Top

El relato de una tucumana en Israel: "Me desperté y fui al refugio sin entender lo que estaba pasando"

FM LA TUCUMANA 95.9

Bianca Bellos Fariña es tucumana y vive en Tel Aviv. El pasado 7 de octubre vivió en primera persona el ataque terrorista. "Estuve cuatro largas horas sin saber lo que mi amiga estaba pasando", relató en diálogo con La Tucumana de Mañana donde también mostró cómo es un búnker por dentro. VIDEO.





Bianca Bellos Fariña, es una fotógrafa tucumana de 32 años que vive en Israel, más precisamente en la ciudad de Tel Aviv. Como residente en el país en conflicto, fue protagonista en primera persona de lo ocurrido el pasado 7 de octubre cuando el grupo Hamás lanzó misiles hacia la Franja de Gaza: “Estoy bien, como se puede. Uno dice bien como para decir algo. Al principio no se entendía nada de lo que estaba pasando”. Si bien el ataque fue una tragedia para el lugar, en la zona están acostumbrados a este tipo de sucesos y las casas y lugares públicos cuentan con refugios: “Casi todos tenemos instalados una aplicación en el celular que nos avisa cuando está viniendo un misil porque suena una sirena afuera y si no la escuchas, que sería muy raro, te suena el celular para que te vayas a refugiar. A las 6.30 de la mañana fue la primera en Tel Aviv, rarisimo, algo que no suele suceder. Me desperté boba y me fui al refugio sin entender lo que estaba pasando”, contó en línea con La Tucumana de Mañana.


Bianca contó que se enteró de la peor manera del ataque y las difíciles horas que vivió por no saber del paradero de su amiga: “En mi casa nos enteramos bastante temprano porque mi amiga estaba en la famosa fiesta donde fue la masacre, ella llamó a mi primo y le pidió por favor que llame a la policía porque estaban escondidos y escuchaban tiros. Mi primo Joni les explicó lo que pasaba y, a partir de ahí, estuvimos cuatro largas horas sin saber lo que Maia estaba pasando. Ese sábado fue un infierno hasta que llegó gente de un barrio privado a rescatarlos”.


Al ser una zona en conflicto, el país está preparado ante cualquier ataque y cuenta con un sistema antimisiles y distintos tipos de refugios: “No cayeron muchos misiles dentro de Tel Aviv porque tenemos un sistema que se llama cúpula de hierro que lanza otro misil a ese misil y lo intercepta para que no lastime civiles. Tel Aviv es bastante tranquila con respecto a eso y hay como tres formas de refugio: la primera es la más segura, una habitación de tu propia casa que es antiaéreos y tóxicos, la segunda es la que yo tengo que está en el subsuelo del edificio y es común para todos y, la otra opción que tenés es ir a las escaleras porque en Israel son muy seguras. La indicación es que nunca estés en los pisos de arriba o de abajo, sino ir a la escalera y quedarte contra la pared. Si no es cuerpo a tierra y las manos en la cabeza en la calle”, explicó la fotógrafa a Oscar Mazza y Gabriel Sanzano.


En este sentido, Bianca detalló el funcionamiento de estos refugios y cómo pasado un tiempo cada persona puede volver a sus actividades cotidianas: “Un refugio es una habitación común y corriente solo que tiene una puerta que es como blindada y pesadísima. La sirena suena durante un minuto y medio y en el refugio te tenes que quedar entre cinco y diez minutos como para estar seguro. Adentro se escucha cómo el misil de la cúpula de hierro intercepta al que nos tiraron. Se escucha como por encima de nuestras cabezas y ahí nos sentimos más seguros. El problema es cuando escuchamos algo en la tierra”.



Sin embargo, luego de los ataques perpetrados por Hamás la vida diaria no se normalizó del todo en Tel Aviv: “Hay día a día, no posterior, alguna gente, la que puede, está haciendo home office. Hay movimiento en la calle y muchas plazas tienen refugios, entonces muchas madres llevan a pasear a sus nenes y si suena la alarma se van al refugio. Hospitales y supermercados nunca cerraron y estos días hubo un poco de actividad comercial, pero no está todo abierto”, contó la entrevistada.


Consultada por la situación, Bianca explicó que siempre va a existir una incertidumbre por lo que pueda ocurrir, ya sea en Israel o en Argentina: “En menos de una semana tiraron 5 mil misiles y ayer tiraron cinco misiles a Tel Aviv. El país está preparado para estas situaciones. La situación es distinta y no se puede comparar los dos países. En Tucuman no salía mucho de noche porque tenía miedo a los robos. Acá tampoco salgo tanto de noche, pero en los tiempos normales sin guerra podes salir a cualquier hora y la incertidumbre es distinta”.


A diferencia de muchos argentinos que decidieron regresar al país y fueron repatriados en estos días, la joven tomó la decisión de quedarse: “Cada uno procesa el dolor como puede y hay mucha gente que no puede con esto o que está muy cerca de la Franja de Gaza. No es mi caso. Me quedo porque siento que este es mi lugar en el mundo y como judía en Israel me siento más segura que estando afuera. Hubo muchos ataques terroristas en estos días porque cada vez que pasa algo en Israel también ocurre afuera. Elijo quedarme porque no me siento en un lugar de vida o muerte. En otras ciudades hay gente que directamente duerme dentro de los refugios porque están todo el tiempo en alerta. Si yo hubiera pasado la situación de la gente que está en el sur, ya estaría en Argentina”.


Por último, Bianca habló de los fallecidos y aseguró que es algo que les duele a todos, ya que se trata de un país pequeño y están muy conectados entre sí: “Conozco gente que murió, no puedo decir que eran amigos míos, pero fueron muchísimos y gente muy joven. Todos los chicos que murieron en la fiesta tenían entre 20 y 30 años. Es terrible. Israel es más chiquito que Tucuman. Así como siempre decimos que tucuman es un pañuelo y nos conocemos todos, acá también pasa eso. Hay más población en Tucumán, pero de alguna manera los conoces”.

Mirá la entrevista completa: