Dos policías fueron condenados a prisión perpetua por el crimen ocurrido en marzo de 2018. La Corte Suprema de Justicia de la Provincia anuló la sentencia y ordenó que se repita el juicio.
Foto de Agencia Paco Urondo.
El 8 de marzo de 2018, Facundo Ferreira, de apenas 12 años, fue asesinado en la esquina de la avenida Nicolás Avellaneda y el pasaje Río de Janeiro, cerca del Parque 9 de Julio. Dos policías de la Patrulla Motorizada fueron señalados como los autores de los disparos que terminaron con la vida del menor: en octubre de 2021, Mauro Díaz Cáceres y Javier González Montes de Oca fueron condenados a prisión perpetua ya que los jueces Wendy Kassar, María Fernanda Bahler y Emilio Páez de la Torre los hallaron coautores de homicidio agravado por el uso excesivo de la autoridad.
Sin embargo, en febrero de este año la Corte Suprema de Justicia de Tucumán resolvió en voto dividido por 3 a 2 anular la sentencia. Daniel Leiva, presidente de la Corte Suprema de Justicia de Tucumán, al emitir su voto expresó: "No resulta ajustado a derecho el fallo que viola el deber de adecuada y suficiente motivación al condenar a los imputados, omitiendo analizar completamente los argumentos que sostienen sus teorías del caso y sin ponderar integralmente los elementos probatorios añadidos al proceso. En consecuencia, declarar la nulidad de los puntos II.-, VI.- y VII.- del mencionado pronunciamiento y remitir el expediente al Tribunal a-quo a fin de que, con una nueva Sala y previo debate, emita nueva resolución".
El abogado Carlos Garmendia, a cargo de la querella de la familia, dijo en su alegato final durante el juicio que "ningún Policía escuchó el pedido de ayuda o de refuerzos. Ellos habían decidido perseguir esa moto y que ningún otro efectivo supiera lo que estaban haciendo. Recién pidieron apoyo cuando habían cometido el crimen y solicitaron la ambulancia".
Macario Santamarina, defensor de González Montes de Oca explicó, luego de la anulación de la sentencia, que "la Corte declaró la nulidad del fallo, dijo que está mal hecho y hay que volver a hacer un nuevo juicio para clarificar esta situación. No se terminó el asunto Ferreira judicialmente".
El caso tomó trascendencia no sólo por tratarse de un niño de 12 años asesinado de un tiro en la nuca por la Policía, sino también por la defensa que hubo desde las autoridades de Seguridad a los acusados. El por entonces ministro del área, Claudio Maley, dijo que “no se trató de un caso de ‘gatillo fácil’, ya que los agentes actuaron contra un claro ataque y contra una agresión; como es su deber y obligación”. El exfuncionario cargó contra la víctima fatal y su entorno: “A pesar del trabajo del Estado, es responsabilidad de los padres o tutores de los niños el cuidarlos y es responsabilidad de ellos el hecho de que porten armas o que estén en la calle solos a esas horas”.
A esta versión apelaron los agentes para evitar una condena. En mayo de 2018, la fiscala Adriana Giannoni envió a Salta y Chaco una serie de muestras y prendas de Facundo para realizar un barrio electrónico, una prueba que en ese entonces no se realizaba en Tucumán. La pericia fue categórica: la víctima no había manipulado armas de fuego la noche en que fue ultimado por los uniformados.
Los acusados nunca cumplieron con prisión preventiva, a pesar de los reiterados pedidos de la Fiscalía. El juez Facundo Maggio rechazó dos veces la solicitud de Giannoni. Montes de Oca sí cayó preso pero por otro hecho: en septiembre de ese año robó una cartera en Lastenia. Este acusado también sumó otro factor comprometedor, ya que dio positivo para marihuana y cocaína en el examen toxicológico que le realizaron luego del homicidio.
Este lunes comenzará un nuevo capítulo y serán los jueces Stella Maris Arce, Alicia Freidenberg y Diego Lammoglia quienes deban escuchar los argumentos de las partes y dictar una nueva sentencia en un caso que enlutó a la provincia hace más de cinco años.
Imágenes y audios de la noche en que fue asesinado Facundo Ferreira: