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El drama del campo tucumano: "No recuerdo una sequía tan aguda como esta"

FM LATUCUMANA 95.9

Roberto Palomo, vicepresidente de APRONOR, afirmó que la situación en el campo tucumano es catastrófica. El productor aseguró que las condiciones provocarán aumento de precios y afectará a toda la economía en general. La dificultad de acceder a los sistemas de riego.

Imagen ilustrativa.-





El pasado viernes, la Asociación Civil de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (APRONOR) afirmaron, tras un relevamiento, que la mitad de los cultivos de granos en Tucumán se perdió por la sequía que afecta a la provincia,  mientras que el 50% corre grave riesgo del mismo destino si no se toman medidas urgentes. 

Este martes, Roberto Palomo, vicepresidente de APRONOR, habló en FM latucumana 95.9, donde dio detalles de la crítica situación que atraviesa la agricultura tucumana ante la falta de lluvias. “Lamentablemente es una película que va transcurriendo y uno saca una foto y la evaluación que hicimos el pasado viernes se amplía en cuanto a las pérdidas. No tuvimos lluvias y las temperaturas fueron de 36ºC, 37ºC, más hacia el este y esto terminó de agravar el estado de los cultivos”, explicó a Oscar Mazza

“Hoy ya hay muchísimos lotes que no se van a cosechar y que los productores lo dieron de baja y lo que está quedando para salvar, con los pronósticos de lluvia para hoy y mañana, ya es muy poco”, agregó.

Sobre las cifras del relevamiento llevado a cabo, Palomo aseguró que desde la entidad creen que la pérdida supera ampliamente el 50%, alcanzando el 70%. “La situación es catastrófica. Hice agricultura toda la vida, tengo 50 años y desde que tengo memoria, cuando andaba con mi papá en el campo, no recuerdo una sequía tan aguda como esta”, aseguró.

Al ser consultado sobre los sistemas de riego, el productor tucumano señaló que no es rentable ante los elevados costos de la energía para ponerla en funcionamiento. “Se necesita gasoil para mover los equipos de riego, para poder extraer el agua del subsuelo. Si no tuviésemos tanta presión impositiva del estado, se podría pensar en esto”, indicó y trató de describir las dificultades: “Nuestra ganancia es exigua, sobre todo por los derechos de exportación. La soja es el 33%, el trigo y el maíz es el 12%, ahí se lleva una buena parte el Estado, sumando a esto cualquier otro tipo de impuesto de otros actores de la economía”. “Ahora se suma el diferencial arancelario, uno recibe un dólar divisa y lamentablemente ustedes saben que lo importado tiene un dólar mucho mayor. Para traerlo hay que ir al contado con liqui. Estamos con un costo muy alto y es por eso que uno no tiene rentabilidad para incorporar el riego u otras tecnologías”, reiteró.

En ese sentido, haciendo referencia a cómo prevén el 2023, el vicepresidente de APRONOR, dijo que “el productor se encuentra con un problema financiero porque uno financia toda la campaña, con compromisos de la cosecha, ya sea a través de cheque que uno da a fecha o a través de tarjetas rurales, diversos tipo de financiación y ahora tenemos que cumplir los compromisos sin tener ingresos”. “Ahí va haber una descapitalización por parte del productor”, aclaró. 

“También será el impacto que va haber hacia los costados, como los que prestan servicio de cosecha que no van a tener trabajo, el camionero que hace los fletes y toda la economía se va a resentir sobre todo la de los pueblos del interior donde se vuelca la riqueza que se genera”, especificó.  

Además, Palomo aseguró que a nivel país “habrá escasez de algunos productos”: “La indumentaria va a aumentar porque no va a haber algodón. Santiago del estero y Chaco van a sufrir grandes pérdidas. También en frutas y hortalizas. Están viendo el precio que estamos pagando en las verdulerías; sin duda va haber un aumento. El choclo hay menos producción y tamaño y estamos pagando precios mayores de lo que deberíamos pagar”

“Después está el impacto en la falta de ingresos de dólares. La sequía fue tremenda, la situación es catastrófica: lotes sin sembrar, algunos que sembraron pero que no se cosecharon para alimentar la hacienda. Tendremos seguramente un encarecimiento de la carne”, añadió. 

Haciendo foco en Tucumán, el productor dijo que habrá problemas con la caña de azúcar, y predijo una caída en la producción: “Preparémonos para pagar precios altos en el azúcar porque va a aumentar porque la producción va a caer”. 

“Nosotros lo que hacemos es pedir la Emergencia para nuestro sector. En el relevamiento que hicimos con un técnico de la secretaría de agricultura le mostramos todos los cultivos y el sector cañero también pide la emergencia. Hay una ley de emergencia a nivel provincial y nacional. Lo que uno busca es un certificado de emergencia que le permita decir a quien te ha financiado, al proveedor, que perdí todo mi cultivo y no te puedo pagar. Por un lado para demostrar esta situación en bancos y diferentes instituciones”, detalló. 

Y cerró: “Después lo que hay de beneficios es muy poco. A nivel provincial es postergar el impuesto inmobiliario para los que son propietarios y evitar ejecuciones por parte de Rentas, que no avance este tipo de medida para que no trabe la operatoria al productor. Después no hay mucho más”.