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"Contra la libertad de prensa": denuncian a una periodista tucumana

Ante la justicia

Irene Benito, quien se desempeña profesionalmente en el diario La Gaceta advirtió que le adjudican delitos falsos por ejercer un periodismo crítico. “No he cometido ni soy autora de ningún acto ilícito", expuso.





El abogado Alfredo Falú denunció a fines del mes pasado a la periodista de La Gaceta, Irene Benito, por los delitos de administración fraudulenta, atentado y coacción. Acusó además al ex presidente del Colegio de Abogados de la Capital, Francisco García Posse por haber dispuesto de forma irregular en diciembre de 2015 contratar a Benito a los fines de la escritura de un “libro de estilo” para la redacción forense que, según el denunciante, “nunca apareció”.
 
Por su parte, Benito defendió su inocencia en una presentación espontánea en la que se puso a disposición de la Justicia y advirtió la pretensión de utilizar el sistema judicial para cercenar su voz crítica. “No he cometido ni soy autora de ningún acto ilícito. La realidad es que la denuncia que me formula Falú, con su apariencia de naturaleza penal, tiene otro sentido y finalidad: es un ataque a la libertad de prensa. Por ello mismo debe ser archivada”, expresó.
 
En una nota publicada en la edición dominical de La Gaceta, la periodista subrayó que la quieren criminalizar por cubrir, por ejemplo, las repercusiones de las denuncias que el juez Enrique Pedicone presentó contra el vocal Daniel Leiva y que la maestranza especializada Elvira de las Mercedes Mayol formuló contra el vocal Antonio Daniel Estofán. “Se trata de actuaciones donde intervinieron altos magistrados judiciales. No fueron hechos inventados por LA GACETA y por ninguno de sus periodistas, sino que realmente existieron. Además, fueron noticias publicadas no solo con mi firma, sino también con las de otros dos colegas (Federico van Mameren y Álvaro Aurane)”, precisó. Además, afirmó que su labor como periodista profesional está respaldada por fuentes serias emanadas de actuaciones oficiales, judiciales y legislativas, es decir, de los propios protagonistas de las noticias.
 
“Resulta muy claro, por lo tanto, que imputándome la comisión de delitos lo que trata de conseguir es que me condenen como criminal, pero por mi actuación como periodista profesional. Pretende que se me condene por lo que hice como periodista y que haya silencio de la prensa en el futuro.

“La motivación del abogado Falú fluye claramente del texto de su denuncia y de sus aparentes fundamentos penales, porque su intención real es que la prensa guarde silencio cuando se presentan hechos de corrupción en los que están implicados funcionarios públicos”, añadió.
 
Benito subrayó que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) había destacado la necesidad de fortalecer el periodismo para aumentar la transparencia y la responsabilidad de las autoridades. “La Corte IDH dijo que, en una sociedad democrática, la prensa debe informar ampliamente sobre cuestiones de interés público que afectan bienes sociales y los funcionarios rendir cuentas de su actuación en el ejercicio de sus tareas públicas”, citó. Y agregó:resulta contrario a esto la solapada intención de intimidarme con falsas denuncias en el ámbito penal. Si por temor tuviera que dejar de escribir sobre cuestiones de evidente trascendencia pública, en las que están involucrados funcionarios y personas que voluntariamente se inmiscuyeron en tales asuntos, quedaría afectada la libertad de prensa y desvirtuada la esencia de mi profesión, que ha sido protegida por la Constitución Nacional para evitar toda posible desviación tiránica”.