El que no conoce a Francisco Ancharek, a cualquier Santo le reza. Es el creador de un video que dio la vuelta al mundo y este jueves cuenta su historia y jura: "No hay hinchada como la de San Martín".
Ahí viene El Loco Pancho, qué loco que está.
El que no conoce al Loco Pancho, a cualquier Santo le reza. Ahora que cada partido de San Martín deja mil historias para contar, la de Francisco Ancharek no puede faltar. Ahora que los videos de los hinchas trepados a la tela se reproducen en todas partes, aquí está el Ciruja fanático de 28 años que un día agarró un Galaxy Primer con la pantalla rota y subió el video que asombró a hinchas de todo el mundo: "Hasta Japón llegó. Todo el mundo lo vio".
No es casualidad que el recibimiento que marcó a fuego al Loco Pancho fue la noche de uno de los recibimientos más espectaculares que se recuerden en Ciudadela y una de las noches más difíciles también: el 17 de marzo de 2019, la despedida de Primera contra Boca. "El hincha de San Martín es único, inigualable. No hay otra hinchada como la de San Martín. Las conozco a todas. Ni Boca ni Rosario Central. No hay hinchada como la de San Martín. Y ese día que nos fuimos al descenso le metimos una fiesta única. Y el video registró eso, lo que es el hincha de San Martín de verdad: en las buenas y en las malas mucho más".
"Juegues en la Liga o en la A", canta el Pueblo Ciruja y El Loco Pancho da fe del origen de ese himno a la incondicionalidad, a la historia que trasciende cualquier moda: "Mi historia con San Martín es de toda la vida. Toda mi familia por parte de mi mamá es de San Martín: mi abuelo, mi mamá, mi hermano. Y el que me hace hincha de San Martín es Flay. Cuando estábamos en la Liga, iba casa por casa a pedir permiso a las madres y a todos los chicos de Villa 9 de Julio nos llevaba a la cancha. Yo tenía 5 años y con mi hermano y con todos los chicos íbamos en el famoso camión del Tata y alentábamos cuando estábamos en la Liga. Ahí me enamoré de San Martín".
Después de conocer el barro, de viajar por todo Tucumán, de agarrar toda la etapa del Negro Roldán para dejar la Liga, el Argentino B, el Argentino A, el Nacional B y volver a Primera en 2008, Francisco explica cómo nació el video que lo marcó a él esa noche y a toda una generación de pibes que le siguieron el legado: "Yo siempre me subí a la tela. Siempre alguno se cae, el árbitro quiere parar el partido, pero a mí nunca me pasó nada. Mi lugar siempre fue la barra, el paravalanchas, la tela. Pero ese día fue especial: jugábamos contra Boca y yo llegué temprano. Al video lo grabé con un Galaxy Prime, un celular común y corriente, incluso con la pantalla rota. Estaba ahí arriba con el celular en la mano, grabo la salida del equipo y lo guardo al celular. Llego a mi casa y al video recién lo subo a los tres días. Nunca imaginé lo que iba a pasar".
"El celular me explotaba. Me escribían por Instagram, por Facebook, desde España, desde Italia, hasta desde Japón. Yo no entendía lo que me decía el hincha japonés. Tenía que usar el traductor para entender lo que me decía. Hay videos de reacciones a mi video. Hay un mexicano hablando de mi video. No lo podía imaginar. Amigos de toda la provincia, hasta gente de Talleres con la que está todo mal me decía; 'Impresionante, loco'. Fue algo que nunca me había imaginado. Me conocieron todos", se embala Fran, quien ya es un referente en la hinchada de San Martín y ahora, que va con su hija y su señora a la cancha, trata de inculcar el ejemplo a los más chicos.
"Me identifican mucho detrás del video. Si se quieren sacar una foto, la sacamos. Vienen los más chicos y los cuido, les pedimos que no estén peleando, les remarcamos que son gente de nuestro club, que no se tienen que pelear, esas cosas. Los chicos más chicos se tienen que cuidar, tienen que respetar a la gente más grande. Y los más grandes los tienen que dejar que se diviertan: si se suben a la tela es porque están cumpliendo un sueño. ¿Sabés amigo lo que es estar ahí arriba alentando, gritando, cantando las canciones de San Martín?", infla el pecho El Loco Pancho, manija por volver a Ciudadela después de la locura que fue el último sábado.
"Cuando veo los videos del último recibimiento, la nota que le hiciste al hincha ayer, todo eso que veo me genera orgullo. Me pongo en el lugar de la gente que están haciendo videos nuevos y me pone muy feliz. Yo sé lo que es quedar marcado a fuego por un video así. Mis tías se querían morir, mi papá y mi mamá se reían, mi viejo que es misionero e hincha de Atlético me decía 'Cómo te vas a subir ahí!', pero mi mamá se llenó de orgullo cuando lo vio y sigue subiendo el video. Mi hija va a la cancha y sube videos para Tik Tok. Ella ya quiere subir a la tela, hace videos, empieza a gritar, se desgarganta, sueña con tener un video así como el mío. Y nosotros la apoyamos, pero también la cuidamos. No queremos que le pase nada. No hay nada más lindo que ver a tu hija en la cancha. Si mi hija entra a la cancha, ella está feliz. Es el mejor plan, lo único que pide. Si después quiere un McDonalds, vemos. Pero ya con ir a la cancha es feliz".
Sin cajitas felices ni cheddar, El Loco Pancho sonríe cuando llega a Ciudadela, encara a la plaza del viejo triángulo y arranca: "La previa siempre es ahí. Cuando era pibe llegaba con la caravana, sacábamos colectivos. Ahora que van pasando los años, que uno tiene familia, que voy con mi señora y mi hija, ya vamos directo a la plaza, paramos en la Roca y Pelle, nos juntamos con los changos del Oeste II, nos reciben con los brazos abiertos, y compartimos con la gran familia que es San Martín. Aquí la gente es muy compañera, es muy familiera. Si no lo conocés al que tenés a la par, ni importa: siempre hay un trago, siempre con La Mona al palo, siempre San Martín".
Con el sueño más vivo que nunca de volver a Primera, de volver a enfrentar a Boca, de volver a grabar historia arriba de una tela, El Loco Pancho eleva la apuesta y se despide a lo grande: "A estos días los vivo tranquilo. Todos estamos con la esperanza de que volvamos a ascender. Lo único que espero es que no nos caguen. Vamos todos con el club para adelante y no pierdo la esperanza de que este sea el ascenso y que nos mantengamos en Primera. Todos sabemos aquí que San Martín no es para el Nacional B. Somos un club enorme y tenemos que estar en Primera, pelear un campeonato en Primera, jugar una Copa Libertadores. Hay que llevar a San Martín a lo más alto. Como cuando estamos ahí en la tela, mostrando quién manda, de quién es la fiesta".
El video del Loco que vio el mundo.