"Tucumano", "sudaca": la derecha de España usa el gentilicio provincial como insulto
A fines de mayo, una nueva derrota ante Pedro Sánchez alteró a legisladores de la extrema derecha de Vox –aliados de Javier Milei–quienes, en el Congreso, usaron como insulto "tucumano".
Manuel M.Zabala y Pedro F.Hernández, los diputados de Vox que vociferaron "tucumano" como insulto. Foto Captura de video.-
El debate parlamentario que en España, dio una nueva victoria de Pedro Sánchez por sobre la derecha que en conjunto forman el Partido Popular y Vox, dejó una escena de violencia e insultos que –tangencialmente– rozó a la Argentina.
Diputados que responden a Santiago Abascal –anfitrión de Javier Milei en mayo último– utilizaron el gentilicio “tucumano” como insulto dirigido hacia Gerardo Pisarello. Este diputado de 53 años es, obviamente, tucumano, pero ese no fue el único insulto que recibido parte de dos integrantes de los aliados políticos de Javier Milei, Manuel Mariscal Zabala y Pedro Fernández Hernández. A “tucumano” le sumaron el más usado por los españoles resentidos, “sudaca” ; y, según detalló el sitio ibérico La Sexta, la agresión incluyó nueve términos más.
Para Gerardo Pisarello, las descalificaciones de la derecha española no comenzaron con los insultos de los aliados españoles de La Libertad Avanza que, cabe recordar, fueron agasajados en el marco de la asunción de Milei con un cóctel que la Fundación Libertad dio a integrantes de Vox y del Partido Popular.
Pisarello, quien llegó a España en 1995, es abogado y profesor titular de Derecho Constitucional, Universidad de Barcelona. Pero se hizo como conocido como vicealcalde de Barcelona de 2015 a 2019, y tuvo como “jefa” a Ada Colau. Esta catalana se hizo famosa porque como ciudadana sin filiación partidaria, lideró el movimiento que evitaba que expulsaran de sus viviendas a los españoles que no podían pagar los créditos hipotecarios cuando, en 2012, explotó en España la “burbuja inmobiliaria” creada por el mundo bancario y financiero.
Además, en Argentina y de la peor manera, Gerardo Pisarello aprendió las consecuencias de la violencia que promueven personajes que no creen en la democracia como sistema gobierno. En julio de 1976, cuando él tenía cinco años, secuestraron y asesinaron a su padre Ángel Pisarello quien fue senador, embajador, y presidente de la UCR en Tucumán –cuando los radicales no daban escozor como ahora–; además era abogado de presos políticos.
Ya en democracia, Gerardo Pisarello fue de los que celebró, el juicio por lesa humanidad y la posterior condena al general Antonio Domingo Bussi, quien estuvo a cargo el operativo del comando militar que secuestro y asesinó a su padre. Casualmente, Ricardo Bussi –hijo del militar condenado– el aliado político de Javier Milei, en Tucumán. (Perfil.-)
