Juicio por violación: la defensa de Alperovich juega sus últimas cartas antes de la sentencia
Alegato final de Augusto Garrido, abogado defensor del exgobernador de Tucumán, que podría ser declarado culpable o inocente de los cargos que se le imputan.

(Foto: Amadeo Rigantti/Clarín)
El exgobernador de Tucumán, José Alperovich, desde el pasado lunes tiene custodia policial y deberá seguir así hasta que se conozca el veredicto del juicio, donde está acusado de haber abusado al menos diez veces, la mayoría con acceso carnal, de su exsecretaria privada y sobrina segunda. Hoy tiene lugar el alegato final de su defensa y hoy podría conocerse la resolución del Tribunal: el exgobernador podría hoy ser declarado culpable o inocente.
El fiscal Sandro Abraldes pidió que le impongan una pena de 16 años y medio de cárcel y solicitó que hasta que se dé a conocer el fallo, Alperovich permanezca con vigilancia policial. La víctima, que es querellante, mediante sus abogados pidió que se le imponga una pena de 22 años de prisión.
Para prever que el exgobernador y exsenador nacional se fugue antes del fallo, el juez Juan Ramos Padilla dispuso que lo vigile y acompañe en todo momento personal de la Policía de la Ciudad. Rechazó el pedido del fiscal de colocarle una tobillera electrónica.
Augusto Garrido, abogado defensor de Alperovich, en su alegato final planteó que "la denunciante usó en un 70 por ciento de las mismas palabras en su testimonio que las usadas en la denuncia. Podría tratarse de un relato aprendido y estudiado, sin errores".
Luego, el abogado del estudio de Mariano Cúneo Libarona afirmó que la denunciante "no pudo responder coherentemente las preguntas, lo cual a mi modo de ver significa una absoluta falta de consistencia en el relato".
En otro tramo de su alocución, aseveró: "No se explica, aún con perspectiva de género, por qué ante la posibilidad de quedarse en el lugar donde había sido atacada, no reservó un hotel o no regresó a Tucumán esa misma noche".
Según la defensa, es imposible que Alperovich haya llevado a cabo los ataques por varios puntos: el primero, porque él no es capaz de concretar esos actos, el segundo es que él jamás estaba solo con la denunciante y el tercero por la relación familiar y de trabajo que los unía. “Es increíble que yo tenga que aportar pruebas para verificar algo que no hice”, se quejó la semana pasada el ex gobernador.
Este miércoles se definiría la fecha del veredicto, que podría darse la semana próxima. En esa instancia, el magistrado Ramos Padilla debe resolver no solo el futuro procesal de Alperovich, sino también condenar o sobreseer a tres colaboradores que fueron acusados por falso testimonio.
Por la gravedad de los hechos que se le imputan, los abogados pretenden que vaya preso hasta tanto la sentencia quede firme, ya que anticipan que la defensa apelará cualquier fallo que emita el juez, salvo que dicte su sobreseimiento.
Al final de la jornada de alegatos finales, el presidente del Tribunal podría concederle a Alperovich la posibilidad de dar sus últimas palabras antes de tomar una decisión. Tras el veredicto, los fundamentos de la decisión del juez se darán a conocer a principios de julio.