Avanza el plan de acción para cuidar el arbolado urbano y la seguridad en la Capital

El arbolado urbano es un elemento fundamental para la calidad de vida de los habitantes de una ciudad. Los árboles brindan beneficios ambientales, estéticos, sociales y económicos, como mejorar el aire, regular la temperatura, embellecer el paisaje, generar espacios de recreación y aumentar el valor de las propiedades.

Sin embargo, el arbolado urbano también implica desafíos y responsabilidades, como mantenerlo en buen estado, evitar que se convierta en un riesgo para la seguridad pública y preservar la biodiversidad.

Para afrontar estos desafíos, la Municipalidad de San Miguel de Tucumán lleva adelante un plan integral para cuidar el arbolado urbano y prevenir accidentes. Se trata de un minucioso relevamiento de los ejemplares que se encuentran en las plazas, parques y veredas de la ciudad, para identificar los que presentan riesgos de caída y realizar las intervenciones necesarias.

El operativo está a cargo de la Dirección de Arbolado municipal, que cuenta con la colaboración de estudiantes de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), que realizan una pasantía en el marco de un convenio con el municipio. El director, Guillermo Olivera, explicó que el relevamiento consiste en evaluar el estado fitosanitario y estructural de los árboles, para determinar si requieren poda parcial o extracción total, según el caso. “Estamos trabajando en el parque Avellaneda, que fue dividido en siete sectores. Ya se avanzó en más de la mitad del relevamiento y encontramos árboles que están en condiciones de ser podados y también hay otros que requieren su extracción. También comenzamos a trabajar en el parque 9 de Julio, en el sector de los bares y en el Lago San Miguel”, detalló.

Olivera informó que el relevamiento ya se completó en las principales plazas de la zona céntrica, como San Martín, Belgrano, Los Decididos, Yrigoyen, Alberdi y Urquiza. Luego, los trabajos se extenderán al Parque Guillermina y a las plazas de distintos barrios de la ciudad. “Se está buscando si hay árboles que corran riesgo de caer y que puedan ocasionar daños a personas o vehículos, para realizar las podas correspondientes de las ramas o, si es necesario, retirar el ejemplar”, explicó.

El funcionario admitió que en el parque Avellaneda hay árboles que deberán ser retirados porque implican un riesgo para los vecinos. “Se viene la época de lluvias y no queremos que sucedan hechos como el que se registró meses atrás, cuando un eucaliptus cayó sobre una niña”, remarcó y recordó que “los árboles son seres vivos que nacen, se reproducen y mueren, que cumplen un ciclo de vida y al final comienzan a caerse, por lo que es necesario realizar un trabajo preventivo”.

Asimismo, señaló que en la ciudad hay una cantidad considerable de ejemplares de eucaliptus, variedad que no es adecuada para el arbolado urbano ya que las ramas comienzan a caerse y eso implica un riesgo para las personas. “Hay muchos árboles mal plantados, en lugares que no son correctos, por su gran tamaño. Lo que se está haciendo con este relevamiento es ver en qué ejemplares es necesario realizar una poda y eventualmente una extracción de los árboles mal plantados”, recalcó.

Olivera dijo que los vecinos pueden obtener información y asesoramiento sobre el tema en la Dirección de Arbolado, que funciona en el mismo inmueble de la Dirección de Espacios Verdes, en el Parque 9 de Julio. “Ahí podemos asesorar a los vecinos sobre qué especies arbóreas pueden plantar en sus viviendas o en sus veredas”, completó.