Top

Inmortal: la conmovedora historia de Lastenia Blanco, la primera maestra de Lules

Historia

Con su vocación docente, Blanco enseñó en igualdad y tuvo la difícil misión de contribuir a la contención de los alumnos que asistían a la escuela y que formaban parte de las clases sociales empobrecidas. Hoy, la escuela donde dio clases lleva su nombre.

Vista del Ingenio Lules a principio del siglo XX. Foto: Archivo La Gaceta.





Hacia fines del siglo XIX en nuestro país se fue construyendo un sistema educativo sostenido por la Ley 1420 mediante la cual se buscaba construir una escuela de libre acceso para todos los niños y niñas de la nación. Tucumán, previamente a la Ley 1420, mantuvo un incipiente sistema educativo propio que fue complejo ya que hubo condiciones socioeconómicas que hicieron difícil su sostenimiento. En este contexto se destacó Doña Lastenia Blanco, la primera maestra de Lules.

Lastenia Blanco nació en Trancas y es bautizada, el día 10 de abril de 1858, como “Doña Josefa Lastenia”, párvula de cuatro meses, “de padres no conocidos”. En esos años, en nuestra provincia, esa categoría significaba que eran hijos de personas que no podían asumir públicamente su paternidad/maternidad. Lo que se buscaba era proteger por la identidad del padre y de la madre, pero, no por ello se le negaba al niño su posición social”. Es por este motivo que, al documentar en el acta de Bautismos de la Parroquia, inscribiéndola con la palabra “Doña” y recibiendo el apellido de una familia tradicional tranqueña, Lastenia fue parte de las clases altas de la sociedad tucumana.

Lastenia vivió los tiempos de transición de la educación pública en Tucumán. Entre 1853 hasta 1870, podían acceder a la educación hijos de los miembros de las familias tradicionales de Tucumán. Pero la transformación del ciudadano argentino también debía incluir a los niños que vivían en las zonas rurales. Muchos de los dueños de las tierras como los peones de las mismas, necesitaban de sus hijos en edad escolar en los trabajos rurales. De allí que en estos años comenzó a haber reticencias de los padres en enviar a los niños a las escuelas.

En esta etapa, se fue conformando un conjunto de instituciones que lentamente irán definiendo el nuevo modelo educativo en la provincia A medida que avanzaba el proceso de escolaridad, aparecieron nuevos edificios escolares en distintos puntos de la provincia. Y, sobre todo, con la aprobación y puesta en funcionamiento de la Ley 1.420, se encontró a la “Señorita” Lastenia Blanco, preparada para la vocación docente.

Los destinos de Lastenia Blanco y de la Villa de Lules se vincularon profundamente. Lastenia, hacia 1869, residía en San Miguel de Tucumán, junto a su abuela, su madre, y sus hermanas. Pero, hacia1895, ya estaba radicada en Lules.

La Villa de San Isidro de Lules había sido fundada por el presbítero Dr. Zoilo Domínguez considerándose como fecha de fundación el 21 de noviembre de 1851, pero fue recién en 1956 cuando tuvo la categoría de municipio.

Lastenia Blanco había llegado a Lules a mediados de la década de 1870 para convertirse en su primera maestra. En la zona, a fines del siglo XIX, funcionaba una escuela provincial llamada “La Capilla”, ubicada en las cercanías del Convento de San José de los Montes de los Lules, que había sido construido por la Compañía de Jesús a mediados del siglo XVII.

Lastenia Blanco, además de maestra, también se desempeñó como directora de la Escuela “La Capilla” y como establecía la ley 89 se dedicaba a la enseñanza de la lectura, escritura, aritmética, historia nacional, urbanidad, principios republicanos y doctrina moral y cristiana. Pero además de la tarea educativa tuvo la difícil misión de contribuir en amplios aspectos a la contención de los alumnos que asistían a la escuela. Los niños que asistían a la escuela formaban parte de las clases sociales empobrecidas ya que concurrían vestidos prácticamente en harapos con notables rasgos de padecer desnutrición. La docente provenía de su propio sueldo o de ayuda de los vecinos alimentos, vestimentas y otros elementos para sus alumnos ya que el Estado se encontraba ajustando diversas áreas, como ser la instrucción pública, debido a que priorizó encauzar la dirección económica de la provincia afectada por la crisis nacional de 1873, por lo cual la escuela no recibía ningún tipo de ayuda estatal. Su vocación docente se fusionó con las acciones caritativas representativas del culto católico. Hacia 1888, gracias a su entusiasta apoyo ayudó al establecimiento en Lules de un Centro Regional del Apostolado, llamado “Apostolado de la Enseñanza” cuya presidencia fue ocupada por la mismísima Lastenia.

A su muerte, producida en 1911, la escuela fue cerrada. Posteriormente, fue trasladada al Ingenio Lules y su nombre cambió. Luego del cierre del Ingenio, en 1889, se la conoció como la escuela del Ex Ingenio. Finalmente, hacia 1977, la escuela fue designada con el nombre de doña Lastenia Blanco, en reconocimiento a su intenso trabajo educativo, convirtiéndose en la “Escuela Rural Lastenia Blanco”.

Los restos de Lastenia Blanco descansan en la entrada de la histórica iglesia de San José de Lules. Pasó a la inmortalidad como una de las más importantes maestras que dio nuestro Tucumán.

Fuente: Conectate con la Escuela, Ministerio de Educación de Tucumán. Lee la historia completa:


Descargar