Pocos clubes en la Argentina tienen una identificación tan clara con lo popular, como el Santo que ahora lo reafirma con la presencia de El Malevo en plena Ciudadela.
“En las malas, mucho más”, dice uno de los cánticos más conocidos por Ciudadela. El hincha de San Martín hace gala de su fidelidad aún en situaciones difíciles, adversa. No importan los resultados ni las tablas de posiciones, siempre habrá un Ciruja dispuesto a expresar su amor por el club y ahora se juntaron varios con el fin de plasmarlo en una obra de arte que ya luce en el Estadio más caliente del país.
Se trata de una escultura de 1,80 metros y 240 kilos que representa al Malevo, icónico personaje creado por el dibujante Ceferino Sirgo, allá por la década del 40 y al que muchos llaman el Típico Ciruja.
La iniciativa surgió del Mocho Sánchez, reconocido e histórico hincha de los Santos que se encargó de juntar a socios e hinchas para recolectar el dinero que se necesitaba para hacer la obra que fue esculpida por Atilio Roberto, artistas de Tafí Viejo que ya cuenta con larga lista de esculturas expuestas en diferentes puntos de su ciudad.
“Esto surge porque una me regaló una estatuilla de yeso del Malevo que yo tengo en mi casa. Ahí pensé que la teníamos que hacer grande y ponerla en la cancha porque es un símbolo nuestro”, explica el Mocho Sánchez en charla con
eltucumano.com.
“Yo conocía algunos trabajos de Atilio y me gustaban mucho y Daniel Chocobar, un amigo en común me puso en contacto con él y le propuse hacer la obra y él accedió”, agrega.
“La estatua fue colocada inicialmente en la esquina de Bolívar y Pellegrini para que los hinchas pudieran fotografiarse y después de unas horas fue trasladada al playón del estacionamiento donde permanecerá por el momento.
“Fue impresionante la cantidad de gente que se llegó a sacarse fotos. Quieron agradecerle a la comisión directiva y alos socios que colaboraron. A Gustavo Paz por su gestión y a Sergio y Amira Maidan que me ayudaron con el traslado”, acota el Mocho.
El Malevo es un personaje creado por Ceferino Sirgo a finales de la década del 30 para unas viñetas que salía por el diario La Gaceta, en la que cada club de la Federación Tucumana de Fútbol estaba representado por un personaje.
El de San Martín era un hombre que vivía en el barrio La Ciudadela y que trabajaba en el Mercado del Abasto. Era un tipo duro que siempre tenía un pucho en la boca y algunas cicatrices y marcas de peleas recientes. Usaba un saco rotozo, con la camiseta del Santo abajo y de su cuello le colgaba una bufanda con las letras SM, en alusión al equipo de sus amores.
Su contrincante era el Pituco, un hincha de Atlético que siempre lucía un traje impecable con una sombrerito, moñito y los bigotes bien cuidados. Su estilo de vida era muchos más refinado que el del Malevo, aunque en las historietas mostraban un respeto mutuo que era el reflejo de un fútbol menos violento que el de nuestros días.
En aquellas viñetas memorables también aparecía personajes como Ña Fede (representaba a la antigua Federación Tucumana), El Curita (Argentinos del Norte), El Bombero (Tucumán Central), El Gallego (All Boys), El Ferroviario (Central Córdoba), El Juliano (Sportivo Guzmán) y El Cuervo (Central Norte).
Con el correr de los años, todos estos personajes fueron perdiendo fuerza, al mismo tiempo que la Federación desaparecía y con ella en el fútbol tucumano se producía una grieta in superable entre los dos grandes y el resto.
Hoy por, solo El Malevo sigue presente en la cultura popular, apareciendo en pintadas y murales de los distintos barrios de la provincia, especialmente en La Ciudadela. La evidente identificación del Pueblo Ciruja con este ícono ahora queda plasmada a través de una escultura que fue colocada en el playón del estacionamiento de la cancha del Santo. Es la legitimación y oficialización de la identidad Ciruja que un artistas supo retratar hace más de 70 años y que hoy sigue vigente, orgullosamente, en uno de los clubes más importantes del interior del país.