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"No se quiere ir": a quién espera Rodolfo, el perrito que conmueve al Centro de Salud en Tucumán

SOCIEDAD

Quizás lo vieron alguna vez por nuestras calles como el compañero fiel que es. Hace tres semanas, a comienzos de enero, ocurrió un accidente y desde entonces sigue ahí, sentado sobre un sillón azul. La historia detrás de la historia. VIDEO

Rodolfo, el perrito que espera.





Quizás lo vieron. Corría diciembre del año pasado y ahí andaba Rodolfo moviendo la cola detrás de una pareja en situación de calle, una de las tantas que caminan y se pierden por las esquinas de Tucumán.

Tal vez lo vieron. Corría la primera semana de enero cuando Rodolfo, asustado por lo que vio, ladró y después corrió asustado a meterse debajo de un auto: Gabriel Santucho, el dueño de Rodolfo, acababa de ser chocado por una moto con un policía a bordo.

“Gabriel y su ahora ex pareja son personas en situación de calle que, pese a sus problemas personales, adoptaban gatitos y perritos que los acompañaban hasta que veían que alguien quería adoptarlos. A Rodolfo lo tienen hace bastante tiempo. Rodolfo sigue acá”, le cuenta una tallerista voluntaria del Hogar Divino Maestro a eltucumano.

“Acá” es el Centro de Salud, donde Gabriel, a quien todos conocen como El Mono, está internado en el sector 1 cama 18 del área de Traumatología, luego del accidente que lo dejó tirado en la calle con la fractura de una pierna, a la espera de un clavo para la operación.

Cerca de Gabriel, a unos metros, solo está Rodolfo, quien también espera que Gabriel se ponga bien. “Desde que pasó el accidente, Rodolfo entró al Centro de Salud y no se va. No se quiere ir. Se porta bien, toca la puerta para salir a hacer pis o casa, y vuelve. Se sienta en el sillón del acompañante y espera”, agrega la profesora.

Mientras Gabriel espera que llegue la hora de la operación que literalmente le permita ponerse de pie, salir de la calle y emprender su rehabilitación de las adicciones en Rosario o Buenos Aires, Rodolfo lo acompaña y durante estas horas largas del verano tucumano arranca sonrisas al resto de los pacientes y al personal de salud.

“Las chicas le abren la puerta, la gente de la sala se ríe, le dan comida, y ya está más gordito que cuando llegó. Ahora queremos que Gabriel se ponga bien. Sabe que no está solo, sabe que alguien lo acompaña, sabe que alguien lo espera”.


Detrás de la historia de Gabriel y Rodolfo asoma la tarea silenciosa y loable de voluntarias y voluntarios que de lunes a viernes asisten en el Hogar Divino Maestro a los que nada tienen. El Hogar que funciona cerca del Autódromo del Parque 9 de Julio. “Chicos como Gabriel van, meriendan, se bañan, lavan su ropa, les damos jabón, shampoo, y antes de irse se llevan la viandita para cenar a la noche. La mayoría son chicos en situación de calle. Les damos talleres de pintura, cocina y espiritualidad. El Hogar pertenece a la Familia Grande del Hogar de Cristo, asistido por los Curas Villeros”. Hogar Divino Maestro: Lunes a viernes de 16 a 20hs. Av Coronel Suarez 560. 15 voluntarios. Albergue para mujeres: Pje. Camaño 878. Todos los días de 20 a 9hs. Teléfono: 0381-155-520506 (Pame). 


Conocé la historia del Hogar Divino Maestro y sus voluntarios a través de este microdocumental de la TV Pública (A partir de los 15'):