La elección del ombudsman, el primer round de la interna entre Manzur y Jaldo

'Se picó', cómo dicen los jóvenes hoy en día. La interna del justicialismo tucumano se ha tornado evidente, y el gobernador Juan Manzur y el vicegobernador Osvaldo Jaldo han llegado a un punto de no-entendimiento. Puede que se imponga el diálogo, prime la política, y alcancen un acuerdo diplomático, pero las diferencias son ahora explícitas. En un año electoral, el quiebre entre manzuristas y jaldistas se ha tornado alevoso a la hora de elegir al próximo Defensor del Pueblo de Tucumán, que paradójicamente deberá defender a los tucumanos del propio Estado en muchos casos.

El actual ombudsman, Fernando Said Juri Debo, se postuló para ser ratificado por otros cinco años más en su cargo, con el visto bueno del gobernador Manzur. El legislador Eduardo 'Lalo' Cobos se ha postulado para el cargo con claro respaldo de Jaldo, junto con media centena de candidatos que no tenían chances antes los preferidos del oficialismo. En la reunión conjunta de las Comisiones de Asuntos Constitucionales e Institucionales y de Peticiones y Acuerdos, se resolvió que la terna remitida al parlamento será la que componen el propio Cobos y los contadores Mario Koltan, y María Emilia Saab. Juri Debbo, el preferido de Manzur, fue dejado de lado, pero luego afloró la polémica.

Al momento de votar la terna, el manzurismo y el jaldismo expusieron la primera medición de fuerzas: Eduardo Bourlé, Gerónimo Vargas Aignasse, Zacarías Khoder y Sergio Mansilla votaron a favor de la tríada compuesta por Cobos, Juri Debo y César Ismael Toledo; Javier Morof, Adriana Najar, Raúl Ferrazzano y Daniel Herrera votaron por Cobos, Koltan y Saab. Empate en 4 en el primer mano a mano entre Manzur y Jaldo: desempató el voto del presidente de la comisión, el jaldista Morof.

Los legisladores alineados con Manzur cuestionaron luego la facultad de Morof de desempatar con su voto doble como presidente de Asuntos Constitucionales, y reclaman que Mansilla, vicepresidente a cargo de la presidencia de Peticiones y Acuerdos, también podría haber contado con voto doble. La interna se trasladó rápidamente al diario La Gaceta, donde hubo acusaciones cruzadas entre el manzurista Vargas Aignasse y el jaldista Morof.

"Fuimos a la reunión con total buena fe, y cuando el resultado fue cuatro a cuatro, el presidente de Asuntos Constitucionales expresó que la normativa le daba la posibilidad de definir computándose doblemente su voto. Todos los miembros presentes creímos en su buena fe; jamás pondríamos en duda la palabra del presidente de la comisión más importante de la Cámara", dijo Vargas Aignasse.

"Ellos sabían que perdían de todos modos. Por lo tanto, considero que es una falta de respeto a la propia Legislatura. No pueden ir en contra del acta que ellos mismos firmaron. Hay que saber respetar la democracia, cuando se gana y cuando se pierde", retrucó Morof.

El manzurismo reclama que la terna que integraba Juri Debo también llegue al recinto para su tratamiento dada esta situación que advierten: "Solicitamos a la Presidencia (de la Cámara provincial) que se eleve a la sesión legislativa del 8 de marzo y de manera extraordinaria a las dos ternas mayoritariamente votadas (en la reunión de comisiones)", indicaron Vargas Aignasse, Mansilla, Bourlé y Khoder. Este jueves, el mismo Juri Debo en una entrevista con Radio Rivadavia, adelantó que llevará a la Justicia su reclamo.

Tras conocerse que la terna Cobos, Koltan y Saab llegaría al recinto, dejando de lado a su predilecto Juri Debo, Manzur mantuvo una reunión de urgencia con ministros y secretarios, sus funcionarios más cercanos. Allí se deslizó que se trató de una "traición" de parte de Jaldo, según informaron altas fuentes de Casa de Gobierno.

Un enojado Manzur recordó cómo desde la Legislatura los ministros del Ejecutivo son citados, interpelados y cuestionados: incluso en las últimas semanas legisladores cercanos a Jaldo no han dudado en solicitar la renuncia de los ministros Rossana Chahla o Claudio Maley, por citar algunos ejemplos de las embestidas desde el palacio de avenida Sarmiento y Muñecas contra el de 25 de Mayo y San Martín.

Desde el Ejecutivo provincial advierten que reciben más reproches y cuestionamientos desde el jaldismo que desde la oposición misma. Lo que se llama 'Fuego amigo'. Además, desde Casa de Gobierno reprochan los planteos que llegan desde otras fuerzas con representación en la Cámara contra el Ejecutivo y donde ven siempre 'la mano' de Jaldo detrás. Allí enmarcan las recientes denuncias del radical José María Canelada o incluso del exlegislador macrista Alberto Colombres Garmendia.

Si Jaldo no hace lugar al pedido manzurista de que la terna de Juri Debbo llegue al recinto, los legisladores alineados con Casa de Gobierno no votarán la postulación de Cobos y comenzarían así a marcar la fracción del bloque peronista en el parlamento y de todo el PJ en Tucumán.

En un año electoral, hay dirigentes de fuste que no ven con buenos ojos que se siga recrudeciendo la interna entre manzuristas y jaldistas: consideran prudente esperar las elecciones de término medio para retener o incluso sumar más bancas en el Congreso y luego, sí, ‘jugar’ la interna en la carrera hacia la gobernación en 2023. Nadie sabe mejor que los peronistas que una interna feroz puede dejar a muchos compañeros heridos y con las manos vacías.

La votación del ombudsman sería la primera exposición 'puertas afuera' de la interna entre Manzur y Jaldo. Los 49 legisladores deberán públicamente tomar partido por el candidato que impulsa el vicegobernador u otro candidato como reclaman desde Casa de Gobierno.

Muchos parlamentarios que tienen un pie en cada plato deberán sentar postura y elegir bando delante de sus -¿todavía?- compañeros del Bloque Justicialista de Todos. En total, son 32 los legisladores de la bancada que nuclea a todo el peronismo, a excepción del bancario Eduardo Bourlé, quien se fue para conformar el monobloque Lealtad Peronista.

Eduardo Bourlé, Gerónimo Vargas Aignasse, Zacarías Khoder y Sergio Mansilla ya se han anotado del lado manzurista de la vida.

Javier Morof, Adriana Najar, Raúl Ferrazzano y Daniel Herrera son jaldistas de la primera hora.

Hay 16 opositores: los 8 de Fuerza Republicana, 2 alperovichistas y 6 legisladores entre cambiemitas y alfaristas repartidos en pequeños bloques.

Se necesitan 25 votos para designar al nuevo ombusdman de Tucumán: ni Manzur ni Jaldo contarían con esa cifra de legisladores alineados, por lo que se especula que será clave el rol y posición que tomen los opositores, cuyos postulantes fueron dejados completamente de lado por el oficialismo.

El defensor del pueblo deberá “velar por el buen orden, decoro y regularidad de la Administración Pública, por la dignidad de la función pública y por la respetabilidad de las autoridades administrativas, funcionarios, agentes y de cualquier persona que actúe al servicio de la Administración Pública centralizada, descentralizada y autárquica". Restará esperar a que sea designado y si puede proteger a los propios tucumanos de la interna entre manzuristas y jaldistas.