Dengue: alternativas naturales y caseras frente al aumento del precio de los repelentes de mosquitos

En medio de la creciente preocupación por el dengue y la subida de precios de los repelentes comerciales, expertos y estudios recientes destacan la eficacia de alternativas naturales para la prevención de las picaduras de mosquitos.

Aunque la mayoría de las personas infectadas por el virus del dengue no presentan síntomas, aquellos que sí los desarrollan experimentan fiebre alta, dolor de cabeza y corporal, náuseas y erupciones cutáneas. La enfermedad puede agravarse y, en casos extremos, ser fatal. La prevención de picaduras es crucial, especialmente durante el día, y la eliminación de criaderos de mosquitos es una medida primordial recomendada por el Ministerio de Salud.

La Dra. Raquel Gleiser, de la Universidad Nacional de Córdoba y el Conicet, señala que ciertos aceites esenciales poseen propiedades repelentes. Entre ellos, los aceites de pachana, romero, cedrón y eucalipto destacan por su eficacia, incluso en diluciones significativas.

Aceite de eucalipto y limón: reconocido desde los años 40, el aceite de eucalipto de limón ha sido aprobado por los CDC de EE. UU. como un repelente efectivo. Un estudio australiano confirmó que una mezcla con un 32% de este aceite proporciona más del 95% de protección durante tres horas. Se puede preparar fácilmente en casa con aceite de girasol o hamamelis.

Lavanda: la lavanda no solo repele a los mosquitos con su fragancia y aceite, sino que también ofrece propiedades analgésicas, antifúngicas y antisépticas. Cultivar lavanda y aplicar el aceite en áreas propensas a picaduras es una práctica efectiva y reconfortante.

Aceite de canela: conocida por su uso culinario, esconde propiedades repelentes en su aceite. La Sociedad Estadounidense de Química resalta su potencial para repeler y eliminar mosquitos, tanto en fase de huevo como adultos. La preparación es sencilla: hervir agua con canela y mezclarla con aceite para bebés, creando un repelente casero y efectivo.

Aceite de tomillo: según estudios, ofrece una protección del 91% contra los mosquitos de la malaria. Una infusión casera requiere solo unas gotas mezcladas con un aceite base, como el de oliva o jojoba, para crear una barrera protectora sobre la piel.

Clavos de olor: el aceite de clavo, con eugenol como ingrediente activo, ha demostrado ser un repelente duradero, protegiendo de las picaduras de mosquitos durante más de 90 minutos cuando se utiliza en una loción al 10%.

Citronela: el equipo del Instituto de Biotecnología Farmacéutica y Alimentaria (INBIOFAL), vinculado al Conicet y la Universidad Nacional de Tucumán, se asoció con la comunidad educativa de la Escuela Secundaria de Amberes para enfrentar este desafío en común. Juntos, han desarrollado un innovador repelente de mosquitos, seguro para todas las edades, que ofrece hasta tres horas de protección. Este producto, fruto de la investigación y el trabajo conjunto, se basa en las propiedades naturales de la citronela (Pelargonium graveolens) y el Lemon Grass (Cymbopogon citratus), plantas conocidas por su eficacia repelente.