Internas aseguradas y enigmas por resolver: las PASO 2023 cada vez más cerca

Aún cuando faltan elecciones importantes en las provincias, como la de Tucumán del 11 de junio (con mayor importancia luego de la "mojada de oreja" del Poder Judicial hacia el Frente de Todos al suspender los comicios planificados para el 14 de mayo), el escenario político nacional ya piensa en las Primarias Abiertas Simultáneas Obligatorias (PASO) del 13 de agosto próximo. Allí, como desde hace 11 años, se definirán los candidatos de cada espacio y, de paso, se establecerá una gran encuesta previa a las generales. La debilidad del gobierno nacional luego de las elecciones intermedias de 2021, la falta de entusiasmo que genera la figura de un presidente en retirada y el temprano frenesí de la oposición con aquellos resultados, son elementos que dan la sensación de que estamos en campaña electoral hace ya un largo rato. Pero ya entrados en junio, es momento de verdaderas definiciones, y el calendario electoral oficializado por el gobierno marca que el 24 de junio a la noche es el límite para presentar las fórmulas que competirán en las PASO. Incluso haciendo las paradas obligadas en los episodios electorales en las provincias, que pueden mover el tablero electoral de acuerdo sorpresas o definiciones previsibles, los jugadores ya están posicionándose en la cancha.

A diferencia de 2019, cuando ninguna lista fue a internas y solo se disputó quiénes pasaban el umbral del 1,5% para estar en las definitivas de octubre, esta vez se esperan batallas importantes en los principales espacios. Aún con algunas señales que parecen definitivas, el oficialismo navega en un mar de dudas. Bajado Alberto Fernández del sueño reeleccionista, fuera del escenario Cristina Fernández de Kirchner (proscripta, según su argumentación), no hay nadie que parezca en condiciones de encolumnar al peronismo en una sola lista. La debilidad de Sergio Massa, dada su mala gestión al frente del Ministerio de Economía, también lo saca de un posible centralismo. En ese escenario, son varios los que se anotaron. Al parecer no hace falta más que tener ganas para ser precandidato por el Frente de Todos (FDT). El primero en lanzarse fue el dirigente social Juan Grabois. Con spots difundidos en sus redes sociales en torno a la vivienda y a la seguridad, asegura que competirá en la interna y llegó a decir que "ni en pedo" votaría a Massa, a quien acusó de "sinvergüenza, vende patria y cagador". También está en carrera el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli. Con experiencia en gestión, ya que fue vicepresidente de Néstor Kirchner y dos veces gobernador de la provincia de Buenos Aires, le juega en contra su experiencia como candidato derrotado en 2015 por Mauricio Macri. Ausente en el acto del 25 de Mayo en el que habló la vicepresidenta, se lo posiciona como el delfín de Alberto Fernández (algo que probablemente le reste posibilidades en una competencia). Otro funcionario que ha lanzado su precandidatura presidencial es Agustín Rossi, jefe de Gabiente de la Nación, reemplazante de Juan Manzur en esa función. ¿Qué pasa con el ala kirchnerista? Hace tiempo se espera que la vicepresidenta bendiga un candidato. Incluso se especuló con que sea el propio Massa, a quien le ha dedicado elogios a pesar de que su gestión no dista demasiado de la de Martín Guzmán. Los malos índices económicos tiran a la baja las acciones del líder del Frente Renovador y hacen crecer las de Eduardo "Wado" de Pedro, ministro del Interior y del círculo de confianza de Cristina. Lanzado luego del multitudinario acto del 25 de Mayo a través de un spot en sus redes, no queda claro si será candidato a presidente o acompañará a alguien en esa empresa.

Por el lado de Juntos por el Cambio (JxC), hay una interna fuerte que no parece tranquilizarse. Con el triunfo en noviembre de 2021, muchos vieron la oportunidad para lanzarse por el premio mayor, sometiéndose a un desgaste de una campaña muy larga. En ese trajín, han quedado dos oponentes del principal partido del armado opositor, el PRO. Los Halcones, liderados por Patricia Bullrich, y Las Palomas, de Horacio Rodríguez Larreta. En esa disputa parece estar el nudo de la interna de JxC. Es cierto que existen otros precandidatos de otros espacios, como Gerardo Morales, Facundo Manes (ambos de la Unión Cívica Radical), Elisa Carrió (Coalición Cívica), Miguel Ángel Pichetto ("peronismo republicano", como se hace llamar su espacio) y en las últimas horas José Luis Espert (liberal de derecha, exaliado de Javier Milei), pero todo parece indicar que varios se bajarán para apoyar a uno u otro de los principales contendientes (por ejemplo, Morales podría acompañar a Larreta como vice).

La Libertad Avanza, cuya construcción en torno a una figura mesiánica, la de Milei, disipa cualquier posibilidad de una disputa interna, tendrá lista única; por el llamado "peronismo federal" está lanzado Juan Schiaretti, acompañado por Juan Manuel Urtubey, Florencio Randazzo y Alberto Rodríguez Saá, entre otros, pero que negocia la posibilidad de un "frente de frentes" con JxC.

El otro espacio nacional que competirá en las PASO es el Frente de Izquierda-Unidad. Será la segunda vez que vayan a unas PASO, ya que en 2015 Nicolás del Caño le había ganado a Jorge Altamira. En esta ocasión, los contendientes serán, por un lado, Myriam Bregman y Nicolás del Caño, la fórmula que nuclea al Partidos de los Trabajadores Socialistas (PTS) y a Izquierda Socialista (IS), y, por el otro, Gabriel Solano y Vilma Ripoll, como fruto del acuerdo entre el Partido Obrero (hasta acá, los tres partidos fundadores del FIT) y el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST, sumado al FIT en 2019).

Existen otros espacios que pelearán por superar el piso del 1,5%, como el que encabeza Guillermo Moreno, por fuera del FDT; el Nuevo MAS, encabezado por Manuela Castañeira; y Política Obrera, escisión del Partido Obrero cuyo candidato es Marcelo Ramal. Es decir, habrá 10 candidatos en las PASO, que pueden llegar a ser 15, de acuerdo a las uniones y las rupturas propias de un escenario volátil como el argentino.

Breve historia de las PASO en Argentina

Las PASO fueron establecidas en 2010 por el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. El sistema debutó en 2011 con hechos inéditos hasta ese momento, como ser la elección abierta hacia la sociedad de los candidatos de los distintos partidos y frentes políticos, o la distribución equitativa de los espacios publicitarios en los medios masivos de comunicación. En aquellas primeras PASO, no hubo competiciones internas y siete de los diez candidatos (la propia Cristina Fernández, Raúl Alfonsín, Eduardo Duhalde, Hermes Binner, Alberto Rodríguez Saá, Elisa Carrió y Jorge Altamira) lograron pasar a las generales de octubre (Alcira Argumedo, Sergio Pastore y José Bonacci quedaron en el camino).

En 2015 se utilizaron para definir disputas internas y hubo en total 15 precandidatos. Mauricio Macri le ganó a Ernesto Sanz y Elisa Carrió en Cambiemos; Sergio Massa a Juan Manuel de la Sota en Unidos por una Nueva Alternativa; y Nicolás del Caño a Jorge Altamira en el FIT; junto a Daniel Scioli, del Frente Para la Victoria, Margarita Stolbizer, de Progresistas y Adolfo Rodríguez Saá, de Compromiso Federal, compitieron en las definitivas de octubre. No superaron el piso Víctor de Gennaro (Frente Popular), Manuela Castañeira (Nuevo MAS), Alejandro Bodart (MST), Mauricio Yattah (Partido Popular) y Raúl Albarracín (Movimiento de Acción Vecinal).

En una suerte de péndulo, en 2019 se vivió una situación similar a la de 2011, ya que no hubo ninguna lista con una competencia interna. Fue así que Alberto Fernández (FDT), Mauricio Macri (JxC), Roberto Lavagna (Consenso Federal), Nicolás del Caño (FIT), Juan José Gómez Centurión (Frente NOS) y José Luis Espert (Unite por la Libertad y la Dignidad) superaron las PASO y estuvieron en las definitivas, mientras que no consiguieron ese objetivo Manuela Castañeira, Alejandro Biondini, Raúl Albarracín y José Antonio Romero Feris.