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Los nueve hechos de abuso sexual que llevan a juicio a José Alperovich

ESCÁNDALO NACIONAL

Este lunes, el tres veces gobernador de Tucumán comenzará a ser juzgado en Buenos Aires por violar a su sobrina segunda, que lo denunció publicamente en noviembre de 2019. El senador Juan Manzur será uno de los testigos del juicio.

José Alperovich en la campaña 2019. (Foto: flickr/jalperovichok)





El juicio contra José Alperovich, ex senador y tres veces gobernador de Tucumán, acusado de abuso sexual por su sobrina y ex empleada, empieza este lunes a las 10.30 en el Tribunal Oral en lo Criminal 29, ubicado en Talcahuano 550. Estará a cargo del juez José María Ramos Padilla, será a puertas cerradas y se espera la declaración de más de ochenta testigos, entre los que se encuentra el senador Juan Manzur, que por sus fueros podrá declarar por escrito.

Alperovich debe responder por tres casos de abuso sexual, dos de ellos en grado de tentativa, y seis casos de violencia sexual agravada por acceso carnal, de acuerdo con lo establecido por la investigación judicial en base a las denuncias por los ataques ocurridos entre 2017 y 2018, en la Ciudad de Buenos Aires y en la provincia de Tucumán.

En septiembre de 2023, el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 35 de la Ciudad de Buenos Aires elevó a juicio oral la causa contra el ex gobernador de Tucumán y estableció el 5 de febrero como fecha de inicio del debate.

El expediente se inició cuando la joven denunció los hechos a fines de 2019, mientras se desempeñaba como asistente de Alperovich en el Senado, de donde el tucumano fue apartado. Tomó licencias y tiempo después fue suspendido.

La denunciante indicó que los abusos y ataques se produjeron en Tucumán y en un departamento de Puerto Madero.

En la investigación intervinieron la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 10 de la Capital Federal, interinamente a cargo del fiscal Santiago Vismara, y la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM), que dirige Mariela Labozzetta.

En mayo de 2022, la fiscalía había considerado que "en todos los casos, mediando para su comisión intimidación", el ex senador "abusó de una relación de dependencia, de poder y de autoridad".

"Quedó comprobado cómo el imputado utilizando su fuerza física, ejerciendo abuso intimidatorio de poder y violencia de género, reducía bajo su dominio a la víctima, y la ponía como un mero objeto de satisfacción sexual, de cosificación, sometiéndola de forma violenta, ultrajante y degradante, haciéndolo por el transcurso de un poco más de tres meses", señaló la acusación fiscal reproducida por Clarín.

En tanto, días después el juez Osvaldo Rappa procesó a Alperovich por los delitos denunciados y consideró que se cometieron "mediando abuso de poder y autoridad".

Rappa remarcó en su procesamiento que la víctima sufrió un "sometimiento sexual ultrajante".

"Basta decir simplemente que la persona para la cual trabajaba no se trataba de un desconocido para la víctima, sino una persona pública con poder político que ostentaba en la provincia de Tucumán luego de haber sido gobernador durante tres periodos consecutivos e integrante de su familia, aunque fuese lejano", agregó el juez.

En su indagatoria ante el magistrado, Alperovich negó haber abusado de su sobrina y no aceptó preguntas, según fuentes judiciales.

En principio, la causa se tramitó en dos jurisdicciones: en el fuero criminal y correccional de la Ciudad de Buenos Aires y en la justicia tucumana. Pero tras una resolución de la Corte Suprema de Justicia de la Nación de mayo del año pasado, se resolvió que todos los hechos debían investigarse en Capital Federal, de acuerdo con lo planteado en su dictamen por el procurador General interino, Eduardo Casal.

De este modo, el juez Rappa continuó investigando con el aporte de los fiscales Santiago Vismaray Mariela Labozzetta a cargo de la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres.


Los nueve hechos de abuso por los que acusan a Alperovich

En un extenso escrito (419 páginas), el juez Osvaldo Rappa, al frente del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 35, se explayó sobre "la perspectiva de género", habló de "violencia sexual, simbólica, emocional, física". Y decretó el procesamiento de Alperovich "por 'considerarlo 'prima facie' autor penalmente responsable del delito de abuso sexual simple reiterado en tres oportunidades, dos en grado de tentativa, en concurso real con abuso sexual agravado por seis hechos, mediando abuso de poder y autoridad; todo lo cual por sus circunstancias, y tiempo de duración le ocasionaron a la víctima un sometimiento sexual ultrajante".

A Alperovich se lo procesó por haber abusado de su sobrina, y entonces también su secretaria privada en nueve oportunidades.

Las dos primera veces fueron en diciembre de 2017 por la noche, en uno de los departamentos que tiene Alperovich en Puerto Madero. Allí el entonces senador intentó forzarla de varias maneras, tocándola, abusándola.

Luego la sobrina denunció que la abusó en tres oportunidades distintas en febrero de 2018 en el auto de él. Entonces vinieron las violaciones, en una casa de Tucumán, en marzo.

Después siguió tocándola, molestándola, abusándola y amenazándola: “Hace tal cosa sino ya sabes lo que te va a pasar”. Finalmente ella se animó a renunciar el 19 de mayo de ese año, y le dijo que era por todos los abusos sufridos.

Las pericias psicológicas realizadas a la víctima confirmaron las secuelas traumáticas y el daño psíquico producto de situaciones de violencia relacionadas con lo sexual.

En la causa, la sobrina de Alperovich pudo contar la presión psicológica que sentía por parte de él, que sentía que nadie nunca la iba a salvar, y que eso era paralizante, como saber que él tenía sus custodias fuera de la puerta, que eran muchos hombres, que estaban todo el tiempo y que estaban armados protegiéndolo a él.

También pudo decir que en terapia recién vio las distintas formas en que él la violó. Que el avasallamiento había sido tal, que lo vivió como una expropiación, como que ella no era dueña de su cuerpo. Tuvo un gran deterioro de su cuerpo, depresión, ataques de pánico, angustia y ansiedad, pérdida del pelo, uñas debilitadas, falta de apetito; bajo más de 10 kilos, tuvo temblores, sentía falta de aire, que había perdido el sentido de su vida.