Ale Arrieta: "No me puedo morir sin sacar mis temas"

Esta noche en el Teatro Rosita Ávila (Las Piedras 1500) a las 21 hs se estará presentando Ale Arrieta con su show Voces de Despedida. Con un repertorio que repasará sus tres discos y con músicos que acompañaron a lo largo de estos años al compositor, se dará cierre a una etapa musical del proyecto musical de Ale Arrieta. 

Muy fuera de lo común, Alejandro sacó tres discos en un año. Totalmente enfocado en la composición y dispuesto a sacar todo afuera, conversamos un poco más acerca de lo que es para él hacer canciones en tiempos donde parece más importante invertir en contenido para las redes que en la música en sí misma. 

- ¿Algunos primeros recuerdos de contacto con la música?

- Mis viejos son cantantes líricos, son músicos, han estudiado muchos años música mi vieja está jubilada, pero mi viejo canta en el coro estable. Yo siempre he sido un tipo con mucho oído, o sea siempre sacando todo de oído. Por ahí me resulta muy sencillo, escucho una canción que nunca la he escuchado en la vida, agarrar la guitarra y tocarla en dos segundos. Mi viejo tiene unas grabaciones muy viejas en casete donde estoy yo tocando la guitarra teniendo cinco años y acompañando una melodía que él ponía o que él cantaba. Sin tener idea de nada y pegándole a las notas que tienen que ser. Esa una historia que siempre me cuenta me contaba mi viejo.

De ahí, ya un recuerdo más vivido que tengo es cuando se dieron cuenta de esa facilidad que tenía y me mandaron a estudiar guitarra a los ocho años. El primer recuerdo clarito que tengo es de estar en la ESEA, atrás del teatro San Martín. Era todo más tirado todo al folclore, más una onda que a mí tanto no me atraía, las primeras bandas que yo escuchaba siempre ha sido todo lo referido a Charly García, a Soda Stereo.

Entonces me acuerdo de que saco una canción de Soda y la toco con los compañeros y entra el profe de folclore y dice “¿qué estás haciendo?”. Me han pegado una puteada por sacar una canción que no era del género que estábamos todos los días ahí. No me olvido más de ese pequeño reto, porque ha sido que he vuelto a la casa y he dicho “no voy a estudiar más ahí”.

Ahí ya me di cuenta de que yo iba para este lado de la música y de mi conexión fuerte, de decir, primera vez que saco un tema y estoy encontrando la música que me gusta. 

- ¿Te acordás que canción era?

- Si no me equivoco era “Trátame suavemente” o “Juegos de seducción”, uno de esos dos. 

- ¿De qué manera continuó esa conexión con la música?

- A los trece años tengo recuerdo de hacer mi primera canción, componer por primera vez. Y no sé si a los 14 o 15 hago la que considero mi segunda canción, porque si bien he hecho más en el medio… Esa canción ha salido en el tercer disco. Obviamente reformulada, repensada, producida de nuevo y con una parte nueva. 

Cada vez que escucho ese tema vuelvo a ese momento, qué loco cómo ha pasado los años, cómo yo estuve tanto tiempo para empezar a producir, para sacar mi música.

A pesar de haber tocado en Carrusel, siempre he tenido pendiente adentro las canciones mías, ni siquiera las proponía para la banda porque eran demasiado mías y la banda, si es que les gustaban, iban a querer intervenirlas y yo quería que vayan para el lado que las imaginaba. Por más que capaz que la intervenía otro y era bueno. 

- ¿Cómo surgió la cuestión de querer hacer un disco y ocuparte de tus canciones?

- Venía componiendo mucho a principios del año pasado, me ha agarrado un torbellino de composición personal y yo sabía que no era para la banda, que si bien ya se estaba separando, todavía seguíamos. 

Ahí tuve como un quiebre en mi vida, una situación que no viene al caso, pero que me hizo decir “che, no me puedo morir sin sacar mis temas, ¿qué pasa si mañana me cago muriendo y no publico nada de lo que estoy creando? Entonces me entró como una adrenalina de querer empezar a grabar y publicar lo que tenía. No me preocupaba tanto la calidad, solo quería que estén publicadas. Da la casualidad de que decido apartarme de Carrusel porque no tenía la emoción de estar la banda. Y de ahí hice la inversión para hacer el home studio y empiezo a grabar. Sin saber nada empecé y fui aprendiendo sobre la marcha.

Así salió el primer disco medio todo de corrido. Eran canciones que yo venía componiendo, alguna que otra que había compuesto hace un tiempo y se armaron diez canciones. 

- Interesante que hayan salido tantos temas, ya que es extraño para muchos proyectos musicales de hoy. 

- Siempre me ha gustado el tema de los discos. Siempre he sido fanático de escuchar un disco entero, de diez o nueve canciones, del comienzo hasta el final. En base a eso le di la identidad al disco mío que es conceptual. Arranca en el primer tema y va teniendo conexiones hasta llegar al último. Además, se repiten motivos musicales durante distintas canciones, o letras que refieren a otros temas. 

Se fue dando muy solo, muy rápido y ahí dije “saco un disco”. Lo contacté a Guillo (Peyró) y le dije “no solo quiero sacar este disco de diez canciones, sino que quiero que tenga la esencia de cómo lo hice”. Con la calidad “casera”, no quiero que la voz esté toqueteada para nada, quiero que suene muy natural. 

En la locura de grabar, yo ya tenía prácticamente creado, aparte de este primer disco, un segundo. Mientras Guillo editaba el primero, yo estaba grabando el segundo. Pero en este caso, algo más pro. Aparte, aparecen los pianos, sonidos más cinematográficos. Hemos tratado de hacer un trabajo mucho más conceptual que el primero. El disco se llama “No mires atrás” y esa frase aparece en muchas canciones. Me lo tomé como una sola canción que empezaba en el primer tema y terminaba en el último. 

- Y cuando sacaste el primer disco, ¿saliste a tocarlo?

- No, lo mío en ese momento era grabar y grabar. Lo toqué en un par de bares solo y en la terraza donde yo vivía armé un escenario, llamé al sonidista de toda la vida de Carrusel y con muy pocos recursos hemos armado algo, hemos ensayado un par de semanas con amigos cercanos y hemos logrado hacerlo al disco en vivo. Ha salido medio a las apuradas, no ha sido algo tan preparado, pero tuvo su presentación. 

- ¿Y el segundo disco cuando salió?

- “No mires atrás” salió en abril de este año y “Raíz” en noviembre del año pasado.

- No pasó nada de tiempo entre uno y otro.

- A mí todo el mundo me decía, “¿no es muy rápido?”, y a mí no me importaba. Yo necesitaba sacar los discos, verlos publicados. Aparte si tengo un objetivo detrás, me encantaría que me vaya bien en la música y poder levantarme a la mañana y decir “solo me dedico a esto”. Y para eso yo sentía que tenía que tener mi base y cuando alguien vaya al perfil de Ale Arrieta no encuentre una sola canción sacada hace dos años. No tengo la necesidad de guardarme, está bueno publicar todo lo que uno tiene. 

El segundo disco no tuvo presentación, pero le fue muy bien en Spotify, porque aumentó mucho la cantidad de oyentes mensuales. 

- Contame del videoclip todo conectado que hicieron.

- Fue basándome en una banda que se llama Nafta. Ellos tienen esas escenas estáticas, obviamente súper producidos, y ponen las letras de subtítulos, como si fuera la escena de una película. Quisimos hacer lo mismo y llamamos amigos y amigas para que participen y lo hicimos en la terraza donde presenté y grabé el disco. 

Así como se ve, fue grabado todo de corrido. Sin edición, sin nada. Por supuesto, ha sido algo muy amateur, muy del espíritu que querer que el disco tenga ese video, pero nos ha servido mucho para seguir aprendiendo de cómo filmar, de cómo preparar un video. Sé que tiene sus defectos, pero quedó bien y quedó con la esencia de cómo fue grabado el disco. 

- Hablemos del tercer disco.

- El tercer disco fue estrenado hace poco más de un mes. Antes de que cumpla un año el primero llegó el tercero.
Es una locura. Es muy difícil de llevar a cabo. Es mucho, pero creo que es lo que me mantiene activo y la verdad que estoy en un proceso muy creativo. Siento que voy al ritmo de lo que estoy publicando. 

- ¿Qué opinas de eso que sucede hoy de que hay más invertido en el marketing digital, en los reels para Instagram que en las canciones en sí? Mucho en las redes, pero poco trabajo en las canciones.

- Estoy en el lado opuesto. Sí me siento de otra escuela, de otro estilo de hacer las cosas. Sé que todo está apuntado por ahí más a las redes sociales hoy en día. Incluso a armar un video de la putísima madre que te llame la atención y poner un fragmento de la canción y listo. A mí eso no me interesa, voy apuntando más a un público que quizás exista o quizás no, no sé, que le guste escuchar discos, que le guste escuchar historias, que busquen música de contenido. Tanto musical como letristico. Quizás estoy en una época equivocada, pero la verdad que no me importa tanto. Más allá de que me encantaría vivir de la música, no tengo el objetivo de ser famoso, no. Mi objetivo es publicar todo lo que tengo adentro, y si en algún momento llega, por los medios que yo estoy utilizando, bienvenido sea.
Por supuesto, si estoy en el otro lado. Por ejemplo ahora estoy trabajando con una community manager. 

- ¿En esta fecha en el Rosita vas a presentar el tercer disco?

 - Sí, lo presentamos, pero en realidad es presentar todo, los tres discos.

- ¿Vas a tocar con banda?

- Me acompañan muchos músicos. La idea es hacer un cierre de estos tres primeros discos y tocar con toda la gente que he tocado en prácticamente. Entonces, no quería que ninguno se quede afuera y como es un show muy largo, se han armado dos o tres bandas integradas por Santiago Arroyo, Facundo Castelli , Fabricio Arnone, Juan Manuel, Gómez López, Lucas Arrieta, Maxi Gómez , Gero Brandan, Emilio Herrera, Guillo Peiró, Carlitos Sáez, Lucía Toledo y Maxi Lamadrid.
Por suerte todos los músicos querían estar, querían participar de esto, así que me parece algo fantástico poder hacerlo. 

- Salido de esta provincia, ¿Qué te gustaría recomendar?

Burro de arranque, una banda que me encanta. El último disco que sacaron, le devuelve mucho al rock tucumano clásico. De ahí soy más de lo viejo. De Karma, soy fanático de todo lo que fue. Y “Teta” de Luis Gómez Salas, me parece un discazo. 

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