Su mamá se contagió después de dar a luz y Valentino quedó solito: puro amor en Monteros

Valentino llegó a este mundo hace ocho días por cesárea. Su mamá Zaira dio a luz, vio cómo la enfermera lo llevaba a neonatología y, como si algo le faltaba a esas horas tan revolucionadas por la feliz noticia, esperaba el resultado del hisopado: “Zaira había estado en contacto con su abuelita y se contagió. Luego de dar a luz, como era positiva, quedó aislada al igual que el resto de su familia”.Quien habla esta tarde con el tucumano es Susana, la esposa del doctor Claudio Alibertti, la pareja que tomó una decisión que resume el amor en tiempos de pandemia y emociona a Monteros: “Soy amiga de la abuela de Valentino y nos ofrecimos a cuidarlo hasta que le dieran el alta a la mamá”.Madre de dos niños, Susana volvió a revivir sensaciones propias de una flamante mamá: “Ya había perdido la costumbre. Mi hermano fue papá hace tres meses y nos dio el huevito para que Valentino durmiera ahí. El bebé es excelente. La mamá ha depositado la confianza en nosotros y fue una experiencia muy gratificante”.“Valentino tiene 8 días y está muy bien, es un pan de Dios, durmió muy bien. El hospital le proveía de la leche y los pañales y entre todos pusimos un granito de arena para estos días. Lo más angustiante de todo este tiempo fue la separación de la mamá: todos los días hacíamos videollamadas con Zaira. Se largó a llorar cada vez que lo vio”.“Gracias a Dios la mamá de Valentino ya recibió el alta y el bebé volvió a sus brazos. Están bien. Conociéndose. Por supuesto que el vínculo va a continuar con el bebé. Hasta bromeamos que si le llegaba a tocar un pelito al chiquito, volvía con nosotros. Por el momento no nos vamos a juntar hasta que todo esto pase. Pero es una felicidad muy grande haber cuidado a Valentino todo este tiempo tan difícil para todos. Fue una gran felicidad”.