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San Martín y el milagro de fin de mes: por qué esta noche como sea se sale

ANÁLISIS

Miles y miles de tucumanos son felices sin un mango en el bolsillo, pero de algún lado van a sacar. Siempre es hoy. Mañana vemos. | Por Alfredo Aráoz

El rey de la noche. Foto: CASM Oficial.




Esta noche ganó San Martín como se llega a fin de mes: raspando la olla, con Sand volando como superhéroe de Rapicuotas, con Banegas corriendo como el laterío en José Cuervo. Esta noche ganó San Martín como se comienza el mes: con la billetera cargada para la fiesta y con un jetazo de entrada.

¿Cuál es San Martín? ¿El que sale a reventarla un sábado a la noche o el que se queda en la casa porque no tiene una? ¿El que invita a los changos todo o el que espera un centro? ¿El que se endeuda y que se cague el resto del mes o el que se arrepiente cuando Edet le toca el timbre?

Son luces y sombras de un equipo que no termina de enamorar, pero que es puntero y no hay nada más importante que eso. Luces y sombras de un equipo que tiene la capacidad increíble de obligarte esta noche a salir, a armar algo, a pegar ese llamado, a cancelar la peli, a festejar porque vivir es difícil, pero qué simple parece de repente cuando gana San Martín.

Ciudadela barrio popular resume a Tucumán: si ves a uno contento esta noche, preguntale de quién es y la respuesta no te sorprenderá. Acá ya no importan las formas: que quede en claro. El viernes pasado peloteaste al arquero suplente de Madryn y no lo pudiste clavar y ese empate sin goles te arruinó la semana. Hoy lo prepeaste de entrada, gritaste, te sorprendiste, te ilusionaste con una goleada, pero después aguantaste con Darío Sand, ese arquero tan parecido a SuperNor: casi nunca te falla.

Hoy San Martín le ganó a un equipo llamado Agropecuario que tiene más plata en el banco que hinchas en la tribuna. Es el equipo de Grobocopatel que hasta al querido Taca Bieler le paga una fortuna. Y en un torneo donde el propio San Martín sabe que con la camiseta no alcanza, hoy el Santo puso lo que había que poner y eso es lo que el pelado de La Quiaqueña agradecerá esta noche cuando haga la caja.

Ahora bien: ha quedado en claro que esta noche se manotea el ahorro guardado para el locro del miércoles 1° de mayo, pero una última pregunta para no secarla con la sed que hace: ¿qué hacemos con el Traductor? ¿Qué hacemos con el DT? ¿Lo invitamos a nuestra mesa o no? El gol es de él: no tengan dudas que él lo armó en su cabeza. Pero el equipo atrás, también es de él. ¿No era una noche para Gonzalo? Si hay alguien en este plantel que te hizo feliz es Turbo. Viendo las contras, ¿no lo liquidaba? 

Son todas preguntas que flotarán esta noche mientras brindás porque sos puntero, porque estás ahí, porque te gusta estar ahí, arriba de todos, cargando a los amigos con que les falta poco tiempo, avisándoles con que ya se acerca Ciudadé, sin llorar por el escandaloso penal que no te cobraron, solo pidiéndoles  que te dejen festejar hoy, que no estén tan pendientes, que al fin y al cabo ganó San Martín y muchísimos tucumanos están felices: El Tortu, Taddei, Luisito, Malu, Roli, el Chapa, Pomelo, La Brepe, Los Pibes. Muchos tucumanos contentos. Muchísimos tucumanos felices este sábado de fin de mes. Tan simple como eso. Tan hermoso como eso.