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"He sido bendecido por la naturaleza": Mike Amargos, el campeón tucumano que vende contenido, calienta las noches e inspira poemas

HISTORIAS DE ACÁ

Karateca y medallista argentino y panamericano, aquí cuenta las razones que lo llevaron a ser uno de los más deseados en despedidas, boliches, Only Fans y mucho más. El escritor Marx Bauzá ya le dedicó un libro. Una historia imperdible.

Mike Amargos, el campeón hot de Tucumán. Fotos: IG





Mike Amargos no entra en el chaleco inflable chocolate que le cubre el torso esta tarde. Tallado hasta la punta de los pies, la primera vez que mostrará la piel en esta entrevista con eltucumano será para lucir cinco anillos, uno de cada color, todos entrelazados, como un juego olímpico y una llama encendida que no se apagará jamás.

Miguel Amargos es el karateca campeón argentino y panamericano que luchó, abrazó, transpiró, jadeó, agitó y dio vuelta a cualquier rival que se le puso en el camino. Hasta que ese camino en un país como la Argentina se puso como un gran obstáculo: “Sí, fui campeón de todo y viajé por el mundo. Viví en Francia, gané en Dubai, en Austria, en Marruecos. Entrenaba ocho horas por día y tenía un sueño: ir a entrenar 100 días a Irán, pero me quitaron la beca, nos sacaron del Cenard y volví a Tucumán. Abrí un dojo, pero me agarró la pandemia. Y en ese momento fue que tomé una decisión: ‘Estoy bien entrenado, la vergüenza la perdí, vamos a vender contenido’”. 

Pasó la pandemia y el Miguel de día le dio paso al Mike de noche, protagonista de su propia Magic Mike, la película que no le llega ni a los talones al muchacho de 33 años que calienta a hombres y mujeres, enciende despedidas de solteras, pierde boxers en los boliches, cumple fantasías y hasta inspiró 30 poemas para el libro de Marx Bauzá, el escritor tucumano que publicará “Entre la lucha y la entrega”.

Marx acompaña a Mike a la redacción de eltucumano y cuenta cómo se cruzaron los caminos: “Nos conocimos en el cumpleaños de Gerardo Epelbaum, un amigo en común. Lo empecé a seguir en Instagram, vi que subía fotos con mucho erotismo, en boxer, modelo, y que también era karateca. Lo empecé a googlear y vi que había una veta de streeper. Me parecía super interesante unir ese mundo con mi poesía tal como lo hacían los antiguos griegos a los atletas. Salieron 30 poemas preciosos”.

Dice Luz en la clavícula, uno de los poemas de Marx Bauzá dedicados a Mike: “Todo el cuerpo es un templo, pero hay zonas donde Dios se detiene a mirar. / Tu clavícula, por ejemplo, cuando la luz entra oblicua, justo después del combate. Esa hora dorada que embellece lo vencido. / El sudor es incienso, la piel un lienzo de kanjis invisibles. Tu tatuaje: los cinco anillos como cinco soles nacientes. / El silencio te envuelve como un kimono sin prisa. El deseo no apura el gesto: lo honra. / Yo sólo miro. La reverencia es mía”.

¿Qué le pasó a Mike cuando leyó los poemas? “Me asombró cómo me describía, endiosándome. Lo leía y decía: ‘Wow’. Empecé con el primero y no paré más. Los títulos me encantaron y, antes de que se publique el libro, empecé a subir poemas con mis fotos. Dependiendo del poema, si era más fuerte o no, acompañaba cada imagen mía”, cuenta Miguel mientras con su boca bebe un sorbo de café caliente como el poeta que tiene al lado: “A Miguel le dije que le dedicaría un poema y él redobló la apuesta y me dijo que le dedicara un libro. Quedé unos segundos flotando en el aire como en la nube de Gokú y quise enaltercerlo. Él es mi musa, bello como persona, como modelo, con sus artes marciales, la danza, quería dibujarlo en el aire como un kangis japonés. Escribí el libro para invitar a mirar la vida con belleza”.

Pero hay otros lugares donde no se lee y se va a los bifes. Si a las palabras se las lleva el viento, ¿quién se lleva los suspiros que genera Mike? “Recibo ofertas de varones y mujeres. Una vez un marido me contrató para que fuera con su mujer a un hotel y él se quedaba afuera, en el garage. Luego empecé con las despedidas de solteras donde hay mucho ensayo, mucho entrenamiento, desnudos, acrobacias, coreografías con mi compañera de baile. Llego a tener seis shows por fin de semana en Tucumán, Santiago, Salta. Y siempre pido que todo lo que pase en la despedida sea con discreción o la novia se va a quedar sin luna de miel”, se ríe Mike, quien vivió situaciones de todo tipo e invitaciones paradisíacas a yates por islas lejanas a las cuales por ahora dijo que no.

“Me han invitado a Europa, a cruceros, y me han ofrecido darme con todos los gustos, pero yo aquí tengo un hijo de 16 años y él es todo para mí. Lo estoy entrenando porque es un gran prospecto de luchador de MMA y yo no me puedo ir a disfrutar de la vida sin dejarle plata. Aquí está todo muy lindo, pero mi objetivo es el de cualquier laburante: llegar a fin de mes”, aclara Miguel, quien también dialoga con su novia y los celos lógicos que genera la profesión que encara.

“La noche es divertida si tenés control. En la noche hay drogas y alcohol y si no tenés un control de vos mismo podés caer en eso. Sí, es divertido lo que hago, hay una demanda grande, soy la oferta, te pagan, te ofrecen un montón de cosas, mi ego se alimenta, espiritualmente me lleno, sentirme deseado es el tanque de combustible".

"Siempre tengo que estar en forma porque el fin de semana que viene tengo que estar más lindo que el fin de semana pasado. A full en el gimnasio, tengo mi propio barbero, sigo una alimentación al pie de la letra, ensayos con distintos tipos de personas y hay una realidad en las despedidas de solteras: vos no sabés cuánto pesa la novia. Entrás a dar tu show y puede tocarte una señorita de 55 kilos o una señorita con sobrepeso. Yo estoy listo para levantar hasta 200 kilos, hacer las piruetas, depositarla en el piso, manejar los gestos, todo”, relata Miguel, un adonis con poemario propio y cuidadoso en cada detalle: “Hago desnudo total así que las depilaciones también son muy importantes”.

Son las ocho de la noche en eltucumano y Marx recibe una gran noticia: “Van a publicar mi poemario”. Son las ocho y cuarto de la noche y Mike recibe otra gran noticia: “Me acaban de contratar para otro show el fin de semana".



Entre tantas buenas noticias, cierra Mike Amargos, el campeón: "Los shows que hago duran 40 minutos y los cobro entre 150 y 200 mil pesos. Depende cuánto gente me acompañe y la distancia. A veces llevo 6 colaboradores y otras veces 10. No es lo mismo un show en Lules que un show en Concepción. He perdido boxers y zungas. Tengo tres propuestas eróticas para los próximos días que incluyen fotos indoor una sesión al aire libre en modo selva y vamos a grabar en El Cadillal. También tengo mi página de Only Fans y modelo para casas que venden juguetes sexuales y sobre todo para Lody, la marca que me banca en esta aventura. No me arrepiento de nada. Todo lo contrario: tengo un inmenso orgullo por lo que hago. Dios me dio dotes, he sido bendecido por la naturaleza y no tengo problema en mostrarlo”.


Mike Amargos y Marx Bauzá, el autor del libro que incluye 30 poemas y se titula: "Entre la lucha y en la entrega" (Halley Ediciones). Próximamente en las mejores librerías.

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