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La leyenda del viejo y el sabio

ANÁLISIS DECANO

Histórico arranque de Atlético Tucumán, con 4 triunfos al hilo y clasificación asegurada. El equipo de Ricardo Zielinski es imparable en ataque y tiene en Cristian Lucchetti a una figura Monumental. El técnico es el cerebro y el arquero el corazón de un equipo sólido, que tiene hambre y deja la piel en cada pelota. Línea por línea, hoy todos son importantes y hay motivos para ilusionarse.

Los hinchas desde la bandera ven el festejo de Melano y a los jugadores de Racing abatidos. Foto: Olé.





"Vamos los Decanos, vamos a ganar, 25 es una fiesta, 25 es carnaval", cantan desde sus casas los hinchas y disfrutan del presente histórico del Club Atlético Tucumán: 4 triunfos al hilo, con 11 goles a favor y apenas 3 en contra, firmando su mejor arranque en Primera División y asegurando antes que nadie la clasificación a la Fase Campeón de la Copa de la Liga Profesional. El técnico y el 1 son las figuras excluyentes, el cerebro y el alma de un equipo con puntos altísimos en todas sus líneas.

Este Decano imparable que sigue haciendo historia tiene el sello distintivo de Ricardo Zielinski: el sabio Ruso ve el partido tranquilo desde el un costado, no vende humo y no deleita a la prensa porteña santificando la posesión ni usando chupines apretados, con movimientos histriónicos corriendo pegado a la línea de cal. Sobrio, firme, combativo, eficaz.

Zielisnki cree en su equipo y el equipo cree en Zielinski. El Ruso apostó por Osores y el pibe sigue firme en la zaga, deja la piel en cada jugada, no se complica y tiene chichones en la frente de tanto despejar de cabeza. También por Risso Patrón, que emociona por su entrega y demuestra cualidades de sobra para ser el 3 titular.

Cabral se manda una por partido, pero no agacha la cabeza y tiene temple para volver a intentar salir jugando después del error y eso es mérito del jugador y del DT. Ortiz cumple a rajatabla por derecha, no hace una de más y se suma en ataque con criterio.

El entrenador apostó por el Bebe Acosta por adentro al lado de Erbes y la dupla de contención y cada vez más juego se complementa mejor partido a partido. 'Pichi' quedó de último hombre en un córner a favor y fue a disputar la pelota con el alma: impidió el contraataque y de su cabezazo se generó la jugada del gol. Premio a la garra del 5. Siempre al acecho está el 'Gordo' Mussis, que demuestra su categoría cada vez que suma minutos en cancha. Lotti, que era delantero, es puro sacrificio y el gol ya va a llegar. Hoy reapareció el Bicho Aguirre que tiene calidad y experiencia y puede ser importante con su pegada.

Por derecha, Melano está imparable. El Ruso lo conoció como delantero en Belgrano, pero arrancando desde atrás y con espacios lastima siempre por afuera: tras 20 partidos sin marcar goles con la camiseta de Atlético, lleva 2 en 4 partidos y viene en franca levantada. Hoy fue figura. La mano del técnico, que le confianza y libertad.

Heredia es una grata revelación: si había dudas de que podía ser el conductor Decano, las disipó todas. Asistencia para el 1 a 0, gran anticipo para el 2 a 0 y clave para hacer jugar al equipo, tirarse atrás y conectar a las líneas de un equipo que es pura voluntad para marcar y pura determinación para ir al frente y buscar siempre el arco rival. Por eso tiene 11 goles a favor y el 10 hizo 2 de ellos.

Heredia conduce, genera fútbol y le suma gol a su producción. Foto: Miguel Vega (Prensa Atlético Tucumán)

Toledo, quizás el más cuestionado, volvió al gol (golazo) ante Unión y hoy peinó en el primer palo con todo el oficio del mundo para el gol del 10. Mucho sacrificio y lucidez para aguantar cuando el equipo busca oxígeno. Zielinski lo sostuvo y el 9 le paga.

Además de todo eso, el Ruso va mechando de a pocos a los pibes del Club, pero hoy se la jugó por hombres de experiencia como los mencionados Mussis y Aguirre más Gustavo Toledo y Alustiza, para aguantar y liquidar un partido bravo ante los inquietos juveniles de Racing. Ya llegará nuevamente la hora de los pibes de la cantera Decana.

Un párrafo aparte para Cristian Lucchetti es muy poco. Un capítulo entero en la historia grande del Club Atlético Tucumán se merece el Laucha, que debutó en Primera hace 24 años y sigue haciendo historia con la Celeste y Blanca.

Al 'Viejo' le cobraron un penal que no fue foul y que encima era fuera del área, pero poco le importó: voló con decisión sobre su derecha y puso la mano firme para tapar el remate furioso del joven Domínguez, que no había nacido cuando el Laucha debutó con la camiseta de Banfield ante Boca.

Las manos del 1 son el corazón del Decano: líder, capitán, referente, guía espiritual de un equipo que no se rinde nunca y que cuando parece que está golpeado saca el pecho y demuestra que está más fuerte que nunca.

Cada intervención de Lucchetti es clave para Atlético Tucumán, ya sea un penal o un pelotazo largo para Toledo e inventar una jugada de gol ¡de un saque de arco! Su figura se agiganta partido a partido y no alcanzan los adjetivos para describir lo que representa para el Deca.

Van apenas 4 fechas, pero son 4 triunfos en fila y eso representa el mejor arranque del Decano tucumano. Poco le importa a Atlético si algunos le quieren bajar el precio al torneo, si la AFA quiere que se juegue aquel partido contra River o si Racing viene con suplentes: en Avellaneda fue goleada, eh.

El 'viejo' Lucchetti y 'sabio' Zielinski son el corazón y el cerebro de este Decano histórico, imparable, que no para de ganar, que se muestra cada vez más sólido, que ya está clasificado y que ilusiona a los hinchas, que sueñan despiertos y tienen motivos de sobra para hacerlo.