"Todo es primero para los niños": Sara, la devota de la virgen que sueña con ayudar a un merendero de Tucumán

Sara Sarmiento tiene 60 años. Es delgada, amable y simpática. Cinco años atrás se sentaba por primera vez afuera de la iglesia de la Merced para pedir colaboración “para el sostén propio y de su familia”. Desde entonces y cada día, Sara se encuentra allí. La gente la conoce, la saluda y la ayuda.

El corazón de Sara es grande pues, lo que recauda afuera de la iglesia no es tan solo para ella, sino que lo poco que consigue y tiene lo comparte con un merendero de Manantial Sur. “Este merendero quedo sin sostén, nosotros los vecinos estamos sosteniendo a este merendero con la ayuda de azúcar, yerba para los niños, porque los niños necesitan y siempre están esperando su mate cocido, entonces para no cortarle seguimos, seguimos”, cuenta ante los micrófonos de eltucumano.

Sara es de familia numerosa, tiene cinco hijos y treinta nietos y, junto a todos ellos, asiste al merendero. “A pesar de mi situación económica yo colaboro, voy con todos mis nietos al merendero”, afirma.

Con mucha humildad le reitera a Franco Carletto que ella es devota de la virgen y de Jesús, que es “católica, católica”, dice. Mientras Sara realiza la nota, se escuchan voces de niños que la saludan, ella da media vuelta su cabeza y saluda con entusiasmo “hola, mi amor”, y explica: “Me quieren los chicos, estoy hace cinco años, obvio que me van a conocer”.

Sara cuenta que en el barrio hay muchas necesidades, es por eso que al pedir en la iglesia a veces consigue zapatilla o ropa y puede llevarla al merendero.

“Yo no tengo vivienda, estoy en situación de calle, pero vivo 15 días en distintas casas de mis hijos, yo estaba viviendo en un albergue y me ha agarrado un infarto y ya no me han querido dar el sostén. Para los medicamentos me ayuda el padre y la gente”, cuenta Sara sobre su situación actual.

Su rutina no termina en la iglesia de la Merced, sino que, después de las 12 se dirige hacia la iglesia de La Catedral y luego a la Mendoza. “Vuelvo a las seis de la tarde recién a la casa”, cuenta feliz, y agrega: “Todo lo que recojo primero es para los niños, después los grandes podemos salir, los niños no, ellos son indefensos”.

Pese a todo, Sara no pierde la fe. “Yo rezo todos los días, soy devota de la virgen, amo a la virgen. Cuando rezo pido por mi familia, por los niños, por la situación de calle, por el merendero, por el mundo entero”, confiesa.

En la oración, Sara aguarda los deseos para sus hijos y nietos. “Me gustaría que mis hijos y nietos estén bien, que nunca les falte el pan, así sea en una casita chiquita pero que estén bien. Principalmente hay que pedir por la salud”, dice.

Y al final el deseo y la bendición que le dio a Franco Carletto: “Que Dios me lo bendiga y la Virgen lo acompañe”.

El día de la Virgen de la Merced es el 24 de septiembre, ante esto el arzobispo de Tucumán brindo una conferencia de prensa para conocer el calendario de actividades. Mirá el cronograma y la entrevista a Sara: