Tucumán fue la provincia con mayor asistencia en las elecciones 2023

Quedan pocos días para las elecciones nacionales Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que el próximo 13 de agosto determinarán quiénes serán los candidatos a presidente y diputados nacionales en los comicios de octubre por las diferentes fuerzas políticas. Los resultados serán también una gran encuesta abierta sobre las posibilidades de los diferentes candidatos y permitirán reperfilar tanto las campañas como las estrategias electorales de los votantes.

Las encuestas que manejan los partidos y que tienen marcadas diferencias entre sí generan incertidumbre sobre los posibles resultados, pero hay un factor que las atraviesa a todas: la incertidumbre respecto al nivel de participación que tendrán estas elecciones. Los analistas coinciden en que "la gente" está cansada y no está interesada en las elecciones. Eso hace que no respondan encuestas y que los pronósticos sean difíciles de calibrar. Las PASO cobran otro valor a partir de estos factores.

El calendario electoral de este año comenzó con las elecciones de Neuquén y Río Negro del 16 de abril (previamente hubo elecciones en La Pampa, pero fueron primarias). En la primera, votó el 76,2% del padrón electoral y el triunfador fue Rolando Figueroa. En Río Negro, la participación fue más baja: apenas el 68,15% concurrió a votar y la mayoría le dio el triunfo a Alberto Weretilneck.

El 7 de mayo hubo otras tres elecciones: en Misiones votó el 71,03% del padrón y resultó ganador Hugo Passalacqua; en Jujuy participó el 74,74% y Carlos Sadir, candidato del gobernador saliente Gerardo Morales, se hizo con el triunfo; en La Rioja ganó Ricardo Quintela y la participación superó por poco el 70%.

Una semana después estaba planificado un domingo de superacción que incluía a nuestra provincia, pero los comicios tucumanos fueron suspendidos por un fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. También los de San Juan. Las elecciones en La Pampa, Salta y Tierra del Fuego sí se realizaron ese domingo 14. En la provincia del NOA, la participación llegó al 69,46% y el ganador fue Gustavo Sáenz; en el centro del país, el 73,93 de los pampeanos acudió a su escuela y la victoria quedó para Sergio Ziliotto; en el sur, fue un 71,28% del padrón el que votó y la mayoría le dio el triunfo a Gustavo Melella.

Juan Manzur se bajó de su candidatura a vicegobernador y apuró los tiempos. Las elecciones en Tucumán se programaron para el 11 de junio y ese día se definió el destino de la provincia para los próximos cuatro años. El nivel más alto de votación se encontró en este distrito en lo que va del año: un 84,94% de los tucumanos participó de las elecciones. El resultado es conocido: Osvaldo Jaldo arrasó y le sacó más de 20 puntos a Roberto Sánchez. Ese día también se votó en Corrientes (66,03% de votantes sobre el padrón, el ganador fue el radical Gustavo Valdés) y en San Luis (Claudio Poggi cortó con la hegemonía de los Rodríguez Saá y en total votó el 76,22% del padrón).

El 25 de junio se votó en uno de los principales distritos (desde lo demográfico) del país, Córdoba. Allí la participación no llegó al 70%: quedó en 68,2% y Martín Llaryora se impuso por sobre Luis Juez. En Formosa, ese mismo día, Gildo Insfrán consiguió un nuevo mandato en una elección con el 74,86% de votantes del padrón definitivo.

Sergio Uñac, gobernador sanjuanino, decidió desdoblar las elecciones en su distrito y la categoría de gobernador y vice se corrió para el 2 de julio (los demás cargos se eligieron el 14 de mayo, como estaba previsto). Esto le jugó en contra y su espacio perdió ante Marcelo Orrego. El 70,55% de los sanjuaninos votó ese domingo.

La última instancia provincial definitiva se dio el pasado domingo en Chubut. Allí, con el 69,28% de votantes, Ignacio Agustín Torres se alzó con la gobernación por un escaso margen ante Juan Pablo Luque.

Todos estos antecedentes son una mala señal para las expectativas respecto a la concurrencia electoral del 13 de agosto. Las elecciones provinciales suelen tener un mayor despliegue ya que se da un empuje de abajo hacia arriba por parte de quienes intentan acceder a cargos legislativos en concejos deliberantes o legislaturas. En algunos casos, como Tucumán, el sistema permite una mayor cantidad de candidaturas y con eso más gente operando para fomentar la participación. En las elecciones nacionales, salvo que haya una competencia pareja interna en los espacios que se presentan, es difícil que quienes no entraron en el reparto de cargos "expectables" jueguen a fondo, menos aún si las PASO no definen nada y son un simple trámite. En el oficialismo temen una apatía el 13 de agosto que les juegue principalmente en contra a ellos: la interna de Juntos por el Cambio incentiva a los votantes de ese espacio a participar, mientras que el sector que encabeza Javier Milei es señalado como "intenso" y se descuenta que asistirá a votar aunque no compita con nadie en su interna. Unión por la Patria puede sufrir una ausencia de votantes desilusionados con la gestión de Alberto Fernández como ya pasó en 2021. Tucumán dejó la vara alta en las elecciones provinciales y pareció ser un dato atípico del escenario nacional. Está por verse si el oficialismo logra una movilización similar a la del pasado 11 de junio y sumar votos a la  candidatura de Sergio Massa.