Tucumán también florece con los ceibos, la flor que simboliza al país
PATRIMONIO CULTURAL
Declarada en 1942 como emblema nacional, su color llamativo atrae las miradas de tucumanos y turistas.
Imagen ilustrativa
De intenso y llamativo color rojo, El Ceibo fue declarado patrimonio cultural en 1942. El árbol, considerado como el símbolo nacional, desde el inicio de la primavera, empezó a florecer en Tucumán. Estas son algunas fotos que los comprovincincianos compartieron en las redes.
Foto de Tafí Viejo.
Este árbol emblemático florece en muchas zonas del país. Sin embargo, en la provincia tucumana, junto a Salta y Jujuy, se manifiesta uno de los tres tipos de géneros con mayor intensidad en color y de gran tamaño.
El Ceibo se caracteriza por tener un tronco retorcido y su copa se encuentra vestida de hojas verdes y pimpollos de rojo carmín que pueden ser utilizadas para teñir telas. Su madera, blanca y blanda, también es usada por algunas fábricas para producir artículos de peso reducido. Tiene un follaje verde caduco, es decir, que cae en otoño y renace en primavera.
La leyenda del árbol de la resistencia
Imagen ilustrativaUna historia popular con un espíritu triste: Anahí, una joven originaria de América que deleitaba a todos con su canto, fue capturada por los conquistadores que habían llegado a esta tierra. Según la leyenda, ella permaneció cautiva durante varios días hasta que, en un descuido de su guardián, logró escapar. Pero su libertad no duró mucho: al poco tiempo fue atrapada nuevamente por los colonizadores quienes decidieron que merecía la muerte en la hoguera. Los verdugos la ataron a un árbol y comenzaron el fuego, que parecía no querer alcanzar a Anahí. Poco a poco, las llamas fueron subiendo y convirtieron a la joven en un árbol verde con flores rojas.
A pesar de la crudeza del cuento, los pueblos que la transmitieron no identificaban al ceibo con aspectos negativos, sino que lo tomaron como un símbolo de fortaleza y valentía.
