Falló una pieza y tiró toda la estantería

El planteo que puso en cancha esta noche Pablo Lavallén, funcionó casi a la perfección. Atlético presentó una formación atípica a lo que venía mostrando y la idea de juego, en la altura ante Jorge Wilstermann, parecía que iba a dar el resultado deseado, pero falló una pieza y tiró toda la estantería

El lateral derecho de la defensa del Decano viene siendo un dolor de cabeza, y es algo que ya se hizo frecuente. Mauricio Rosales, que hoy jugó como central, jamás le encontró la vuelta a su posición natural y no pudo ganarse el puesto. Sin proyección de ataque y flojo en la marca, el ex Estudiantes no demostró, aún, nada de los pergaminos con los que llegó a Tucumán.

Lo de Leonel Di Plácido deja un sabor agridulce. Las proyecciones constantes y los centros que hace caer en el área rival hicieron que rápidamente se olvide a Nicolás Romat. Pero el ex All Boys viene presentando fallas constantes a la hora de marcar y ya le costaron a Atlético cuatro goles en contra en los últimos tres partidos que jugó. Hoy no fue la excepción. Desde su sector llegaron los centros que hoy terminaron en tantos de Jorge Wilstermann y nada se hizo para impedirlo.

Atlético mostró una cara diferente en Bolivia, pero sigue sin aparecer el juego que tuvo contra El Nacional, Junior o Palmeiras. Hoy se paró inteligentemente, anulando por completo los disparos de fuera del área a los que se ven constantemente en la altura y aprovechando los espacios que dejaba el rival, pero faltó la puntada final y lo terminó pagando caro.

Ahora será el turno de cambiar la cara y ver como se le gana a un San Lorenzo que se encuentra peleando el torneo y buscará acortarle diferencia a Boca.