"Estuvo mucho tiempo bajo el agua", contó la madre de Nahuel

Carolina había dejado a su hijo Nahuel en la Colonia de vacaciones de Prensa. Fueron a pie. Cuando dieron vuelta a la esquina, el niño de 7 años estaba con las dudas de cualquier niño de 7 años: "Él tenía miedo de quedarse solo porque era el primer día en la Colonia. Pero si yo me quedaba, no se iba a poder integrar con los demás chicos. En eso me dicen: 'Vaya tranquila, mamá. Los padres no se pueden quedar'". 

Cuando volvió a su casa, Carolina se dio cuenta que se había dejado una tacita y un par de zapatillas para Nahuel. Le dejó todo en el club de Nougués y Don Bosco y pidió permiso para darle un beso: "En ese momento mi hijo me dio el último beso. Antes de las doce del mediodía, me llamaron del club".

La mamá de Nahuel recuerda al detalle lo sucedido, ya en la puerta del hospital de Niños. Reproduce el diálogo por celular y comienza a señalar irregularidades: "Me suena el teléfono y me preguntan: '¿Usted es la mamá de Mateo?' No, mi hijo no se llama Mateo. ¿Tenía un shorcito azul con blanco? Sí. ¿Una cicatriz? Sí. No sabían quién era el chiquito".

"¿Qué ha pasado?", les pregunto. "Se ha descompuesto, diríjase rápido al Hospital", me responden. "Cuando llego, veo dos motorizadas y una (ambulancia) 107, que lo trajo a mi hijo, no fue una ambulancia de Prensa".

Enfermera de la Maternidad, Carolina entró en una crisis de nervios cuando llegó a Nahuel: "Mi hijo estaba entubado y yo ya sabía qué le había pasado. Después lo llevaron arriba y me dijeron que tenía severos daños cerebrales".

Acompañada por su marido Carlos, Carolina sacó fuerzas y relató la parte más difícil: "Me dijeron que Nahuel estuvo más de tres minutos ahogado. No lo sacaron al toque, sino hoy mi hijo no estaría muerto".

El abogado de la familia es el doctor Marcelo Santillán, quien remarca: "Nos dan muchas versiones que no condicen con lo que dicen los medios. Esperamos que se presten declaraciones, pero por los daños que sufrió Nahuel sabemos que estuvo mucho tiempo bajo el agua. El rescate no fue inmediato".

"Si a uno se le muere el padre, tiene nombre; si a uno se le muere el marido, tiene nombre; no es natural que un padre deba enterrar a un hijo de 7 años, con toda la vida por delante. No voy a poder ser mamá nunca más. Estamos destrozados, nos han destruido la vida", se quiebra Carolina.

Las versiones abundan, por eso la familia pide testigos: "Si alguien ha visto algo, que se dirija a declarar, que diga qué ha pasado. Los profesores (de la Colonia) nunca se han acercado. Han sacado comunicados de prensa pero nunca han venido a dar la cara, no sé qué le ha pasado a mi hijo. Mi hijo está muerto y nosotros estamos destruidos".

Acompañada por Carlos, papá de Nahuel, y el abogado de la familia, Carolina confirmó que están en tratativas con el Incucai: "Vamos a donar los órganos para que mi hijo siga dando vida, para que estos infelices no le trunquen, para que siga él en otro lado, siga dando vida y salvando. Mi hijo ha sido un héroe, ha sido prematuro, estuvo 30 semanas, 45 días peleándola, seis meses en cama para que pueda nacer, y ahora estamos vacíos, vacíos sin nada".

A través de un comunicado, la Asociación de Prensa de Tucumán (APT) señaló que “prácticamente todos los dirigentes y afiliados del gremio tenemos o tuvimos en algún momento a nuestros hijos en la colonia de vacaciones. Es un espacio recreativo, de esparcimiento para los chicos y sus familias. Lo que le pasó a la familia de Nahuel es tremendo y la verdad no hay palabras que puedan llevar alivio en estos momentos”.

 “Sentimos que una parte de nuestra familia se fue junto con Nahuel. Desde sus inicios la Colonia estuvo abierta no tan sólo para los hijos de afiliados gremiales, sino para los niños del barrio y para aquellas familias que buscaban un espacio de armonía y contención para sus hijos", agregó la APT.