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Dengue mortal: Tucumán suma otra nueva joven víctima fatal por la enfermedad

sociedad

Se tata de Josefina Contreras. "Le tomaron la presión y le pusieron dos sueros, uno en cada brazo. De ahí, la mandaron a la casa", relató su hermana. Conmoción en la familia y enojo en los vecinos del hospital de San Pablo.

Dengue en Tucumán.





Luego del fallecimiento de una joven de 17 años el viernes, Tucumán suma una nueva víctima fatal por dengue: se trata de Josefina Contreras de 17 años, quien comenzó con síntomas el pasado jueves, fue al hospital el sábado por la noche y tuvo un paro cardiorespiratorio el domingo por la madrugada.Es la quinta víctima fatal de la enfermedad.

Causada por el mosquito Aedes Agypti, el dengue está castigando a varias localidades de la provincia. Todos tenemos un conocido que se ha contagiado de dengue. La cifra supera ampliamente los 6500 casos y el de la joven Josefina Contreras es el segundo deceso en menos de 48 horas. El otro se produjo en Lules en la tarde del viernes y su víctima también era una joven estudiante de 17 años. 

“Le tomaron la presión y le pusieron dos sueros, uno en cada brazo. De ahí, la mandaron a la casa”, relató María José, hermana de Josefina, consignó La Gaceta. Josefina había empezado con fiebre, dolores musculares y de estómago el pasado jueves, el sábado lo síntomas se agravaron y acudieron al hospital de San Pablo.  

"Me decía que sentía que se moría, que le faltaba mucho el aire. Tenía ganas de vomitar y no podía, estaba sedienta", detalló María José, hermana de Josefina. 

La quinta víctima fatal por dengue en Tucumán no tenía ninguna enfermedad de base: "Era una chica muy sana. Se dedicaba al estudio. Bailaba folclore, competía en folclore. Nunca le pasó nada", expresó Miguel Contreras el padre de Josefina. Egresada a fines del año pasado, de la escuela San Pablo Norte, la joven se encontraba estudiando para ingresar a la Escuela Naval. “Ese era su sueño”, afirmó Miguel.

El padre de Josefina fue duro contra el Hospital de San Pablo: "Cuando me dijeron que le habían puesto suero, dije que no le tenían que poner nada. Me habían dicho que solo podía tomar paracetamol”, dijo Miguel, que sentenció: “para mí, en el hospital San Pablo me la mataron a mi hija”.

Los vecinos de San Pablo hicieron saber su enojo: "El hospital está colapsado. No fumigaron por la zona, nadie hace nada. Es un desastre esto”, sentenció una amiga de la familia Contreras. Conmoción en Tucumán.