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"Solo queremos llegar": exjugador de Atlético varado en el Caribe

ALERTA: PANDEMIA

Viajó junto a su familia en un crucero por el cumpleaños de una de sus hijas, pero República Dominicana cerró sus puertos y quedaron "dando vueltas en el agua" y viviendo "una situación de encierro muy difícil".

Aníbal Roy González. Foto: depo.com.ar





Aníbal Roy González, exjugador de Atlético Tucumán y director técnico de Deportivo Llorens,  vive un verdadero calvario junto a su familia y un centenar de argentinos que permanecen varados en un crucero en Caribe en el que se registraron casos de Coronavirus y que no pudo amarrar en República Dominicana porque ese país cerró sus puertos y aeroestaciones.

"Empieza a haber una desesperación general, la estamos pasando mal. Hoy nos dieron las etiquetas de las valijas para que tomemos un chárter a Buenos Aires, así que esperemos que sea en serio porque varias veces nos dijeron lo mismo y después se suspendió el vuelo", explicó el exjugador Decano en diálogo con Télam.

El traslado estará a cargo de una empresa belga desde el aeropuerto de Pointe-a-Pitre, Guadalupe, una isla francesa desde la que la retornaron días atrás los pasajeros de Europa y Brasil. "Ese es el único lugar en el que atraca el barco. Todos fueron bajando hasta que quedamos sólo los argentinos (cerca de 120) y algunos más de habla hispana. Llevamos cinco días dando vueltas por el mar y encerrados en una habitación muy pequeña", detalló el exmediocampista de 42 años.

Roy González, quien además se desempeñó en nuestra provincia en La Florida, Deportivo Aguilares y Cruz Alta y que se radicó aquí tras su retiro, abordó el crucero junto a su esposa y sus hijas de 11 y 15 años. Justamente para celebrar los 15 de su hija mayor es que emprendieron el viaje final. El 9 de marzo embarcaron en las playas dominicanas de Bayahíbe, donde hubo inconvenientes por el registro de un caso positivo en uno de sus hoteles.

Aníbal Roy González en el banco de suplentes. Foto: Fulbolero.

"A todas las personas que estaban hospedadas en ese lugar, las mandaron de vuelta a casa y a los que permanecíamos en otros hoteles nos revisaron de a uno hasta dejarnos subir", relató, y precisó que los primeros días a bordo trascurrieron con normalidad: la parada inicial fue en Isla Catalina, la segunda en Islas Vírgenes pero la tercera en Saint Maarten no se pudo concretar por decisión de las autoridades locales.

"No sabíamos bien por qué y empezó la incertidumbre. El barco cerró la pileta, los bares y casi todos los espacios comunes. Sólo quedó abierto un restaurante", afirmó, y señaló que mientras ello ocurría,  la tripulación del Costa Favolosa ordenó a los pasajeros que se trasladaran a la parte delantera y un helicóptero aterrizó en el sector opuesto para llevarse a dos personas.

"Supuestamente decían que era por un ataque cardíaco pero todos sospechamos que no. Se llevaron a dos y al día siguiente hubo un tercero al que también vinieron a buscar en helicóptero. Extraoficialmente se comenta que son cerca de cien tripulantes contagiados. Cada vez se ve menos personal de la empresa", alertó el jugador formado en la cantera de Vélez.

Tras cinco días esperando y varados en el mar, Roy González vive junto a su familia "una situación de encierro muy difícil" porque los empleados de Costa Cruceros "piden que todos permanezcan la mayor parte del tiempo en los camarotes, que son muy chiquitos".

"Solo salimos para comer en el único restaurante que quedó abierto y algunos, por miedo, ni eso. Nos sentamos mesa por medio para estar bien separados y el horario de la comida es muy corto", remarcó.  "Solo queremos llegar a Argentina, ponernos en cuarentena y esperar que ninguno tenga síntomas", sentenció el exjugador Decano que busca regresar cuanto antes al país. "Hace años que estamos radicados en Tucumán pero somos de Buenos Aires y tenemos familia ahí. De alguna manera nos vamos a arreglar", concluyó.