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La Jerarquía de Upcn fue demasiado para Monteros Vóley en la primera semifinal

liga Argentina

En el estadio Municipal colmado, la Naranja lo dio todo, pero fue superada por un sólido equipo sanjuanino que volvió a mostrar por qué es el último campeón y un permanente candidato al título. Ahora, los tucumanos deberán ganar los dos partidos en San Juan para avanzar a la final.





Se sabía de antemano que el desafío era muy difícil: en frente estaba el último campeón de La Liga Argentina que además obtuvo nueve de los últimos once títulos en juego. Con un plantel plagado de figuras al que le sobra jerarquía, UPCN se presentaba como un rival de temer para un Monteros Vóley que viene realizando un campañón con mayoría de jugadores locales y un presupuesto modestísimo para la categoría.

De todos modos, a los partidos hay que jugarlos y la Naranja Mecánica llegaba con una ilusión legitimada por sus 20 triunfos en 24 encuentros, habiendo terminado tercera de la fase regular, ganándose un lugar entre los cuatro mejores de la temporada.

Por todo esto, el Estadio Municipal Profesor José Nicolás Russo estaba repleto de monterizos esperanzados en que los suyos pudieran dar el batacazo una vez más.

A pesar del empuje del público, UPCN, dirigido por experimentado Fabián Armoa, no tardó en mostrar su categoría sacando un importante ventaja en marcador desde el arranque, gracias al potente servicio del brasilero Gabriel que forzó la recepción de Monteros, condicionandole el ataque.

Así, con un 8 a 2 parcial, el primer set estuvo liquidado antes de llegar a la mitad y no hubo respuestas de los locales que intentaron, pero simplemente no pudieron.

Si había chances de soñar con una remontada, esas estuvieron en el segundo set, cuando La Naranja logró jugar palo a palo, mostrando ese rendimiento que lo trajo hasta esta instancia.

La oportunidad inmejorable de empatar se desperdició cuando el equipo tucumano llegó a estar 24 a 22 y tuvo dos set point que no pudo aprovechar, para que luego UPCN se termine imponiendo 27 a 25 en el chico más parejo de todos.

El golpe anímico fue tan grande que el tercer parcial fue muy similar al primero y aunque los sanjuaninos tardaron un poco más en sacar la ventaja, se llevaron el triunfo por 25 a 18, redondeando una noche perfecta, sacando más de medio pasaje a la final en una cancha muy difícil.

La serie se juega a mejor de tres, por lo tanto, Monteros está obligado a ganar el próximo jueves en San Juan para forzar un tercer y definitorio partido también en Cuyo.