Sorteando obstáculos, Lucrecia lucha para ser el sostén de su hogar

Lucrecia tiene 20 años, egresó de la escuela como abanderada y actualmente está cursando 3º año de la carrera de Administración de Empresas en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT). Además, da clases particulares en su casa y es catequista los sábados para ganar algo de dinero, ya que es el único sostén económico de su casa.

Todo esto, sorteando los obstáculos que le plantea su discapacidad: le faltan los dos brazos y tiene la pierna derecha considerablemente más corta que la izquierda, lo que le impide caminar o moverse con normalidad.

Se traslada de un lugar a otros en una silla de ruedas que se encuentra en muy mal estado, que le fue regalada por “Teletón”, un juego de la televisión chilena. Esta silla no entra en su casa, que posee dos habitaciones y un baño. Allí habitan ella, su madre, su hermana de 22 años (quien tiene una enfermedad crónica) y su hermano de 15, quien asiste a la escuela.

Es por esto que Carlos Juárez, médico traumatólogo de San Miguel de Tucumán, realizó un pedido de solidaridad para Lucrecia, su paciente. “Ella es una verdadera heroína y necesita urgente de nuestra ayuda”, expresó. Y solicitó: trabajo para ella o su madre de 46 años -o cualquier tipo de ayuda económica (ya que no cobran ningún subsidio del Estado)-, una silla de ruedas con motor o cualquier tipo de mejora para su vivienda y sus condiciones de vida. Para colaborar, piden comunicarse a través de WhatsApp o SMS al +5493816787077.