Top

"El caído del cielo", de militante asesinado a santo popular

DOCUMENTAL

Tomás Francisco Toconás fue arrojado desde un helicóptero hacia Pozo Hondo, en Santiago del Estero. Desde ese momento, fue venerado como un santo militante.

Rezando frente a la tumba de Toconás. Fotografía de La Gaceta.





Tomás Francisco Toconás era un campesino tucumano que trabajaba como hachero en los ’70 en una zona cercana a Santa Lucía, Santiago del Estero, cuando los militares mataron a su amigo “el Zurdo” Giménez. Fue entonces que decidió sumarse a las filas del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), como manera de reivindicar a su compañero, más allá de que nunca había participado en política.

En pleno Operativo Independencia, en julio de 1975, Toconás fue capturado, torturado y arrojado al vacío desde un helicóptero. Su cuerpo cayó en Pozo Hondo, Santiago del Estero, y sus restos fueron identificados por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) recién en 2010. Desde el momento en que su cuerpo cayó del cielo, los tucumanos comenzaron a venerarlo como un “santo militante” al cual le pedían favores y le agradecían.

Más allá de la liturgia, un artículo en La Gaceta reflejaba que muchas personas que se dirigían a las Termas de Río Hondo contaron que desde un helicóptero a 500 o 600 metros de altura habían tirado un cuerpo.

El productor Modesto López prepara un documental sobre la historia de Toconás, del que participará el historiador y periodista de investigación tucumano Marcos Taire y que podrá verse en distintas salas de todo el país próximamente.

Taire inició en 2008 una investigación que culminó con la identificación de los restos de Toconás por parte del EAAF (había sido enterrado en los ’70 como NN). “El caso de Toconás fue importante, por eso se le dio mucho durante el Operativo Independencia y mucha gente no lo sabe”, comentó en diálogo con Página 12.

Según el historiador, la historia es poco conocida porque el Operativo Independencia, en general, es poco conocido. “Fue la antesala del golpe de Estado”, aseguró. “Además, Tucumán aún sufre las consecuencias del miedo y el terror. Aún hoy, si uno habla con la gente, en general, cuando se refieren a aquel período dicen ‘la época de la subversión”.