Explorar Tucumán puede ser una aventura apasionante para aquellos que pasan sus días de vacaciones en la provincia. Además de los lugares turísticos conocidos por todos, existen algunos sitios escondidos que maravillan a propios y extraños.
Y en ese contexto podemos encontrarnos con las ruinas de la antigua represa hidroeléctrica que se ubica en la Quebrada de Lules, a 20 kilómetros de la capital.
Hasta allí llegó
Javier Ruiz, un usuario de la comunidad online de Taringa!, quien luego
compartió en ese portal las imágenes y el relato de su experiencia.
“Subiendo un poco la montaña nos encontramos con la parte más emocionante, el túnel por donde venía el agua desde el otro lado, llamado ´Dique del Medio´, con una extensión de 5 metros de largo y más de 100 años de antigüedad”, detalla.
Actualmente se puede caminar por ahí, atravesando una oscuridad absoluta donde se pueden encontrar con murciélagos.
“Este lugar que muy pocas personas conocen se encuentra oculto en medio de los cerros tucumanos. Allí no hay señal, y mucho menos electricidad (sic). Sirvió de represa y por el túnel mandaban el agua que al llegar a la usina hacia girar los generadores”, agrega Ruiz.