económicamente libre y políticamente soberana".
Puntos principales del Acta de Independencia Económica
- Reafirmar el propósito del pueblo argentino de consumar su emancipación económica de los poderes capitalistas foráneos.
-Movilizar las inmensas fuerzas productivas nacionales y concertar los términos de una verdadera política.
- En el comercio internacional tengan base de discusión, negociación y comercialización los productos de trabajo argentino.
- Los pueblos de la tierra que los consumen puedan encontrar un nivel de prosperidad y bienestar más alto que los alcanzados en ninguna época anterior y superiores a los que puedan anotarse en el presente.
- Reafirman la voluntad de ser económicamente libres como hace ciento treinta años proclamaron ser políticamente independientes.
- Las fuerzas de la producción e industrialización tienen ahora una amplitud y alcance no conocidos y pueden ser superadas por la acción y trabajo del pueblo de la República.
- La cooperación será activada hasta alcanzar el completo desenvolvimiento que demandan las nuevas concepciones del comercio y empleo mundiales de las energías.
ACTA DE DECLARACION DE LA INDEPENDENCIA ECONOMICA
SAN MIGUEL DE TUCUMAN 9 DE JULIO DE 1947
En la benemérita y muy digna ciudad de San Miguel de Tucumán, a los nueve días del mes de julio de mil novecientos cuarenta y siete, en celebración del centésimo trigésimo primer aniversario de la declaración de la independencia política, sancionada por el Congreso de las Provincias Unidas reunido en mil ochocientos dieciséis, se reúnen en acto solemne los representantes de la Nación, en sus fuerzas gubernativas y en sus fuerzas populares y trabajadoras, para reafirmar el propósito del pueblo argentino de consumar su emancipación económica de los poderes capitalistas foráneos que han ejercido su tutela, control y dominio, bajo las formas de hegemonías económicas condenables y de las que en el país pudieran estar a ellos vinculados. A tal fin los firmantes, en representación del pueblo de la Nación, comprometen las energías de su patriotismo, y la pureza de sus intenciones en la tarea de movilizar las inmensas fuerzas productivas nacionales y concertar los términos de una verdadera política para que en el comercio internacional tengan base de discusión, negociación y comercialización los productos de trabajo argentino, y quede de tal modo garantizada para la República la suerte económica de su presente y su porvenir. Así lo entienden y así lo quieren, a fin de que el pueblo que los produce y elabora y los pueblos de la tierra que los consumen puedan encontrar un nivel de prosperidad y bienestar más alto que los alcanzados en ninguna época anterior y superiores a los que puedan anotarse en el presente. Por ello, reafirman la voluntad de ser económicamente libres como hace ciento treinta años proclamaron ser políticamente independientes. Las fuerzas de la producción e industrialización tienen ahora una amplitud y alcance no conocidos y pueden ser superadas por la acción y trabajo del pueblo de la República. El intercambio y la distribución suman cifras que demuestran que el comercio y la industria se expanden conjuntamente con aquellos. La cooperación, que contribuye a fijar de manera permanente las posibilidades humanas, será activada hasta alcanzar el completo desenvolvimiento que demandan las nuevas concepciones del comercio y empleo mundiales de las energías. A su término, una vez leída esta declaración y preguntados si querían que las provincias y territorios de la República Argentina tuviesen una economía recuperada y libre del capitalismo foráneo y de las hegemonías económicas mundiales o de las naciones comprometidas con aquéllas, aclamaron y reiteraron su unánime y espontáneo -así como decidido- voto por la independencia económica del país, fijando por su determinación el siguiente
Preámbulo:
“Nos, los representantes del pueblo y del gobierno de la República Argentina, reunidos en Congreso Abierto a la voluntad nacional, invocando a la Divina Providencia, declaramos solemnemente a la faz de la tierra la justicia en que fundan su decisión los pueblos y gobiernos de las provincias y territorios argentinos de romper los vínculos dominadores del capitalismo foráneo enclavado en el país y recuperar los derechos y gobierno propio y las fuentes económicas nacionales. La Nación alcanza su libertad económica para quedar, en consecuencia, de hecho y de derecho, con el amplio y pleno poder de darse las formas que exijan la justicia y la economía universal en defensa de la solidaridad humana. Así lo declaran y ratifican ante el pueblo y gobierno de la Nación el gobierno y pueblo aquí representados, comprometiéndose, uno y otro, al cumplimiento y sostén de esta su voluntad, bajo el seguro y garantía de sus vidas y honor. Comuníquese a la Nación y, en obsequio del respeto que se debe a los demás Estados, detalladamente en un manifiesto y acta las fuentes determinantes de esta solemne declaración, dada en la Sala de Sesiones del Congreso de las Provincias Unidas, donde en mil ochocientos dieciséis se proclamara la independencia de la República, y refrendada por los representantes del pueblo y gobierno argentinos aquí reunidos”.
FIRMAN: Juan Domingo Perón Presidente de la Nación ArgentinaMinistros: Quijano, Borlengui, Gramuglia, Miranda, Pistarini, Carrillo y otros.