Top

"Lo primero es dar un paso, y ese paso es el reencuentro"

REGRESO A LAS AULAS

Las clases reinician en Tucumán el 1° de marzo, con presencialidad gradual y escalonada. El ministro Lichtmajer resaltó la inversión en infraestructura y el cumplimiento de los protocolos de cara a un “reencuentro” cargado de emotividad para docentes y alumnos. “Si hay que esperar, esperaremos un poco más” en las escuelas que no estén en condiciones edilicias. Los reclamos de padres y docentes y la importancia de la escuela, más allá de la valiosa experiencia de virtualidad.

Foto: Twitter @jplichtmajer.





A partir del próximo 1 de marzo, los alumnos tucumanos regresarán de forma gradual y escalonada a las aulas mediante un sistema dual que mezclará la modalidad virtual y la presencial después de un año pandémico sin clases en las escuelas. El ministro de Educación de Tucumán, Juan Pablo Lichtmajer, analizó cómo será el regreso en nuestra provincia, un “reencuentro” entre alumnos y docentes en las instituciones educativas, en las que destacó la inversión realizada en infraestructura y mano de obra para su acondicionamiento. “La escuela es el lugar central del tejido social y cultural en una sociedad”, afirmó, y convocó a trabajar “en unidad” para cumplir “un anhelo de todos” como es la presencialidad, después de un año marcado por la virtualidad.

“El protocolo ya ha sido presentado, está trabajado, ha sido previamente dialogado. También le hemos sumado aportes que tienen que ver con las reuniones de las supervisoras que se han reincorporado la semana pasada, las directoras que se incorporan este lunes. Lo primero, y que es muy muy importante, es lo que se llama aprestamiento: esto es la puesta en condiciones de los establecimientos educativos: Allí nosotros podemos comprometer esforzado trabajo, no hay fines de semanas ni feriados, todo el día, todos los días y en toda la provincia se está llegando a una escuela nueva y no se detiene el 1° de marzo, eso continúa. Para eso se ha hecho una inversión extraordinaria, porque ha sido un año extraordinario el que ha pasado y requieren naturalmente los edificios mayor inversión en lo que esperamos que sea un camino continuo en el que también se sume la inversión que va a hacer Nación. Luego, hemos puesto a disposición más gente. Recursos y gente. Ya sea en el modo de conserjes o personal auxiliar o en el modo de las cooperativas que ayudan en la limpieza”, apuntó Lichtmajer en diálogo con eltucumano.com a menos de una semana del regreso a las aulas en nuestra provincia.

La semana pasada, el Ministerio de Educación de Tucumán presentó en sociedad los protocolos y el cronograma de regreso a las clases presenciales y anunció una inversión de $60 millones para trabajos de pintura, soldadura, desmalezado, limpieza de tanques, electricidad, sanitarios, etc. Además, se destinarán $27 millones a la compra de elementos de bioseguridad, y otros $60 millones para la limpieza de los establecimientos. Se estableció que de forma gradual los alumnos del nivel Inicial y Primario regresarán a las aulas desde el lunes 1° de marzo, mientras que el nivel Secundario lo hará desde el lunes 8.

Reconocemos las dificultades, no somos indiferentes ni forzamos ninguna circunstancia. Si hay una escuela que necesite un plazo para poder resolver un tema que le impide el normal funcionamiento vamos a atender ese caso naturalmente y vamos a redoblar el esfuerzo para llegar a esa escuela y hacerlo. Nos parece que no hay que forzar situaciones, pero a la vez puede darse el hecho de que haya un aula que necesite una reparación pero otra no, por eso hemos armado un esquema escalonado de regreso, el cuál quizás permita que se arregle un aula mientras usamos la otra. Este es el momento de ser flexibles, inteligentes, de más que la confrontación buscar las soluciones a los múltiples desafíos que tenemos”, analiza el titular de la cartera educativa, quien remarcó que sobre las remodelaciones edilicias “si en algún caso hay que esperar algún arreglo se lo hará”.

Lichtmajer explica que desde el Ministerio “distribuido en todas las escuelas un "Manual de retorno seguro", que se ha dado a las supervisoras que a la vez han dado a las directoras que se han reincorporado ayer a las escuelas”. “Ahí está especificado cómo es el ingreso, cómo tienen que usarse los espacios, cuántos metros se distancia hay que tener, cómo son los recreos, cómo se usan los espacios comunes como las salas de profesores, cuándo vuelve un docente y cuándo vuelve otro porque como no vuelven todos los chicos juntos tampoco vuelven todos los docentes juntos”, subrayó, y señaló que antes del regreso a las aulas, en el trascurso de esta semana, tendrá lugar “una capacitación virtual que la da el Ministerio de Salud sobre los cuidados y demás, que también es un espacio de encuentro, una jornada institucional para reencontrarnos y plantear también las dudas”.

“Siempre que hemos ido a la escuela, desde que tenemos uso de memoria, el día que volvían las clases volvíamos todos juntos, todos los docentes y alumnos, y hay que ir adaptándose a ciertas cosas que tienen que ver con lo que nos ha tocado vivir, un año realmente maldito el 2020, un año horrible, y que este sea un poco mejor. Un paso para eso es una vuelta de menor a mayor: vamos a empezar con dos días por semana para todos los niveles, es decir que jardín, primaria y secundaria van a tener todos dos días por semana. Para nosotros es importante que la educación debe ser equitativa, esa es la base que nosotros establecemos, que permite que casi 400.000 alumnos puedan tener la posibilidad de volver a lo largo de marzo a tener una experiencia de presencialidad”, aseveró el ministro de Educación tucumano, y aclaró que si “de pronto puede venir una directora y plantear "yo tengo un patio techado en la escuela que me permite hacer grupos más grandes manteniendo la distancia", la vamos a escuchar, porque nadie conoce como las directoras sus escuelas”.

El reencuentro y posibles positivos en las aulas

Más de 400.000 alumnos tucumanos de los tres niveles se preparan para volver a compartir dentro de las instituciones educativas con sus compañeros. Lichtmajer describe las características que tendrá ese esperado momento de reencuentro: “Lo primero es la novedad, y para eso está la formación, la información y la preparación que se va haciendo toda esta semana con los docentes. El primer día de clases después de un año va a ser un momento de encuentro, de sensibilización, un momento de diagnóstico también, de preguntar "¿qué tal? ¿cómo están?", donde se vuelvan a encontrar los chicos. No es que se hace perdido el contacto pero ese contacto presencial en las escuelas ha tenido que ser suplantado por un contacto tecnológico o menos intenso, en el sentido de lo presencial”.

Vamos a ir empezando de a poco en todo sentido, no vamos a empezar el primer día con un ejercicio de álgebra. Primero hay que reencontrarse, eso para la tranquilidad de las familias, de los propios alumnos y los docentes también, es una etapa de ambientación a esta nueva instancia. Los protocolos son algo que está escrito, los que lo hacen realidad son las personas que los practican. Necesitamos mucho, confiamos mucho en el sistema educativo: las supervisoras, las directoras, los docentes para que dentro del ámbito escolar haya un cumplimiento estricto del protocolo. Naturalmente necesitamos mucho de las familias y los propios protagonistas, hay una vida de los alumnos y alumnas fuera de las escuelas”, advirtió.

Por ello, según explicó, el ‘Manual de regreso’ contempla desde “cómo debe ser el ingreso: es por turnos, no todos juntos” hasta la presencia de “uno o más vigías escolares, capacitados por el Ministerio de Salud para velar por el cumplimiento del protocolo y generando estas nuevas prácticas y actuar en caso que haya un caso de Covid positivo”. El ministro adelantó que en caso de detectarse un infectado se activará un protocolo ya establecido: “Primero informando al Ministerio de Salud porque ahí se activa un protocolo para casos positivos que ya es algo que se maneja desde Salud y está previsto. Siempre es fundamental que lo transmitan los expertos, es decir el área de Vigilancia Epidemiológica del Siprosa: los contactos directos, cómo se va haciendo la investigación para ver las mejores medidas de aislamiento, quiénes, cómo, tanto en el aula como de una persona de esa comunidad educativa fuera del aula”, precisó.

La virtualidad y las vacunas

“Hasta de las cosas más tristes, más difíciles queda una enseñanza. La primera ha sido la enorme capacidad del sistema educativo de sobreponerse a la dificultad de la no presencialidad y que haya clases aun sin que la escuela esté abierta. Ahí hay un ejemplo que involucra a los docentes, pero también a las familias y los chicos, ha podido haber educación cuando el mundo se detuvo”, analizó.

Lichtmajer observó que “el mundo se detuvo y la educación no: con la virtualidad, donde no llegaba la virtualidad con dos millones de cuadernillos, pero sosteniendo el vínculo. El primer aprendizaje es la confianza en el sistema educativo porque responde del mismo modo que va a responder ahora en el sentido de poder pensar una vuelta gradual y segura”.

“El hecho tecnológico deja primero herramientas que debemos utilizar y cada vez más, y luego la necesidad de ir cerrando la brecha tecnológica que ha quedado muy de manifiesto. Esto es un tema de agenda nacional que toca toda la Argentina y allí hay algunas decisiones del presidente en relación a declarar servicios esenciales la conectividad que van en esa dirección, el Plan Juana Manso que viene a restituir lo que era el Conectar Igualdad con características propias, hay signos promisorios en ese sentido”, celebró, e indicó que “la enseñanza que también deja en cuanto al vínculo entre las personas y la presencialidad es irremplazable”.

Sobre la posibilidad de que los docentes tucumanos sean vacunados contra el Coronavirus, celebró “el hecho de que se coloque a la docencia como grupo esencial, lo que la pone entre los primeros lugares”, y recordó que desde la cartera “hemos abierto por una cuestión natural y de sentido común en los actos de colación de grado del mes de diciembre un padrón para que se inscriban todos los docentes que pertenecen a grupos de riesgo porque naturalmente esas personas están exceptuadas del trabajo presencial” aunque continuarán abocados “al trabajo a distancia” porque “todos tenemos que poner una parte”.

'Unidad' ante los reclamos y la importancia de las escuelas

Respecto a aquellos gremios docentes o asociaciones de padres que han realizado cuestionamientos al regreso a la presencialidad en las aulas, consideró que “hay que escuchar a todas las voces, las demandas y sobre todo cuál es la preocupación”: “Hay una preocupación por los edificios escolares, la compartimos. No desconocemos eso, lo que hacemos es trabajar sobre eso, avancemos simultáneamente: vamos arreglando cada vez más escuelas y generando las instancias donde esa presencialidad sea posible”, sentenció.

En ese orden, manifestó que “si en un caso hay que esperar un poco más, esperaremos un poco más” porque “hay escuelas que están bien, hay escuelas que están más o menos y hay escuelas que están mal. Trabajaremos más en las que necesitan más”. También alertó que “hay demandas sobre el cumplimiento de protocolos” y amplió: “Nosotros proveemos los insumos, damos la guía de retorno. Todo esto lo compartimos. No hay confrontación, no debe haber. Es más una búsqueda de soluciones conjuntas porque la mayoría, docentes, funcionarios, somos adultos y creo que los más viejitos y los más chicos han sido los más afectados por la pandemia: los más viejitos por un motivo obvio y que son lamentablemente irrecuperables, pero los más chicos también han sido muy afectados porque su vida está muy asociada a la escuela”.

“Eso sí podemos recuperar. Hay que tratar de sobreponernos a todas las diferencias y los primeros vamos a ser nosotros: nunca descalificar y escuchar para tratar de hacer todo con sinceridad, mucho trabajo, inversión y políticas públicas de planificación para tratar de arribar a lo que creo que es que esos niños, niñas, jóvenes puedan tener a partir de marzo una experiencia de vuelta a la escuela que creo es muy importante y necesaria para ellos y ellas y en la que los adultos tenemos que poder ponernos de acuerdo”, reflexionó.

Lichtmajer sostuvo que de cara al regreso a las aulas “el mensaje tiene que ser de unidad, de que trabajemos en conjunto para poder hacer posible algo que es un anhelo de todos y todas porque no hay nadie que pueda decir 'no quiero que esto pase'” aunque contemplando que “después hay discusiones de cómo hacemos para que pase, para que sea seguro, ahí están habilitadas toda la creatividad, la inteligencia, la flexibilidad”. “No forzar situaciones, no confrontar, buscar las soluciones y también naturalmente ser sistemáticos y con mucho esfuerzo en el trabajo y prudentes en el sentido del cuidado de la salud que es siempre un tema central”, planteó.

“En el retorno se va a ir dando que las cosas van madurando, a partir de la semana que viene esperamos que se vuelva a ir produciendo ese vínculo, ahí se van a ir dando información, orientando a los chicos, a las familias. Lo primero es dar un paso y ese paso es el reencuentro. Cuando se da un primer paso después se pueden ir dando los pasos siguientes desde el reencuentro que yo creo que va a ser muy emotivo realmente, con todos los protocolos, con un protocolo muy puntilloso, un Manual de regreso. Pero me parece que hay una parte de la salud emocional, que también tiene que ver con la salud de las personas, y ahí la escuela ocupa un lugar muy importante. El mensaje es que podamos todos como sociedad ponernos de acuerdo para darle al sector más joven de la sociedad una posibilidad que realmente ellos la necesitan y todos la queremos”, sentenció.

Para finalizar, el ministro de Educación de Tucumán ponderó el rol de la escuela y su importancia en la sociedad más allá de la valiosa experiencia de virtualidad: “La escuela es el lugar central del tejido social y cultural en una sociedad. Por eso insistimos siempre tanto con la centralidad de la educación, porque la escuela tiene los contenidos, pero no hay ámbito de sociabilización más importante de la escuela, por eso es importante la presencialidad. Podríamos tener todas las herramientas tecnológicas, pero eso no reemplazaría la presencialidad. Naturalmente soy un defensor del uso de la tecnología, naturalmente para las familias la escuela es el gran ordenador, por eso ponemos tanto énfasis y reconociendo que no hay ningún problema que nosotros no reconozcamos porque eso es lo último que hay que hacer, no miramos para otro lado, reconocemos y ponemos esfuerzo, presupuesto, gente para que nos ayude a sacar eso adelante pero también reconocemos que es muy importante ir reconstruyendo ese vínculo que sólo la escuela y nada más permite”, cerró.