Milagros en Tucumán: "Yo lo vi muerto, yo lo vi resucitar, yo vi lo que San Roque hizo"
Panchito llegó a la vida de Cecilia y a los pocos días contrajo una enfermedad letal en los perros. Cuando la medicina no tuvo más respuestas, la joven del barrio 11 de marzo revela en detalle lo inexplicable en este 16 de agosto, el día más esperado del año. VIDEO
Cecilia y Panchito, unidos por siempre.
“Es impresionante la cantidad de personas que tengo a mi alrededor. Todos estamos llorando. Todos estamos muy emocionados. Es un día especial para muchos de nosotros. Tuvieron que cortar la avenida Avellaneda y la Santiago. Este año se llenó totalmente. Estuvo hermosa la ceremonia y bendijeron a todas las mascotas”.
Cecilia está emocionada. Habla con eltucumano minutos después de que cada fiel comenzara a volver a su casa después de ir a agradecer a San Roque. Cecilia, como todos los años, lo hizo en remis junto a Panchito, su perro, y no es una historia más la que revela por primera vez desde que religiosamente asiste a la parroquia en uno de los días más esperados del año.
La historia de Cecilia tiene un protagonista ejemplar: Panchito. “En 2015, mi hermano de Buenos Aires me lo trajo camuflado en colectivo. Tenía apenas 3 meses y medio. Llegó a Tucumán y a los días contrajo el parvovirus, que es la muerte para los perros. No es como la gastroenteritis. Esto te mata. Mi perrito llegó a pesar apenas 300 gramos, era piel y hueso”.
“Cuando lo llevé a la veterinaria, no me dio esperanzas. Estaba esperando que él muriera. Estuvo internado diez días con medicación, convulsionaba, no paraba de convulsionar, me lo llevé a mi casa a esperar que muriera, me agarró mucha angustia, hizo tres convulsiones y estaba muerto. Yo lo vi muerto. Empecé a gritarle a San Roque, me arrodillé rezando, y le prometí que si lo salvaba iba a venir a agradecerle siempre”.
Cecilia recuerda, a siete años del milagro que relata, exactamente lo que pasó: “Él estaba muerto, yo lo vi muerto, yo lo vi resucitar, yo vi lo que San Roque hizo. Panchito volvió a respirar, volvió a darme señales de vida. Lo volví a llevar a la veterinaria bajo agua, bajo el sol, con suero, no importaba. La veterinaria no sabía cómo explicarme cómo resucitó. Me dijo que era verdaderamente un milagro”.
Hoy, como pueden ver en la imagen, Cecilia disfruta de Panchito, a punto de cumplir los 8 años: “Panchito hace una vida sana, está por cumplir los 8 años gracias a San Roque, y me emociona un montón cada cosa que comparto con él. Yo lo vi morir a mi perrito y volvió a vivir. Y no soy la única: he estado conversando con una señora que su perrito había sido chocado, tenía todos los intestinos aplastados, estaba muerto, no se iba a salvar, le diagnosticaron la muerte, le hizo la promesa a San Roque, y ahora con rehabilitación le camina, renguito pero le camina”.
Desde el corazón del barrio 11 de marzo, Cecilia también se animó a jugar en la kermés para ver si ganaba un par de Holanda. “Es una fecha que esperamos todos los años. La de hoy y la de San Expedito, a quien también le pido. Pero San Roque significa mucho en mi vida, desde que lo descubrí en mi vida siento que entendió mis sensaciones y mis pedidos y siempre me acompañaba. Así que el año volveremos a estar. El año que viene y espero que muchos, pero muchos más”.
