"Me ayudó a vender pizza bajo la lluvia": Luz, Sol y qué pasó anoche en Tucumán

Luz Molina tiene 23 años, es mamá de Sol de 3 añitos y esta noche salieron a vender las pizzas que entre las dos hacen con sus propias manos. No contaban con la lluvia que cayó anoche en Tucumán, pero al mal tiempo buena cara: “Mi bebé me ayuda a vender pizza bajo la lluvia”.

“Al principio no te voy a mentir, nos pusimos muy tristes cuando se largó el agua. Es nuestra segunda noche vendiendo pizzas y no vendimos ni una. Encima la esquina de Junín y Sarmiento se llenó de agua y los autos nos salpicaban. Pero nos refugiamos bajo techo y empezamos a divertirnos. Con una amiga, le pusimos buena onda y nos sacamos las fotos que inmediatamente emocionaron a un montón de gente”, cuenta la mamá.

Luz había cobrado el IFE hace unos meses y lo había invertido en postres: chocotortas y cupcakes, pero no funcionó. “Busqué tener un trabajo propio porque antes cuidaba a dos chiquitas todo el día y a mi hija la veía tres horitas hasta que se dormía y nada más. Busqué trabajo como muchísima gente por todos lados, pero nada: en una cervecería me ofrecieron, pero no tengo movilidad y cierra a las 2 de la mañana y gastaría más en taxi”.

“Lo mismo me pasó con un trabajo en La Banda. Nosotras vivimos en Villa Santillán y no disponemos de movilidad. Mi mamá me ayuda con su marido, pero no quería estar lejos de mi hija. Ahora empezamos con las pizzas y ella amasa conmigo. Le encanta la pizza y las salchichas. En el cumpleaños de un amigo hice 100 pizzetas y a todos les gustaron y me animaron a la venta. Esta es la segunda noche, pero nos agarró la lluvia, qué se le va a hacer”.

El lamento de la joven tucumana tuvo una compensación y fue la inmediata repercusión que generó en la gente que le deseó mucha suerte y un vecino que se ofreció a ayudarle con el diseño de un flyer para ayudarla en la venta: “Una amiga me decía que me hacía el aguante en Buenos Aires hasta que consiga algo, pero no puedo estar sin Sol. Insisto: hoy estábamos tristes por la lluvia, pero al rato empezamos a hacer bromas. Ella es así y me quiere ayudar”.

Ya secas y comiendo las pizzas que no vendieron por el agua, Luz dice: “Vendo común y especial de jamón y salame. Son caseras. Las comunes salen 150 y dos por 250. Las dos especiales por 350 y una promo por 500. Desde que subimos la foto solo llegó buena vibra por las redes. Tengo un horno en mi casa, pero el gas es envasado y eso hace que se demore el proceso de hacer las pizzas. Me gustaría trabajar en un lugar haciendo pizzas y vivir mejor con mi familia y en especial con ella, que me acompaña con tres añitos en todo, siempre con una sonrisa, siempre como en la fotito”.