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El Eterno Retorno

Entendiendo...

Se fue el 2021 y el ciclo que se renueva. Balances del año que murió y resoluciones sobre el que recién nace. ¿Qué es lo que tanto cambia entre un día y otro? ¿No será que esta concepción cíclica nos está estrangulando en repeticiones estériles? Cumplimos 20 años del colapso de 2001 y parece que la enseñanza fue nula. Reset y repetir una y otra vez. ¿Cuándo será suficiente?


Mircea Eliade es un intelectual rumano especializado en la historia de las religiones. Cuando digo especializado, me refiero a un autor que escribió 4 tomos analizando desde diversas perspectivas casi la totalidad de la historia de las religiones; siendo la síntesis de este esfuerzo un libro bastante acotado llamado “El mito del eterno retorno”. Resoluciones o balances de fin de año, los tres deseos de los cumpleaños, aniversarios, comuniones, dietas, cábalas y supersticiones cobrarán un nuevo sentido una vez leída esta obra maestra. Al parecer somos una especie atrapada en un círculo. Un fenómeno que parece ser un remanente evolutivo del neolítico, nuestra etapa más dependiente de los ciclos estacionales con el nacimiento de la agricultura y la explosión demográfica y cultural que esto conllevó. En nuestra base cognitiva quedaron grabados a fuego la gimnasia de arar, sembrar, cosechar para luego arar, sembrar y cosechar en base a ciclos. Las religiones obviamente hicieron eco de esta pulsión y lógicamente un agricultor prehistórico debe recurrir a ayuda divina para “controlar” el clima bajo el incentivo nada despreciable de no morir de hambre. En realidad, todo esto que menciono no cambió demasiado en el siglo XXI, nuestra dependencia del clima es aún vital.

El libro completo en pdf haciendo click en la imagen.

El punto es que ese loop infinito de nacimiento, muerte y renacimiento fue clave para nuestra supervivencia, pero, a mi humilde entender, posee una faceta un tanto peligrosa. Sin ir más lejos, la filosofía del perdón como el cristianismo es, fue y será una lavandería moral. Renovar los pecados en confesiones y otros ritos es poner el botón de reset a todas las cagadas que nos mandamos y estamos frescos para la repetición. El resumen sería que no importa lo que se haga, ya vendrá un reinicio y lo intentaremos de nuevo. En religiones orientalistas como el budismo o hinduísmo se utiliza esta visión para justificar hechos abominables como la muerte de un niño arguyendo de que esta “alma” hizo algo en otra vida para merecer tal destino. La cuestión es que ya no se teme al fin del mundo, ya que otro comenzará inmediatamente. Para qué salvar este planeta si el cambio climático es tan solo otro de los ciclos naturales terrestres y si nos equivocamos Elon Musk y la NASA nos está preparando un nuevo hogar en Marte. Eso sí, no le vayamos a aflojar al consumismo. 

1921-2001-2021

Nacionalmente estamos viviendo el renacimiento de un ritual: auge, crisis y reconstrucción. Este diciembre se cumplieron 20 años desde la peor crisis financiera y social del país. El hito de generar el mayor default de la historia de la humanidad: Made in Argentina. Una crack que parecía ya superado pero su sombra se proyecta en el nuevo milenio y todo parece repetirse. Los actores y autores de la catástrofe, su discurso y gestión volvieron a la política y tuvieron su revival con el gobierno de Cambiemos que sumó algunos billones más al choclo del endeudamiento. Hoy 2021 de nuevo sopa, arrastrándonos para pagarle al FMI en un año atrozmente difícil con una crisis económica, social y cultural épica, sin embargo, no parece un año tan malo como 2001… ¿Por qué? 

Debo recomendar necesariamente leer mi artículo `Milei y los libertarios´; allí resumo el fenómeno de liberales, libertarios y neoliberales en nuestro país y en el mundo. A ello le debemos cargar un update. El antiguo adagio, “es más fácil criticar que hacer” se carga un nuevo hit. Los libertarios no fueron capaces de organizarse en un bloque parlamentario, de manera que prácticamente quedaron paralizados en la cámara ya que no cuentan con participación significativa en las comisiones donde se tratan los proyectos que luego deben ser votados. Así este 2021 se lleva otra víctima no de la pandemia, sino del voto de aquellos que descreen de un proyecto de país por una doctrina falaz que dice que cada uno por su lado es más fuerte. Mientras tanto Milei ejecuta quizá la táctica más populista del menú, sortear su dieta. | Clik en imagen para acceder a la nota. 

Para explicar nuestros 2020´s debemos recurrir a la lógica del ciclo que aparentemente condiciona el espíritu colectivo. Existen comparaciones bastantes acertadas entrel los 2020´s y los 1920´s. La década del 1920 fue un tiempo en el que, superada la Primera Guerra Mundial y la pandemia de la gripe española, se genera un brote de esperanza por el progreso indefinido. Los medios de comunicación crecían, se gestaba el origen de una cultura global con las primeras modas y la ciencia mejoraba prácticamente todo aspecto humano. Parecía que nada ni nadie iba a ser obstáculo contra la paz y el progreso mundial, pero…

El colapso de Wall Street de 1929 a raíz de una burbuja especulativa se llevaba todo al caño. Eso generó una desconfianza en una economía global y de libre mercado y dio lugar movimientos políticos y sociales extremos como el facismo y el marxismo. Si bien para fines del los 1930´s la crisis económica era superada, no lo era la crisis política consecuencia de ella. En 1939 la Alemania de Hitler emprendió prácticamente la conquista total de europa y la propagación de campos de exterminio por el continente. El resultado final, casi 60 millones de muertes y países devastados que dieron lugar a una nueva hegemonía del llamado Nuevo Orden Mundial gestado en los acuerdos de Bretton Woods de los cuales profundizó en el artículo de los libertarios

Entonces, si ya conocemos la peli… ¿no es hora de dejar de repetirla? Si analizamos los discursos fascistas y marxistas de la década de 1930, el paralelismo con los oposicionistas actuales es casi directo. Naciones y sociedades cerrándose y señalando a un enemigo “exterior” responsable de todos los problemas. Ni siquiera se cambió el cassette, simplemente se confió en el tiempo, en la sobreinformación y la idiotización cultural para poner la misma música y bailarla de la misma manera para que unos pocos se lo lleven todo. En los 1920´s lógicamente fueron beneficiados grandes grupos capitalistas que contaban con información privilegiada si no es que generaron ellos mismos la Gran Depresión para adquirir la liquidación de recurosos estratégicos. Esto no es conspiranoia, el propio presidente de EEUU de este entonces, Woodrow Wilson, de orientaición liberal, explícitamente se quejó de un sistema financiero concentrado que condiciona el país y atenta justamente contra la libertad econímica. Volvieno a nuestros días, oh casualidad, es esta pandemia, las valuaciones de los gigantes digitales como Apple, Google y Amazon vieron un gran crecimiento en estos últimos dos años. 

El tema es que si seguimos el paralelismo con los 1920, lo que sigue es una guerra mundial y genocidio. El tema es que las peores armas actuales y proyectadas al futuro no son drones, rayos laser o bombas nucleares. Ni siquiera son militares. Hoy por hoy las armas de destrucción masiva son financierass y culturales. Si nos enfocamos desde esa perspectiva, vemos que la guerra ya está avanzada, sino miren las noticias. Nos arrastramos como país para pagar la deuda contraída por unos piratas políticos y como trabajador de la cultura veo un genocidio que es explícito. Pero no nos enrrosquemos, aún se puede combatir siempre concientes de lo que dijismos anteriormente, no estamos en una rueda que nos dará otra chance; las oportunidades, tiempos y recursos son muy limitados. Entonces... ¿Qué hay que hacer para ganar esta guerra? 

Reforma Cultural

Empecemos y terminemos por leer y entender la historia o al menos escuchar a quienes la conocen. Y no me refiero necesariamente a estudiar el antiguo egipto, sino al menos intentar entender de una vez los últimos 30 años de historia como país. Entender el ciclo y romper ese cerco, ese corralito. Empecemos por ejemplo, por leer y conocer los nombres y orientaciones políticas de los responsables del fiasco que culminó en 2001 con un colapso social total. Contrastar con lo que pasa hoy, ver si los mismos tipos siguen siendo relevantes y desde cuál espacio político operan. No puede ser que Domingo Cavallo, uno de los principales arquitectos de aquella debacle no esté preso y menos apareciendo en TV aleccionando sobre qué debe ser e idolatrado por movimientos como los libertarios de Milei. Quizá este último ejemplo es un poco evidente y un personaje como Cavallo no tiene “tiro” político hoy por hoy, pero si analizamos la historia de ciertos personajes que hoy las encuestadoras miden como presidenciables, veremos en algunos casos responsabilidades directas con el fiasco del 2001.   

Patricia Bullrich alias "La piba". La ex montonera tiene el muy cuestionable antecedente de haber sido ministra de trabajo de la Alianza en 2000 y 2001. Entre sus "logros" figura el haber ejecutado una reducción salarial del 13% para jubilados. Hoy es presidenta del PRO y se configura como una de las principales candidatas presidenciales de JxC para 2023. Punto aparte, existen indicios de una alianza política con Javier Milei al menos de manera tácita. | Imagen de Minutouno.com

Leer y dejar de repetir como loro lo que dice la viñeta de TN o C5N. Y con leer no me refiero a agarrar un libraco (que sería lo ideal); con Wikipedia y Google tenemos un buen comienzo. No entendemos algo, agarramos el celular y lo escribimos. Ni siquiera hace falta leer artículos completos, pegar un revistazo, si aparece algo más que nos genera duda o nos interesa abrir otra persiana y leer y leer cuanto se pueda. Se puede acompañar con buena música y elipsar los tediosos traslados hacia el trabajo o el hogar. Créanme que así el tiempo vuela y salen del bondi con un par de ideas más y por qué no tarareando una nueva melodía. Y ni siquera ya leer, existe Youtube con excelente contenido explicativo prácticamente de cualquier temática desde diversas perspectivas. 

En resumen, es eso lo que propongo, algo que menciono en casi todas mis columnas, una Reforma Cultural. Nada del otro mundo, un esfuero que se empieza con un celular y unos auriculares, ambos logros de nuestro siglo de los que tenemos que estar orgullosos y hacer un justo y constructivo uso de los mismos. No es tan difícil.

El Fenix

Si bien la lógica de lo cíclico es útil para estudiar muchos fenómenos como los climáticos o los movimientos de los astros, no debería ser tomada como una matriz explicativa de todo. Hay cuestiones lineales, oportunidades que se van para no aparecer jamás, recursos limitados y tiempo limitado y la extinción es parte de la realidad. Y con extinción no me refiero solo a especies exóticas, sino que hemos visto al capitalismo al borde del colapso total en repetidas ocasiones como lo fue la mencionada crisis de los años 30 y la más cercana crisis subprime del 2008. Muchas veces se utiliza la retórica de que son ciclos inevitables, pero no es así, mayormente pueden ser prevenibles o al menos atenuados con mínimas regulaciones e intervenciones del sector político. Y no hablo de una expresión de deseo, hay antecedentes. Luego de la crisis del 30, el sector político estadounidense generó numerosas regulaciones que limitan el arrojo especulativo de entidades financieras en materia de apalancamiento y otras hierbas. Es decir, evitan las pasadas de rosca. Dichas regulaciones fueron exitosas, le generaron a Estados Unidos un periodo de esplendor económico pocas veces visto en la historia y el establecimiento del mencionado Nuevo Orden Mundial del cual estamos viviendo su etapa final.

`Inside Job´ es un documental que explica al detalle el colapso económico gobal de 2008, poniendo énfasis en que la principal responsabilidad es la desregulación absoluta del mercado financiero y a la vez la manipulación del mismo como lo fue el caso de las calificadores de risego. Otro título que refleja estos temas es `The Big Short´ pero ya en un formato no documental. 

La llegada de los neoliberales al poder en los 80´s con el discurso de achicar el sector público y de liberalizar la economía trajo consigo desregulaciones en materia especulativa, respaldo de base monetaria, capacidad de toma de deuda y demás. Lo subsiguiente fueron una serie de crisis financieras globales como la de 1987, la burbuja de las empresas `.com´ del 2000 y otras. Es una flagrante mentira que las regulaciones económicas generan contracción económica, en su justa medida allanan el ciclo de auge y caída y generan una estabilidad perdurable, una gentil curva de progreso “indefinido”.

Finito

Estrellas se apagan, especies fenecen y según una buena parte de los cosmólogos, el universo se expandirá y enfriará indefinidamente hasta morir en lo que los científicos llaman el Big Rip. Quizá exista otra vida u otra realidad pero al menos por mi parte prefiero jugar mis mejores cartas en esta partida y dejar la especulación para los tontos. El hecho de tener ahora un hijo me hizo ver la necesidad de aniquilar el “ya fue”, “son todos iguales”, “este país es inviable” y todo ese lenguaje y cinismo tan de moda en la actualidad. Aún siguiendo la lógica de lo cíclico, ahora nos aguarda al menos nacionalmente el comienzo de un nuevo esplendor, que si bien es inexorable, aprovecharlo y crecer en esta cima es una oportunidad limitada en tiempo y magnitud que sería criminal dejarla pasar. Pero no se tiene que tratar de una montaña rusa necesariamente, habrán escuchado hablar alguna vez de “fondos anticíclicos”. Esto es acumular una reserva en la bonanza para cuando el ciclo decaiga, disponer de recursos para contrarrestar una eventual crisis, es decir, moderar o prevenir.

Sí, dije que es inexorable una etapa de esplendor en nuestro país y no es una locura, de nuevo los antecedentes; esto ya se vio justamente post 2001. Voy a explicarlo. Como bien sabemos estamos en la etapa final de una enorme crisis generada por causas internas y externas. Muchas empresas y emprendedores hicieron ajustes de infraestructura y personal y pueden generar los mismos o más negocios de manera más eficiente que antes de la pandemia. “Mejor” aún, este ciclo de devaluación nos hizo más competitivos y ni hablar del impacto que tendrá el turismo cuando finalmente se de por finalizada la pandemia. Por todo lo explicado, auguro una fuerte recuperación económica para el 2022, el tema es aprovechar ese viento de cola. Que no los agarre la lluvia de sopa con tenedores.

Para dar por acabado de una vez y por todas la superstición del destino cíclico, se encuentran los modelos de destino final del universo propuestos por la comunidad científica. `Big Crunch´ es un modelo cíclico en el que universo se expande y contrae reiniciando su existencia una y otra vez. Esta concepción ha quedado prácticamente obsoleta en el estudio de la expansión del universo. Esto mismo ha generado los modelos del `Big Rip´ y el `Big Freeze´ mucho más aceptados por los cosmólogos, donde se configura un destino en el que universo se expande indefinidamente generando una muerte por desgarro o enfriamiento absoluto. Si bien hay consenso, no es palabra sacrosanta. Las fuerzas de la expansión se encuentran en una etapa de estudio un tanto precaria, además de que mentes brillantes como Sir Roger Penrose y Roger Hoffman estudian la naturaleza de la conciencia bajo el enfoque de las ciencias duras, dando pie a la posibilidad de que nuestra esencia posee un soporte `no físico´.

Arturo Antonini

Analista político-financiero, promotor cultural y productor audiovisual.