Benjamín Guillou tiene 21 años, y estudiante de locución nacional y periodismo. Al igual que la mayoría de los argentinos, el pasado martes se comió las uñas, los dedos, las manos enteras y hasta los codos, en ese mar de nervios que fue el partido de la Selección.
Se rompió la garganta con el gol de
Marcos Rojo, repartió abrazos con la familia, se emocionó frente a la TV, y después, recién un rato después, se dio una vuelta por las redes sociales para ver las repercusiones.
"Estaba en
Facebook y vi un texto muy lindo que había escrito
Miky Calvo, de la dirección de Letras del Ente Cultural. Ahí se me ocurrió la idea de hacer este
video, le mandé un mensaje pidiéndole permiso para usar esas palabras, y me dio el ok. En ese momento empecé a grabar y editar", comenta el día después de su publicación, en diálogo con
eltucumano.com.
Las repercusiones llegaron de inmediato, y las imágenes con su voz comenzaron a
viralizarse. "El mensaje más lindo que recibí fue el de
Micky, que me dijo lo que hice fue tal cual lo que él sentía al momento de escribir", contó orgulloso. Las imágenes con su voz ya recorren centenares de celulares y monitores de todo el país.