Top

"Fue un ángel en la ruta": la enfermera tucumana que encontró un héroe al volante

Solidaridad

Emoción y solidaridad en medio de la noche sobre la Ruta 38: "Hace diez años hago este trayecto y solo dos veces me pasó algo así"





A pesar de las comodidades que pueda presentar para la mayoría de los conductores, es sabido que manejarse en motocicleta conlleva muchísimos riesgos y más aún cuando este traslado es nocturno, y sobre todo por una ruta.

Esto bien lo sabe Mayra Sánchez, una enfermera de 37 años oriunda de la ciudad de Aguilares: “Hace diez años que comencé a trabajar acá en el Sanatorio Inmaculada Concepción, en Concepción, desde los 27 años. Siempre me manejé en moto, salvo algunas veces que me pueden traer o puedo tomar el colectivo porque a veces es medio tediosa la espera, por eso voy en moto. Ayer me pasó algo particular, salí del trabajo a las 22, trabajo de 14 a 22, fue un día tremendo para mí ayer, soy mamá, tengo que dejar a mis hijos alistados y todo eso, antes de salir, siempre se complica hacer todo a tiempo y a veces salís con la cabeza aturdida”, cuenta, para eltucumano.

Cada vez que salgo de la guardia le pido a Dios que me proteja por la ruta, no solo por la infraestructura, sino que por la inseguridad. Iba llegando a la altura de Alto Verde y veo una camioneta que pone balizas atrás mío. Yo aprovechaba que él iba despacio para ir casi pegada a esa camioneta y él me acompañaba, yo pensé que quizás su vehículo tenía una falla y que por eso iba despacio” rememora Mayra.

“Pero al final, fue como un ángel, hay escasa iluminación desde Alto Verde hasta Aguilares. Cuando llegué ya a donde había buen alumbrado público la camioneta me tocó bocina y se fue, ahí me di cuenta que me había acompañado todo el camino. Solo alcancé a ver que decía Fumi Max, siempre le doy gracias a Dios de llegar sana y salva” confiesa.

“A modo de agradecimiento hice la publicación, en menos de una hora le llegó y me mandó un mensaje, se lama José Luis López y se ve que trabaja haciendo fumigaciones, él me mandó un audio por Facebook y me contó que le hice acordar a su hermana que trabajaba en una carnicería y que volvía a esa hora en la ruta cuando salía de trabajar. Me dijo que no era nada para agradecer y que siempre trata de tener esos gestos con la gente que se maneja en moto y más con las mujeres. Él estaba muy emocionado y no había palabras de agradecimiento para que describa lo que sentía yo. Fue un Ángel en medio de la noche”, cerró la emotiva historia de esta enfermera, que casi con lágrimas en sus ojos recuerda el gesto de un desconocido que, lejos de querer hacerle un daño, ayudó a que vuelva sana y salva.

A pesar de que es raro conocer este tipo de historias contadas en las rutas, lo cierto es que son muchas las personas que se suman a este tipo de iniciativas de bajar su velocidad para escoltar a esos motociclistas, de los cuales muchos tienen familias esperando en casa. ¿Harías lo mismo?