Tucumán, no lo entenderías: un nuevo rejunte de noticias estúpidas y sensuales
Escándalo, insultos y gorriada en Barrio Norte; los chanchos que pasean por Yerba Buena; los jockeys que corren sin caballos y muchos otros episodios absurdos, pero bien nuestros. Acá ¿dónde más sino?

Ale Fantino, re manija con esta sección de noticias.
Olimpiadas acuáticas
Que llueva y se inunde Tucumán es una noticia que no puede sorprender a nadie a esta altura del mundial. Las calles se llenan de agua convirtiéndose en ríos torrentosos, la corriente se lleva las bolsas de basura, las motos, los autos y algún que otro transeúnte desprevenido. De niño, uno salía entusiasmado y ponía a navegar barquitos de papel. De grande, no queda más que lamentar la inclemencia climática y rogar que el agua no suba más de la cuenta, entre a la casa y moje los muebles. Algunos maldicen a los cielos y otros, aferrándose a ese antiguo adagio que reza “al mal tiempo, buena cara”, aprovechan para disfrutar del agua y practicar deportes acuáticos. Sí, no falta quien se entrega al goce fluvial y saca el barrenador que quedó guardado desde las últimas vacaciones familiares a la playa en tiempos en que Derek López cantaba su popular Batida de Coco. Otros, rompen las olas urbanas arriba de un kayak, de un tacho cortado, de una conservadora o de cualquiera cosa que sirva de embarcación. Así sucedió en la última tormenta cuando la ciudad se convirtió en la sede improvisada de las olimpiadas acuáticas 2022.
No corre, vuela
Y ya que hablamos de deportes exóticos y disciplinas estrafalarias, este es el único lugar en el mundo donde las carreras de caballos pueden darse el lujo de prescindir del caballo. Es que en Tucumán los adeptos al turf no sólo pueden jugarle unos boletos a algún potrillo prometedor o a un viejo crack de las cuadreras, también pueden asistir a la carrera de jockeys. Sí, como en una carrera de automovilismo sin autos o en una carrera de motociclismo sin motos, los que salen a la pista son los pequeños conductores de los equinos. Y resulta que son ligeros con o sin caballo, como José Alfredo Vizcarra que se impuso por varios cuerpos a sus colegas, proeza esta que quedó registrada en video y que le valió elogios de todo tipo. Hasta lo pidieron de delantero para San Martín. ¿Estará a la altura de las circunstancias? Velocidad no le falta.
Por qué lo dice tan brusco
Vamos a sincerarnos: ¿a quién no le gusta el puterío? El chisme, el escándalo, el corre ve y dile, el bardo, el quilombo, la sucesión de hechos bochornosos. Como oyentes o espectadores circunstanciales, quién no para la oreja o el ojo cuando se produce una trifulca, un entuerto, un problema de polleras o de pantalones. Por acá no faltan las disputas ni el culiyo de turno que tome nota del asunto. Ni hablar de ahora que los teléfonos permiten registrar cualquier evento con sus lentes indiscretos. Así sucedió con esta estruendosa disputa que sobresaltó a los vecinos de Barrio Norte en una madrugada de diciembre pasado. Ante la gritería, asomaron a los balcones para filmar un entredicho en el que no se mezquinaron gritos, insultos, huevazos, intervención policial ni tampoco los aplausos. Para quienes presenciaron la escandalosa confrontación en la vía pública, el último acto, plasmado en una frase tan tajante como hiriente, mereció una ovación de parte del consorcio que siguió de cerca los entretelones de esta telenovela. Reproducimos acá tal expresión y lo dejamos a criterio de nuestros lectores: “¿Sabés una cosa? Me lo cogí a tu novio”.
La chancha y los chanchitos
¿Qué van sortía el chancho? Es la pregunta que algún coterráneo se hizo alguna vez y que nosotros nos repetimos de tanto en tanto. Y es que quién no quiere la chancha y los veinte o la chancha y la máquina de hacer chorizos. Acaso la culpa no sea del chancho, sino de quién le da de comer porque, como todos sabemos, a cada chancho le llega su San Martín. No sabemos si ese fue el caso de una chancha y su chanchito que fueron vistos circulando de lo más campantes por las calles de Yerba Buena despertando especulaciones de todo tipo respecto al origen y también al destino de estos porcinos. Si cada chancho a su rancho ¿de dónde salieron la chancha y su chanchito?
Brasil al 600 Yerba Buena. Si alguien se le perdió la Chancha... pic.twitter.com/0oEMx6sTPE
— Miguel Noguera ♈ (@migangnoguera) February 3, 2022
Cada quién se la rebusca como puede
Quién no tuvo que empeñar un bien preciado en tiempos de vacas flacas, quién no se vio obligado a deshacerse de alguna joya de la familia para levantar algún muertito, quién no vendió lo primero que encontró a mano ante la insistencia amenazante de algún usamico. Justo es honrar las deudas, aunque para saldarlas no quede otra que el despojo. Este fue el caso de un vecino que apeló a un grupo de compra y venta de Facebook para ofrecer un extraño artículo que, de acuerdo a la descripción, se trataría de “dos hachas indias”. El pretendido objeto arqueológico se ofrece con mango nuevo, pero no cuesta precisamente dos mangos, sino 200 dólares por cada una. Y sí, cada quien se la rebusca como puede.
200 DÓLARES una hacha india?????? queeee jajajsjejsjajajajajjaja dios en tucuman publican cada pelotudez hermano pic.twitter.com/tICgXxkTVb
— deiv (@ripdeiv) January 24, 2022