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"Quería un juicio oral": Roxana Teves y el final menos esperado

10 AÑOS DESPUÉS

Desde la Fiscalía de Delitos Complejos se elevó un dictamen para declarar la inocencia de quien denuncia hace más de una década haber sido estafada por “hijos del poder”. El detalle que inquieta a la imputada y a su abogado.

Roxana Teves, en Café Prensa.





“No me ha alegrado la noticia, al contrario”, reniega Roxana Teves, acusada de defraudación, asociación ilícita y privación ilegítima de la libertad luego de la muerte de su pareja, el empresario Augusto Severini, sobre el pedido de sobreseimiento elevado por la fiscal Mariana Rivadeneira, a principios de este mes.

La denuncia que la llevó a estar en prisión preventiva durante más de un mes a ella, a sus tres hijos y a su nuera, y de la que pudo librarse sólo después de firmar una renuncia al reclamo de los bienes que le correspondían como concubina del fallecido, fue realizada por Carolina Severini, hija del difunto, quien en pleno litigio civil por el patrimonio de su padre logró que el exfiscal Guillermo Herrera se acogiera a la hipótesis que indicaba que tanto Teves como su familia habían mantenido secuestrado durante años a Severini con el fin de enriquecerse a través de sus numerosos negocios comerciales. Quienes patrocinaron la acción penal contra la imputada fueron los abogados Edmundo Javier Jiménez y Ana Lucía Jiménez, hijos del actual jefe de fiscales, Edmundo “Pirincho” Jiménez.

El dictamen de Rivadeneira se basa fundamentalmente en la prescripción de algunos de los delitos que investigó en primera instancia Herrera y luego la fiscal Adriana Gianonni. Esta última había pedido en 2015 la elevación a juicio oral de la causa, solicitud que fue desestimada por el juez de Instrucción Penal de la III Nominación, Juan Francisco Pisa, quien consideró que las imputaciones no resultaban “claras, precisas y circunstanciadas”.

“Yo anhelaba un juicio oral y público”, esgrime Teves a eltucumano.com. “Había muchísimas cosas para probar, pero no me han dado la oportunidad; una persona común estaría bailando en una pata (por el pedido de sobreseimiento); se comprobaría lo que han hecho conmigo”, insiste.

Como el caso de Teves existen al menos otros cuatro en la provincia: “Rigourd”, “Valdez”, “Jorrat” y “Pérez”. Todos fueron señalados por el Colegio de Abogados de Tucumán hace cuatro años, cuando era presidido por Francisco García Posse. El entonces presidente había acusado al exfiscal Herrera de convertir casos civiles en penales para obtener réditos económicos mediante medidas coercitivas.

En la trama Roxana Teves apunta además a quienes curiosamente fueron sus representantes legales en la causa penal: Alfredo Falú y René Goane (h), hijo del exvocal de la Corte Suprema de Justicia de Tucumán, René Goane, recientemente jubilado tras una licencia que duró más de siete meses. Falú y Goane (h) fueron, según Teves, quienes le recomendaron firmar la renuncia a todos los bienes de su pareja, como único medio para salir del encierro.

“Estuvimos luchando para que llegue a juicio oral, muy raro para un imputado. Como al poder político no le convenía, se declaró la nulidad del pedido de la Dra. Gianonni”, afirma Juan Andrés Robles, actual abogado de Teves. Sobre el hecho puntual de la firma que despojó a su representada de lo que le correspondía legalmente, el letrado es enfático: “Es absolutamente ilegal, es lo primero que te enseñan en la facultad”.

En agosto, Goane (h) quedó registrado en un video filmado en los pasillos de Tribunales Penales mientras era increpado por Teves por su actuación en la causa que la despojó de los bienes que litigaba. Mientras hablaba por celular, a la salida de una audiencia ante la Cámara de Apelaciones en lo Penal de Instrucción, en el marco del proceso contra los médicos que interrumpieron el embarazo de "Lucía", el letrado negó conocerla.

En su dictamen, Rivadeneira sostiene que resulta inconsistente una privación ilegítima de la libertad, ya que Severini ─según el testimonio de testigos─ se comunicaba por teléfono con su entorno. Sin embargo, la fiscal se adhiere a la idea de que Roxana Teves no era su pareja, sino una empleada de confianza en la que delegaba gestiones como la renovación de plazos fijos en dólares registrados a nombre de ambos, dinero que ascendía a $USD 5 millones depositados en el Citybank, y que mediante una orden judicial fue transferido a una cuenta bancaria perteneciente a Edmundo Javier Jiménez.

“Eso es parte de la estrategia para sustentar el tema de defraudación por abuso de confianza. No le aceptan que haya sido pareja entonces dicen que ha sido empleada. Así le hubieran dicho que era pareja lo mismo ya le han obligado a transferir los bienes”, explica Robles sobre la desvinculación amorosa que esgrime la representante del Ministerio Público Fiscal.

Mientras el dictamen espera el aval de un juez de instrucción, Teves y Robles analizan qué nuevas acciones tomar. “Estábamos convencidos de un juicio oral y ahora se nos cierran esas puertas”, se lamenta el letrado. La imputada, por su parte, asegura que continuará dando batalla y desde hace una semana junta firmas en la peatonal para pedir la intervención del Poder Judicial tucumano en el Senado: “No puedo quedarme de brazos cruzados; yo no elegí vivir esto”, concluye.