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Atacó a un cadete para robarle, le cortó cuatro dedos y fue condenado a tres años de prisión

Judiciales

"El Negro Juan" había sido detenido luego de que en enero de este año atacara con un machete a Martín Abraham, un joven repartidor que perdió los dedos de su mano. El acusado cumplirá su pena en prisión.

Martín Abraham junto a su madre.-





El pasado 18 de enero, los tucumanos quedaron conmocionados luego de que se conociera la pesadilla que vivió Martín Abraham, un joven cadete de la sanguchería El Turco, que en un intento de robo perdió cuatro dedos de su mano izquierda tras ser atacado por un machete.

Siete meses después, el acusado, identificado como “El Negro Juan”,  fue condenado a tres años de prisión de cumplimiento efectivo. 

La sentencia tuvo lugar el pasado martes durante una audiencia en la que se trató un convenio de juicio abreviado al que arribaron la Unidad Fiscal de Atentados contra las Personas y la defensa del acusado, a quien identificaron como "El Negro Juan", con la conformidad de la víctima.

 El agresor fue imputado por el delito de "lesiones graves en contexto de intento de robo", en perjuicio de Abraham. El convenio fue expuesto por el auxiliar de fiscal Fernando Isa, quien relató el hecho imputado y enumeró las evidencias recogidas, tras lo cual la jueza interviniente resolvió declarar admisible el acuerdo pleno de juicio abreviado y sentenciar al acusado a tres años de prisión efectiva.

El hecho

El joven cadete de 19 años acababa de entregar un pedido de la sanguchería El Turco en barrio Los Pinos, acaso la última de la jornada antes de volver a casa en el barrio Juan Pablo II esa calurosa noche de enero. 

 Eran las 23.30 y se dirigía en su moto por Muñecas en dirección a la avenida Francisco de Aguirre cuando, a la altura de Isabel La Católica, un bulto se movió entre las sombras. En un instante, tenía enfrente a un hombre con machete. Martín sólo atinó a protegerse con su mano izquierda del filo que terminó cercenándole cuatro dedos. Ese acto reflejo le salvó la vida: “Me ha salido de la nada, ha salido directamente a pegarme un machetazo y me ha apuntado a la cabeza con el machete. Yo he metido la mano para cubrirme. Por suerte, no me ha alcanzado a tirar de la moto y así como estaba llegué al hospital Avellaneda”, contó a eltucumano.com al día siguiente del ataque. 

Debido a este y otros hechos de inseguridad registrados en Tucumán, el Gobierno de la provincia inició meses después el proceso de instalación de GPS en las motos de personas que trabajan como cadetes o delivery con fines preventivos.